Luego del juicio, Jimin tomó unas cortas vacaciones en su ciudad natal.
Puede que hubiera ganado el proceso, pero igual lo había agobiado bastante el hecho de que todos dudaran de su capacidad como escritor. Además de la petulancia de ese estúpido riquillo con hipocondría.
Estuvo un total de tres semanas en Busan.
Salió con amigos de la escuela, tuvo una maratón de series con su hermano, cocinó con su madre, y le ocultó a su padre cualquier copia impresa de Sweet Love .
¡Dios lo librara de la vergüenza que su padre leyera algo suyo! Estaría bien si escribiera poesías, pero prefería que su padre continuara sin leer escenas de descontrolado sexo homosexual que él escribía.
Para cuando volvió a Seul tenía un total de veintitrés eventos agendados. Presentaciones, firmas de autógrafos y charlas. Joder, en menos de dos días ya quería pedir otras vacaciones.
Una buena tarde, cuando ya hacían tres días de su regreso, alguien tocó la puerta de su casa. Pero no solo tocó la puerta. No. Parecía que el dueño de la casa había salido sin la llave y ahora aporreaba la puerta como si hubiera pagado por ella.
Jimin se enojó tanto por la acción que abrió la puerta sin pensarlo.
Su sorpresa y enojo crecieron un poco mas al ver quien era su visita.
-¡¿Yoongi?!- exclamó -¿De donde sacaste mi dirección? ¿Me vas a demandar por algo mas?
Yoongi pareció mirarlo de arriba a abajo varias veces. Jimin se golpeó mentalmente por no ponerse nada sobre la ropa que traía, pues unas mallas negras y una casi transparente camiseta blanca no dejaban nada para imaginar. Y, hey, el chico era gay.
-Venía en la denuncia -dijo Yoongi todavía mirando algún punto entre sus muslos o abdomen.
-No sé a que vienes, pero no te quiero aquí. Podría ser decente y fingir cortesía, pero llevas dos minutos mirándome las piernas y estoy comenzando a enojarme.
Yoongi rió, finalmente mirando hacia su cara. Se cruzó de brazos y avanzó un paso hacia el interior del apartamento, sin poder entrar por el obstáculo que era el pie de Jimin.
-No me importa, Jimin. Tienes que ayudarme.
-¿Tengo? Disculpa, pero no, gracias. -Jimin le señaló la escalera. -Por ahí te puedes ir al carajo, Yoongi-ssi.
-Necesito que me ayudes.
-No veo porqué deba, así que disculpame pero...
Jimin hizo el ademán de cerrar la puerta, pero Yoongi lo tomó por los hombros y, como si bailaran, los giro para quedar él dentro de la casa y Jimin fuera de la puerta.
El escritor se quedó boquiabierto por el atrevimiento. Quería gritar de frustración cuando vio al castaño adentrarse en su apartamento. Caminó tras él y cerró la puerta.
-Necesito que te hagas pasar por mi novio.
Jimin boqueo. Ok, no esperaba ese movimiento.
-Tu famoso libro me hará perder una herencia millonaria. -continuó Yoongi, ante su silencio. -Nadie sabe de mi sexualidad, ni siquiera mi familia. Con el asunto del libro terminaron enterándose y mi padre quiere desheredarme. Debo mostrarle que soy serio, y que, aunque soy homosexual, tengo una relación estable.
-El libro no está basado en ti -repitió Jimin -Y no puedes demandarme porque tus padres sean unos cavernícolas homofóbicos, no es mi culpa.
-El juez te dio la razón, pero es demasiado exacto. Sigo creyendo que ....
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I do, of course I do 💍 Yoonmin
FanfictionJimin no sabía que escribir una novela basado en un personaje real le podía traer tantos problemas. Yoongi no sabía que su vida daría un giro de ciento ochenta por culpa de un escritor que no conocía. Sus vidas chocan contra la del otro. Un mini-se...