regresa a mi [Superwonder]

capitulo 10

Kara.

A pasado una semana desde que ese sueño no sale de mi mente, sería genial que se hiciera realidad, no había dejado de pensar en Diana ni un momento y sabía la razón, me enamoré de ella desde el primer día que la vi y lo comprobé toda esta semana, cuando iba de madrugada y me escabullia en su habitación y la veía dormir, era tan hermosa, ahora me encontraba admirando a Laila, acariciándole su cabello, esta pequeña también robo mi corazón, sentía una conexión muy especial, me era imposible separarme de ella, le doy un beso en su frente, ya casi amanecía y no quería que diana me viera, así que caminó despacio pero fui sorprendida.

- ¿te vas de nuevo sin despedirte? - volteo a verla, se veía tan hermosa con el cabello desarreglado.

- a...yo... No.. lo siento - odiaba tartamudear, pero que le podía decir, me descubrió invadiendo su espacio.

- no me molesta, al contrario me encanta que estés aquí - se para de la cama y me quedo con la boca abierta al verla en lencería, se acerca  lentamente a mi y puedo admirar su cuerpo y sentí como poco a poco mi cuerpo reacciona ante tremenda belleza, ella se da cuenta que la estoy viendo de más, lo cual agachó la mirada rápidamente, siento mi cara arder.

- no me molesta que me mires, al contrario, no sabes lo que provocas en mi - sentía como mi corazón se aceleró, sentía que estallaría.

- yo... - no digo más pues soy cayada con sus deliciosos labios, para mí desgracia solo fue un leve roce y quería más pero no me deja, está mujer me está provocando.

- no sabes cuánto tiempo soñé en tenerte así de nuevo - ¿que quería decir con eso? ¿acaso ella y yo..? mis pensamientos fueron interrumpidos por ella - no sabes la ganas que tengo de que me hagas tuya - mierda.. trago con dificultad.

Me quedé helada, jamás pensé que ella me deseara, siento como poco a poco corta la distancia entre nosotras, va acariciando mi cara con su delicada  mano la desliza delicadamente hasta bajar a mi cuello, siento que mi respiración es cada vez más irregular, pasa su mano rozando mi pezón y eso hace que suelte un gemido, dios con tan solo el rose de su mano ya estaba excitada, otro fuerte gemido sale de mi cuando siento como agarra mi miembro con firmeza.

- no sabes cuánto deseo sentirte dentro de mi - demonios, si seguía hablándome así, tan sensual estaba segura que tendría un orgasmo.

- me estás matando - digo apenas en susurro, muerde su labio y se pone de rodillas, yo estaba hipnotiza por cada movimiento que hacía, no se en que momento ella hizo que sacará un fuerte gemido, dios... ella realmente sabía lo que hacía y me estaba volviendo loca, sentía que no aguantaría mucho, si seguía a ese ritmo - v..vas.. a se...r que...m..me..ven..ga... ahhh.. - no podía ni hablar del placer que estaba provocando en mi.