─────── ⋆ ⋅ ✮ ⋅ ⋆ ───────
Freddy y yo nos encontrabamos en la habitación preparándonos para dormir, a pesar de que solíamos pasar casi todo el tiempo juntos, el hecho de dormir en la misma cama nos parecía extraño, inclusive parecía incomodar a Freddy, mas allá de verlo como algo normal, yo sentía que era algo que nos comprometería el uno al otro.
Bonnie: Me hubiera quedado en mi habitación, no quisiera molestarte
Freddy: No es culpa tuya Bonnie, mañana mismo arreglaré esa gotera para que no tengas problemas con eso
Bonnie: Gracias Freddy
Freddy: Si quieres, tu puedes dormir en la cama y yo dormiré en la sofá
Bonnie: No, descuida, yo dormiré en el sofá, yo soy el intruso aquí jeje
Freddy: Descuida Bonnie, no hay problema, no quiero que pases frío
Bonnie: Bueno, siendo así, hay suficiente espacio en la cama para los dos, si tú quieres pues podemos usarla ambos
Freddy: Estás seguro? —Preguntó algo sorprendido—
Bonnie: Claro, por mi no hay problema
Freddy: De acuerdo, aunque, yo duermo en boxers ¿Te molesta?
Bonnie: No, para nada, de hecho yo igual
Freddy: ¡Oh! genial, bueno, será mejor que durmamos, mañana será un día ocupado
Ambos nos quitamos los pantalones quedando únicamente en boxers, los míos hacían resaltar más mis muslos y mi trasero y los de Freddy resaltaba mucho más el bulto en su entrepierna, ninguno de los dos dijo nada y nos limitaron a solo observar, nos recostaron en la cama dandonos la espalda y deseandonos las buenas noches mutuamente hasta que ambos quedamos dormidos.
Al cabo de unas cuantas horas Freddy se despertó repentinamente, miró su despertador y se dio cuenta de que no pasaban de las 2 de la mañana, se levantó de la cama y fue al baño a orinar, de regreso a la habitación pudo observar con más detenimiento la espalda de Bonnie que a penas se cubría con la sábana, y más abajo se asomaba su cola, tenía apariencia de una bolita de algodón medio alborotada, Freddy se mantuvo de pie al borde de la cama contemplando aquella escena, no paso más de 10 segundos en lo que su entrepierna se puso completamente dura, tanto que lastimaba, Freddy no sabía que hacer, tenía a Bonnie delante suyo, expuesto y solo para el, una parte de el le imploraba interactuar con el cuerpo dormido del conejo, pero otra le recordaba que no era correcto hacerlo.
Freddy volvió a recostarse, esta vez con la vista hacia Bonnie, su corazón latía muy rápido, tanto que podía sentirlo, no quería hacer lo que tenía en mente, pero las ganas y el deseo pudieron más que la voluntad del oso.
Freddy: Bonnie? —Susurró— ¿Bonnie estás despierto?
No hubo respuesta, sigilosamente guío su mano bajo las sábanas y se acercó lo más que pudo a Bonnie, cuando lo toco comenzó a mover su mano a ciegas hasta que finalmente topó con lo que buscaba, el trasero de Bonnie, era grande y se notaba firme, acariciarlo despertó en Freddy un fuerte deseo por seguir explorando más allá del boxer, quería sentirlo, quería tocarlo con sus propias manos y sentir el suave pelaje que lo cubría, Freddy parecía fuera de si, se dejaba llevar por sus deseos, mentalizaba hacer cosas que jamás habría pensado que haría, Freddy no estaba conforme con tocar la tela del boxer que cubría las nalgas del conejo, quería más, se acercó despacio pero decidido hasta estar a unos escasos 5 centímetros del cuerpo de Bonnie, lo rodeo con un brazo y lo abrazo, bajo su mano lentamente hasta la entrepierna de Bonnie y al sentirla comenzó a acariciarla, despacio levantó un poco la cabeza hasta lograr ver cómo su mano tocaba la entrepierna de Bonnie, con la otra mano seguía tocándole el trasero y jugando con su cola, sabía que lo que hacía estaba mal pero eso no lo detendría, incluso si Bonnie despertaba no pararía, y así ocurrió, Freddy noto como lentamente los ojos de Bonnie se abrían por lo que poco a poco comenzó a hacer notar mas sus manos, acariciaba rápido y a veces presionaba, Bonnie estaba confundido pero de igual manera sucumbió al calor del momento.
Bonnie: F-Freddy? ¿Q-que estás haciendo?
Freddy: Shh, no digas nada conejito, yo me encargo —Volteó suavemente la cabeza de Bonnie hasta tenerla justo delante de la suya y lentamente se fue acercando—
Sus labios se encontraron cuando se acercaron aun más el uno al otro, los dos inclinándose y cerrando los ojos instintivamente, fue un momento de concentración muy largo, donde ambos exploraron la boca del otro, Freddy no dudó en conocer el interior de la boca de Bonnie, su lengua caliente y pesada y, como el resto del cuerpo de Freddy, vigorosamente juguetona, fueron poco a poco aferrándose al cuerpo del otro para así evitar separarse, fue un beso tierno y suave pero con lujuria y toqueteos, sin separar los labios y aún con los ojos cerrados, el propósito de Freddy no se hacía esperar y poco a poco comenzó a desvestir por completo al conejo, finalmente lo estaba haciendo, podía tocar cualquier parte del cuerpo de Bonnie quién ya había despertado por completo y era consciente de lo que estaba pasando, Freddy guío toda la atención de sus manos únicamente a recorrer el trasero de Bonnie y a rosar la punta de sus dedos justo en la entrada del conejo, haciendo presión e intentando introducir por lo menos 2 dedos, Bonnie yacía completamente dispuesto a la que fuera la voluntad de Freddy, de un momento a otro sintió como la atención del oso se había puesto en la entrepierna del conejo, movía sus manos de arriba hacia abajo lenta y rítmicamente, Bonnie no se quedó atrás, una vez consciente totalmente y con los ojos a medio cerrar, buscó la entrepierna de Freddy por debajo de las sábanas, cuando la encontró, inmediatamente hizo de lado la prenda que la cubría, estaba dura y caliente e inmediatamente al tomarla con su mano, hizo lo mismo que Freddy hacía con el, aunque Bonnie estaba totalmente despierto y consciente aún tenía la sospecha de que se trataba de simplemente un sueño, un lindo, cálido y lujurioso sueño, al cabo de unos minutos, Bonnie sintió como su vientre hormigueaba, sin decir nada dejo salir el fluido blanquecino, por lo que Freddy disminuyó su velocidad hasta dejar la mano casi estática, Bonnie seguía ocupándose de Freddy, y a los pocos minutos sintió como lo que tenía en la mano empezaba a palpitar para después sentir su mano húmeda, Bonnie también disminuyó lentamente la velocidad hasta quedar casi estático, y poco tiempo después, ambos dormían profundamente sin haber dicho ni una sola palabra.
— 𝟗 —
ESTÁS LEYENDO
𝕄𝕚𝕖𝕟𝕥𝕣𝕒𝕤 𝔼𝕤𝕥𝕖𝕞𝕠𝕤 𝕁𝕦𝕟𝕥𝕠𝕤 - 𝔽𝕣𝕠𝕟𝕟𝕚𝕖 (Congelada)
Hayran Kurgu𝑬𝒍 𝒂𝒎𝒐𝒓 𝒆𝒔 𝒂𝒍𝒈𝒐 𝒎𝒂𝒓𝒂𝒗𝒊𝒍𝒍𝒐𝒔𝒐 𝒔𝒊𝒏 𝒍𝒖𝒈𝒂𝒓 𝒂 𝒅𝒖𝒅𝒂, 𝒔𝒊𝒏 𝒆𝒎𝒃𝒂𝒓𝒈𝒐, 𝒂 𝒗𝒆𝒄𝒆𝒔 𝒆𝒍 𝒅𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒐 𝒉𝒂𝒄𝒆 𝒒𝒖𝒆 𝒅𝒖𝒆𝒍𝒂 𝒉𝒂𝒔𝒕𝒂 𝒅𝒆𝒔𝒕𝒓𝒐𝒛𝒂𝒓𝒕𝒆 𝒆𝒏 𝒎𝒊𝒍 𝒑𝒆𝒅𝒂𝒛𝒐𝒔.