Clímax

𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐒𝐞𝐬𝐞𝐧𝐭𝐚 & 𝐂𝐮𝐚𝐭𝐫𝐨

ʏ ᴇᴛᴇʀɴɪᴅᴀᴅ."

  Ultimo día en Bath.

Este viaje estaba entre los mejores viajes en mi vida, al principio pensé que necesitaríamos de un guía turístico para que nos mostrara la ciudad, sin embargo, Liam se encargó de darme el recorrido más completo y emociónate. Nadie pudo haberlo hecho mejor.

Visitamos tantos lugares que ya he perdido la cuenta.

Ahora se trataba de la última noche en la ciudad, la cual estaba siendo especial y memorable, Liam se ha esmerado mucho en los pequeños detalles, ha sido tan dulce y simpático esta noche.

En primera instancia tuvimos una cena en un hermoso y sencillo restaurante al aire libre, el clima estaba perfecto para la ocasión, charlamos tanto, bebimos una botella de vino completa, incluso me obsequio un hermoso romo de rosas blancas; y para culminar, un paseo en el puente Pulteney, a pesar de que era media noche el ambiente era simplemente perfecto.

Mire hacia abajo notando las calmadas aguas del rio.

— En la escuela obtuve varios reconocimientos, pero nada especial.

— Yo obtuve reconocimientos, algunos trofeos de algunas ferias, y en la universidad igual.

Le di una mirada.

— No voy a competir contigo, nunca ganaría.

— No tienes que hacerlo.

Resople, volviendo a poner la mirada hacia el rio.

— Ganar un trofeo es honorable, deberías de estar orgulloso de ti mismo, deberías lucirlo por todo lo alto. — Mordí mi labio inferior.

— ¿Sabes algo?

Desvié la mirada hacia él otra vez, metió su mano en su bolsillo y saco algo que me costó distinguir, y con una sonrisa sincera se arrodillo en una rodilla.

Una fría sensación me recorrió desde la cabeza hasta la punta de los pies, mi corazón tomo una pausa, solo para latir con mucha más fuerza a tal punto de impedirme respirar con normalidad. Aprete el ramo con fuerza.

— El único logro que quiero presumir eres tú, eres mi mayor trofeo, Blair.

Suspire llevando una mano a mi pecho.

— Liam...

— No sé qué decirte que no te haya dicho ya, tal vez que, he aprendido amarte con cada molécula de mi cuerpo, y que eres la mejor decisión amorosa que he elegido, me salvaste de haber tomado la peor decisión de toda mi vida. Ya eres parte de mí, Blair Kelly, estos dos años me han mostrado que no quiero pasar el resto de mi vida sin ti, y solo espero que tu sientas lo mismo porque aquí y ahora te estoy entregando más que mi corazón, mi alma. Entonces, ¿qué dices? ¿Te casarías conmigo?

Deje salir una respiración temblorosa acompañada de varias lágrimas. Lo amaba tanto.

Me agache y deje el ramo de rosas aun lado y me sacudí las manos, para luego secarme las mejillas.

— ¿Puedo pensarlo? — Pregunte en un hilo de voz.

Iba a hablar, pero las palabras no abandonaron sus labios, lucia como un niño pequeño y muy confundido, por un momento vi ese brillo en sus ojos opacarse.

Bajo su mirada un instante, como si estuviera buscando algo en el suelo, luego movió su cabeza de un lado a otro lentamente antes de volver a verme a los ojos.

Su expresión me quebraba el alma.

— Claro que puedes pensarlo, si es lo que quieres.

Tomé sus mejillas entre mis manos y lo calle con un beso, el beso más dulce que jamás le di.