Sólo para valientes

13. La siguiente fase.

Zayn no podía pensar en nada, quería terminar con todo. Se sentía tan miserablemente que no podía seguir. Se sentía como si caminara en la oscuridad y ya no tenía fuerzas para buscar la luz, así que ella llegó a él, la luz lo abrazo.

Ambos chicos estaban con una maleta de sus pertenencias a su lado, ninguno de los dos parecía aterrado, en cambio, sus padres se veían preocupados y, hasta cierto punto, tristes. Los menores de sus hijos se irían, y aunque había una posibilidad de que sólo se tratara de una semana, había otra que se su estancia en Doncaster se extendiera hasta de 3 meses.

Después de unos 5 minutos, una de las jueces acompañada de un grupo de hombre llegaron al lugar.

— Buenos días —lo saludó a todos, a lo cual todos respondieron de igual manera, con un "Buenos días" —. Tal vez, muchos de ustedes sienta nervios y otros estén emocionados por esto. Se que los padres presentes sienten pánico por dejar ir a sus hijos —sonrió en forma de consuelo a todos los adultos que se encontraban ahí —. Pero recuerden que esta es una gran oportunidad para poder cumplir sus sueños, si han llegado hasta aquí ¿por qué rendirse y renunciar ahora?.

La mujer sonrió. Ella realmente tenía una gran habilidad para animar a los chicos y consolar a los padres que se encontraban presentes con únicamente sus palabras.

— Sé que es difícil, pero también sé que esto será una gran experiencia para todos ustedes, y no olviden que nadie pierde. Si dan su mejor esfuerzo, siempre habrá alguien que reconozca su esfuerzo. Les daremos unos minutos para que se despidan de sus familias y amigos.

Ella hizo una señal a los hombres que los acompañaban para que comenzaran a subir las maletas al pequeño bus en el cual habían llegado.

Maura y Anne abrazaron a sus hijos con ojos que delataban unas prontas lágrimas.

— Mamá, no estaremos tan lejos —le dijo Harry en consuelo a su madre aún abrazándola.

— Pueden ir a vernos —continuo Niall.

Las madres de los adolescentes soltaban lágrimas. Los chicos se acercaron a sus padres, al soltar a sus madres, para abrazarlos y que los adultos dieran unas palmadas en sus espaldas.

— Cuídense —aconsejó Des a ambos.

— No olviden llamar —habló Boddy.

— No papá —le contestó Niall a su padre.

Los chicos se dirigieron al transporte despidiéndose de sus padres con la mano, y aún estando dentro del bus, se despidieron de sus padres atreves de la ventana.

— ¿Crees que conozcamos personas famosas? —preguntó Niall.

— Tal vez si —le contestó Harry.

El camino fue rápido. Cuando el transporte llegó a la cuidad, se dirigieron a una zona muy lujosa de Doncaster, ahí había una gran casa –o mansión– que se dejó ver.

Todos dentro del bus estaban asombrados. El transporte se detuvo frente a las rejas de la gran mansión.

Todos los concursantes salieron corriendo del autobús y entraron al lugar. Atravesaron el gran jardín para llegar hasta la puerta. Un chico, tal vez de unos 18 años, fue el primero en llegar a la puerta para abrirla y dejar a la vista de todos el lujoso lugar.

— ¡Wow! — exclamaron todos.

— Bienvenidos a su hogar — dijo con una sonrisa la juez.

La juez fue la que les dijo a todos los concursantes cuales serían sus habitaciones. Cuando Harry y Niall llegaron a su habitación se quedaron completamente asombrados. Aquel lugar era enorme. Cada uno tenía su maleta en la mano.