*CAPÍTULO 21*

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Observo su número de contacto, niego, no lo quiero hacer, pero siento que sí. Tengo una mescolanza de dudas, ¿Por qué deberíamos volver a vernos? ¿Qué es lo que quiere tanto de mí? ¿Por qué me importa esto?. Suspiré de tanto hostigamiento de preguntas. Hoy es un día ajetreado, pero mi mente no está de acuerdo de poner sus pies a la tierra. Ese rubio de ojos mieles con su uniforme azul oscuro es todo lo que mi cabeza está sumida.

Miro mi reloj y tengo en cuenta que me queda media hora para ir al trabajo, así que me dispuse en vestirme con una camisa roja y unos pantalones de goma negro con un par de botas de cuero oscuro para empezar la mañana despabilando mi sentidos que fueron apaciguado por el alcohol de la fiesta.

Un año más de vida no viene solo... y no solo por el envejecimiento, sino por los destinos que vienen acompañados a dichos números. Estoy delirando...

—¡_____ ya baja! ¡El desayuno esta listo y Noah necesita con quien burlarse hoy! —me llama Grace.

Bajo cada uno de los escalones con mi bolso de cuero negro cargado de papeleos que debo terminar en la oficina, el olor a café y tostadas llega a mis fosas nasales, saludo a los padres de Agus y me siento frente a la mesa del comedor.

Siento la mirada del pequeño demonio frente mío y se que su interrogatorio no será nada factible de escapar de él, su mirada maliciosa me lo transmite, sus pequeñas sonrisas traviesas son todo lo que más detesto de mi "adorable" sobrino.

—Buen día tía _____ ¿Cómo has estado? Esa borrachera de madrugada parece que no te sienta bien, estás bastante pálida  —se traga un pedazo de tostada con mermelada de durazno mientras su mirada me transmite su burla, es casi imposible ya que pasó más de un día de la resaca.

—Noah no empieces a molestar a tu tía, suficiente ya con ese video, sigo con las ganas de estrangularte ¿Sabías? Eso no se sube, suficiente con que grabes para mostrar a los abuelos  —se queja Agus mientras toma una taza y se dirige a la jarra para servirse el café.

—Mamá ni que hubiese puesto un video desnuda de ti, aunque seguro que no tendría tanta fama como el que... —suelta un chillido cuando Agus le tira una oreja y le ordena que se calle antes de recibir un golpe de la chancla.

—Desayuna porque hoy tienes examen, tienes que estar bien concentrado para rendir, espero que me traigas buenas noticias ¿Eh? Todo este tiempo estuviste portándote mal —

—Si hago bien la prueba ¿La tía me llevará con mis amigos Ross y Riker? —le suplica el pequeño con la mirada.

Agus me observa bastante frustrada por la demanda de su hijo y yo asiento para que no se preocupe.

—Hablaremos eso luego Noah, ahora termina, tu tía se está apurando para ir a trabajar y te llevará a la escuela. Nos vemos luego cariño —se despide dándole un beso en su frente y luego al resto.

Termino el desayuno y espero unos minutos que Noah termine de ingerir sus tostadas para ir a buscar su mochila y su indumentaria. Juntos nos adentrarnos al vehículo, lo pongo en marcha y nos dirigimos a la institución.

—Mamá parece bastante molesta por estar cerca de los hermanos Lynch ¿Cierto? —me mira un poco preocupado desde el espejo retrovisor, yo doy un suspiro.

—Noah, hay asuntos de adultos que quizás no entiendas a pesar de tu inteligencia, no es algo fácil que te pueda explicar, pero ten por seguro que te contará tu madre en el momento que sea más seguro —

—Eso es injusto, estoy totalmente seguro que hay algo entre tú y Ross, como mamá con Riker, eso se les nota cada vez que los nombro, no pueden ocultarme cosas que en algún momento me voy a enterar y que no les agradará como reaccione, saben que odio que me mientan para enterarme por otros lados  —frunce el ceño mientras observa por la ventanilla el paisaje de la ciudad.

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