𝙽𝚒𝚎𝚟𝚎

746 98 29
                                    

El invierno había llegado y con ello la nieve, siendo diversión para los niños que se divertían jugando con esta o siendo un problema para los adultos con sus automóviles y las calles repletas de este blanco mágico.

Nines y Gavin se encontraban en el parque dando una vuelta, todo gracias a que Nines había insistido en salir a ver la nieve, a lo que Gavin no se pudo negar.

Y ahí se encontraban, viendo como las ramas de los árboles eran decoradas con la nieve que cubría todo a su al rededor y como los niños lo aprovechaban para divertirse haciendo todo tipo de actividades con la misma.

El humano y el androide se encontraban sentados en una banca del lugar, mientras que el detective tomaba su infaltable dosis de café y el RK solo se limitaba a observar el entorno.

Haciendo que el ambiente se sintiera cálido a pesar del frío que había.

Nines sonrió al ver a dos niños colocando ramas como brazos de un muñeco recientemente hecho, pensando en lo que había leído hace unos días sobre de que el muñeco de nieve más grande tuvo árboles como brazos.

Gavin también observaba a los niños, solo que enfocado en un grupo que estaba haciendo una guerra con bolas de nieve. Rio de manera traviesa cuando una idea cruzó por su cabeza.

—Voy a tirar el vaso de café—. Dijo el humano de manera simple a la vez que se levantaba, el androide solo asistió.

Y luego de un corto tiempo Nines sintió como algo frío chocaba contra él y mojaba ligeramente su abrigo. Levantándose de manera instantánea de donde se encontraba sentado, encontrándose a un Gavin sonriéndole mientras que sostenía una bola de nieve en la mano.

No le dio tiempo a reaccionar cuando otra más chocó de nuevo. Esto era la guerra.

Nines formó una bola y con una puntería impecable le dio cerca del rostro a su pareja. Volviéndose mutua esta acción siendo evidente por su ropa llena de blanco.

Las risas de los niños eran acompañadas por la de estos dos adultos que gozaban de igual manera.

—¿Tregua?—. Dijo entre risas el androide extendiendo el brazo. Gavin lo miró dudoso acercando su mano hasta estrecharla. Pero unos segundos después el humano sacó de su manga una bola y se la estrelló en la cara al RK.

—Ahora sí—. Dijo Gavin para sonreirle y empezar a tomar rumbo a su casa, Nines solo atinó a mirarle con los ojos entrecerrados.

Y siguiendo sus pasos terminaron regresando a su hogar, donde terminarían acurrucados viendo como los copos de nieves anunciaban que la mejor época estaba llegando, y ellos harían todo lo posible para disfrutarla.

Simplemente Reed900Donde viven las historias. Descúbrelo ahora