Neji ¿Es gay? (NejiTen)

Vínculo

- Tres meses — ordenó el anciano al otro lado de la mesa

- ¿Acaso ya tiene demencia senil? Una semana — su voz era molesta

- Tenten-san... — trató de intervenir Hiashi y él le apretó la mano ligeramente para calmarla

- Dos meses — los dos observaron al viejo ¿en serio estaba negociando?

- Dos semanas — sí, su esposa estaba demostrando lo que había aprendido de sus padres sobre regatear

- Un mes — ella se mordió el labio y tanto el patriarca como él esperaron la respuesta

- Bien, un mes — accedió — pero ni un solo día más — hubiera podido jurar que iba a agregar la palabra "maldito" antes de decir día, pero se había contenido — Amor ¿por favor me prestas la mermelada? — ahora lo veía a él y le hablaba normal

- Entonces Hiashi — él le entregó la taza con lo que le había pedido — debemos adecuar la habitación contigua a la que usaron la semana posterior a su boda, el representante del Bouke y su esposa volverán a quedarse en los terrenos cuando falte un mes para el nacimiento del descendiente

- Así será

El resto de ese almuerzo transcurrió en silencio, Tenten a su lado casi había terminado de comer no solo lo de su propio plato sino la mitad de las otras cosas servidas en la mesa y ahora mordisqueaba feliz una galleta con mermelada, su apetito era más grande que su vientre y si alguien cometía el error de mencionar algo ella se enfurruñaba, hacía un puchero y se escudaba en que eran los antojos por su embarazo. Después de eso la dejó en compañía de sus primas mientras se iba a hablar con el patriarca de algunos pendientes, los dos estaban completamente sorprendidos porque el anciano hubiera cedido respecto al tiempo en que ellos tendrían que instalarse de regreso temporalmente por el parto de la castaña. El consejo había decidido que fuera tres meses antes, pues así como no había ningún precedente de un líder de la rama secundaria viviendo por fuera, tampoco lo había sobre ese tema. Hami, el anciano que solía tomar la vocería después de fallecer el que lo hacía antes había entrado al comedor para informarles la decisión y entonces se había dado esa negociación.

- ¿Ya saben qué será?

- No, Hiashi-sama. La ecografía es mañana

- Tu esposa se ve saludable — y lo suficientemente vivaz para discutir a pesar de su estado

- Lo está, los dos lo están — sonrió por dentro, le gustaba hablar en plural

Tenten estaba empezando el quinto mes de embarazo y una vez superadas las náuseas del primer trimestre decía sentirse llena de energía y feliz a pesar de las habladurías que parecían rehusarse a desaparecer. Porque sí, desde que su vientre abultado empezó a notarse había escuchado uno que otro murmullo por los meses que les tomó concebir a su descendiente, de nuevo salía a colación que ella era una tapadera y la demora era porque él no la tocaba en privado ¿hasta cuándo iban a seguir con esa estupidez? Sí, ellos sabían la verdad, así como sus amigos más cercanos pero eso no hacía que le molestara menos la forma casi despectiva en que la señalaban.

La relación con el consejo había mejorado ligeramente desde el día del cumpleaños de Hanabi cuando la castaña corrió al baño y los ancianos entrometidos decidieron activar el byakugan notando así el pequeño ser que empezaba a crecer, a partir de ahí al menos ya la llamaban por su nombre. Aunque podía jurar que antes de eso todos encontraban particularmente divertido hacerla enojar de esa forma pues era la única integrante de la familia que abiertamente los encaraba y por eso lo habían hecho hasta ese momento, aunque también debía tenerse en cuenta que en su estado actual Tenten estaba mucho más hormonal y se contenía poco en sus respuestas, por lo que no era el primer intercambio de palabras que tenía con el anciano y estaba casi seguro que no iba a ser el último, era algo bueno que hubiera regateado el tiempo porque si la hacían vivir en los terrenos tres meses antes del parto más el puerperio y no sabía cuánto adicional probablemente terminarían sin ningún vejestorio cuando el tiempo finalizara.