04. | HERIDAS.

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durante el resto del día, jeongin no pudo evitar sentirse un tanto distraído por lo que había pasado en esa mañana. hasta se había chocado frente a frente con uno de los chicos de primero por accidente de camino al baño.

era como si de repente, su vida hubiera comenzado a mejorar de algún modo.

pese a que no tuviera amigos con quiénes estar, y sufriera bullying con frecuencia, ahora había un profesor que le caía bien. uno que parecía entenderlo a él.

minho.

obviamente, jeongin también pensaba que este le agradaba más, ya que el peli negro era bastante bonito. sin embargo, como era su profesor y era mayor que él, lo veía solo como algo realmente platónico.

al hacerse la hora de la salida, la lluvia finalmente llegó a la ciudad. solo que lo hizo de manera abrupta, generando que la mayoría de las personas caminasen con rapidez, huyendo de ella.

obviamente, en el apuro de entregar el cuestionario a tiempo, yang jeongin se había olvidado de llevar paraguas, y en ese entonces salía del colegio con velocidad, intentando correr por al lado de quienes si tenían uno, queriendo evitar mojarse demasiado.

no obstante, antes de que pudiera alejarse demasiado, oyó voces conocidas que lo hicieron bufar en voz baja.

nappun

jiwon se encontraba sujetando un paraguas, sosteniendo en ese instante el hombro de jeongin, quién con mucha fuerza, trataba de soltarse de este.

"no seas grosero, yang." heyoon, que estaba al lado, habló con suavidad. "no ves que jiwon evita que te mojes con la lluvia?"

"soy demasiado bondadoso." agregó este, sonriendo. "ahora, por qué no nos sigues? tenemos una sorpresa para darte."

"suéltenme!" jeongin continuaba intentando safarse, no pudiendo logarlo. "si no lo hacen gritaré."

"wow! va a gritar jiwon! cuidado!" heyoon lo burló, riendo con su amigo mientras ambos, arrastrando a tal, se alejaban del tumulto de alumnos que se iban de la escuela.

al llegar a un pequeño parque, el cual estaba detrás del instituto, jeongin notó que el resto del grupo no estaba, si no que sólo eran ellos dos y él.

"qué diablos quieren? ya he tenido suficiente con lo de la pintura." el menor se mostraba rudo, más no le duró mucho.

jiwon procedió a pegarle en el rostro con fuerza, generando que este se girase hacia la derecha con velocidad.

"acaso no te gustaba más cuando era calladito?" opinó, haciendo que su amigo asintiera. "qué pena que te nos hayas revelado."

"me preguntó quién le habrá dado letra para que se ponga así." heyoon arqueó una ceja, tomando su rostro con la palma de la mano. "acaso conseguiste novio, yang? por qué no nos cuentas?" rio sarcásticamente, pero jeongin no dijo nada.

"deberíamos darle la sorpresa entonces?" jiwon preguntó, llamando alguien por su celular minutos luego.

jeongin no entendió nada al principio. pero luego, vio que el mismo chico de primer año, con quién se había chocado por la mañana, se acercaba tímidamente hacia él, con una expresión incómoda en su rostro.

"yang, él es songho. songho, él es jeongin."

"uno de los nuestros nos dijo que hoy te cruzaste con songho por accidente, no jeongin?"

"qué?" el menor no entendía cual era el propósito de todo eso. "y? fue un accidente."

"ah, si claro. un accidente." jiwon hacía comillas en el aire, no creyéndole nada de lo que decía. "pues al hablar con songho hace un rato, nos dijo que lo intentaste besar cuando se chocaron."

"QUÉ?! ESO ES MENTIRA!" jeongin de repente miró con desprecio a aquel chico que desconocía, alzando la voz, generando que los otros rieran divertidos.

"pero songho nos lo dijo, verdad songho?"

"s-si." este respondió mirando triste a jeongin, luciendo incómodo por la escena que estaba presenciando.

"ya puedes irte. nosotros nos encargaremos." heyoon lo despidió, por lo que este salió corriendo con velocidad, dejando demasiadas dudas en el castaño.

acaso lo habían obligado a decir eso? acaso es solo una excusa para que puedan lastimarme?

"qué feo lo que haces, jeongin. y con un menor." mostraron falsa compasión en su tono de voz.

"deberías saber que, a pesar de que seas trolo, no puedes ser un trolo pervertido."

"no es justo para ellos."

"no, realmente no."

entonces, una vez más, ambos chicos comenzaron a lastimarlo, hiriendo en su mayoría, el rostro de jeongin, dejando marcas moradas y rojas en este.

el menor se sentía inutil, como si de repente, todas las esperanzas de que su vida podía mejorar, se echaran a perder. odiaba ser juzgado por los demás por lo que realmente era y odiaba que nadie pudiera defenderlo en lo absoluto.

sin embargo...

"DETÉNGANSE." minho gritó furioso, apareciendo de la nada en frente de ellos, provocando que estos se asustasen.

para su desgracia, jeongin ya tenía su mejilla derecha rosada y su ojo un tanto morado. 

de todas maneras, minho se acercó a los tres respirando furioso, dando miedo.

"m-minho, escucha-" heyoon se echó hacia atrás, asustado, queriendo excusarse, pero fue interrumpido.

"le llegan a tocar un pelo de nuevo y me voy a asegurar de que, no solo los expulsen del colegio, sino que tampoco puedan entrar a ninguna unviersidad." el peli negro habló con un tono perturbador, que incluso a yang lo incomodó, por lo que los otros dos asintieron, huyendo luego con rapidez de donde estaban.

segundos después, minho tomó a jeongin de la muñeca y lo condujo hacia su auto, alejándolo de allí, mientras la lluvia los seguía empapando a ambos, ahora sin tanta fuerza.

"estás bien? te lastimaron mucho?" el mayor preguntó rápidamente, tomando su rostro con ambas manos, examinando cuidadosamente el rostro del menor. "son unos desgraciados. realmente haré que los echen." agregó desviando su mirada brevemente por donde habían venido, mirando luego a yang otra vez.

pero claro, este se encontraba completamente ido. además de estar dolorido, sentía mucha angustia. era como si, de repente, se hubiera hartado del maltrato hacia él.

"jeongin...?" minho habló en voz baja, queriendo saber si el otro estaba bien, pero este no lo miró. "necesitas que te lleve a tu casa?"

pese a que podía meterse en problemas, jeongin no quería caminar hacia su hogar en ese estado. fue por eso que, aceptó la sugerencia de minho, y se introdujo en el auto que le pertenecía a él.

el viaje estuvo silencioso, más el peli negro lo miró seguido, queriendo corroborar que estuviera bien.

lamentablemente, para cuando estaban a mitad de camino, jeongin perdió la consciencia por unos minutos.

entonces minho cambió de dirección sin pensarlo demasiado.

"mierda mierda mierda." bufó al saber que, si alguien del instituto veía que llevaba a un alumno suyo, menor de edad, lastimado e inconsciente a su casa, de seguro podrían malinterpretarlo.

𝐌𝐈𝐎 | 𝐦𝐢𝐧𝐣𝐞𝐨𝐧𝐠 - pausadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora