Capitulo 25

112 15 6
                                    

Jimin fue lo suficientemente astuto, y lo suficientemente genio, para llegar al club justo antes de que su padre entrara al vestuario para asegurarse de que el bailarin estuviera en efecto en el lugar, ya que una enojada y rencorosa Hana le había ido con el chisme de que Jimin no estaba en su lugar de trabajo; El joven llegó luego de que Jungkook se despidiera de él con un excitante beso que duró más de lo esperado y lo dejó con deseos de más, y sin importarle nada entró por la puerta del frente del club, pasando por alto la enorme fila que esperaba afuera corriendo y los guardias se hicieron a un lado de la entrada inmediatamente cuando reconocieron de quien se trataba. Minsu sospechaba que algo estaba a punto de suceder, así que se encargó de vigilar la oficina de Seojung para asegurarse de que no se percatara de la ausencia de su hijo, supo que todo sería un desastre cuando Hana pasó a su lado y le sonrió de forma burlona. Se puso en acción cuando vio al jefe consumido por su enojo saliendo del cuarto a toda prisa, Minjungk siguiéndolo detrás y Minsu pudo notar los pedidos de suplicas del señor Jeon al señor Park, ahí fue cuando decidió meterse e intentó disuadir a ambos hombres cuando vió a donde se dirigían, el vestuario de Jimin. Y como una llamada silenciosa que ansiaba por obtener una respuesta, el bailarin entró corriendo y cuando vió la situación que estaba ocurriendo justo afuera del sector de los vestuarios, no tuvo otra opción que salir y entrar por la ventana de su vestuario, ya que no había forma de pasar por alto si caminaba justo al lado de su padre, que sin dudas estaba enojado. Supo que su plan tuvo éxito cuando Seojung abrió la puerta, listo para gritarle y vió a su hijo sentado en el sillón del cuarto, ya listo para salir a bailar al escenario. Silenciosamente Jimin agradeció haberse puesto su ropa interior de encaje antes de salir de su casa esa tarde para ir a encontrarse con Jungkook, solo tuvo que quitarse la ropa y ponerse sus orejitas de gatos junto a la bata de seda transparente, y claro, disimular que todo estaba en orden y que había estado ahí toda la tarde.

-Dile a la estúpida de Yong que deje de inventar tonterías. -Le dijo Seojung a Minjunk, y el joven suspiró luego de que su padre pareció haber comprado su mentira. Y se tranquilizó al saber que no tendría problemas. Jimin y Minsu se sintieron aliviados, nuevamente habían salido de un lío con éxito y se habían salido con la suya, especialmente el joven bailarín que había tenido la oportunidad de compartir la tarde con el hermoso Jungkook. De todas maneras, había alguien que no estaba muy contenta de que las cosas no salieran como a ella le gustaban.


Hana se había tenido que aguantar los gritos de Seojung, le habían dicho que el tipo era duro pero no se imaginó que tanto; le gritó, la empujo un poco fuerte haciendo que chocara con la puerta e incluso la escupió por, supuestamente, "inventar tonterías de sus empleados" y para su sorpresa, hasta su suegro Minjunk la regañó por eso, y le frustraba saber que el hombre había tomado el lugar de Jimin en lugar del suyo, ella era quien se casaría con Jungkook en cinco meses después de todo. Solo les había dicho que Jimin no estaba en el trabajo, se guardó los demás detalles porque sabía que también le traerían problemas, aún más graves que este, si decía toda la verdad.

Era inteligente, pero muy idiota al demostrarlo... Y también muy rencorosa, así que se propuso no irse del club esa noche sin obtener su venganza y dejarle bien en claro a Park Jimin que ella era la persona que pasaría el resto de su vida con Jungkook, y que él era solo un pasatiempo al que el empresario le tenía ganas.

______________________________________________ -Jimin... -Minsu se acercó a su mejor amigo, quién se estaba relajando junto a los demás empleados en la barra mientras tomaba algo luego de su acto. - Tienes un cliente en el cuarto pasión.

- ¿Quién es? -Preguntó terminándose de un trago su bebida.

-Ni idea, solo tienes una forma de averiguarlo. -Dijo guiñándole un ojo. El joven bailarin se paró de su lugar y saludo a sus colegas antes de dirigirse al dicho cuarto, era una noche común y corriente en el club y no se esperaba algo que saliera de esa situación que comúnmente se vivía. Mucho menos lo que estaba a punto de pasar.

DULCE TENTACIÓN - KOOKMIN(Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora