uno.

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Yoongi siempre fue reservado, tanto emocional como sentimentalmente, no era el mejor en sus clases pero lograba destacar en algunas cosas. Siempre tuvo pocos amigos y en la media logró solo familiarizarse con apenas dos chicos que lo protegían en ocasiones de un agresor en especial, Park Jimin de último año, mayor que él por dos años. Nunca supo por qué era molestado y agredido por aquél chico si no se conocían y jamás habían chocado de ni una manera, desde que había pisado ese instituto fue objeto de burla por él y solo él.

Cuando iba al almuerzo pocas veces lograba llegar sin que su agresor lo encontrara en los pasillos saliendo al patio o comedor. Hoseok se interponía cuando podía ya que no era bueno peleando, por lo que solo se limitaba a hablar calmado pidiendo que por favor dejaran tranquilo a yoongi aunque sea dos días a la semana y lo lograba, aveces no, pero era suficiente con las veces que lo lograba.

Muchas veces pudo sentirse incómodo con la mirada de Park sobre él en los recreos, desayuno y almuerzo, haciéndole sentir pequeño y sin ayuda solo por ser un "nerd" para él.

!Oye Min! ㅡ le llamó Jimin de la nada desde un extremo del pasillo de historia y geografía. ㅡ

Yoongi se volteó con miedo y sin terminar de girarse sintió como una manzana se estrellaba en su mejilla llegando a romperse por la fuerza con la que fue lanzada. Sintió sus ojos humedecer pero no quiso llorar ahí, le había dolido y rápidamente sintió como el calor teñía sus mejillas de vergüenza al escuchar como todos los que habían presenciado aquello reían. Vio a hoseok y taemin acercarse a él corriendo a su ayuda y solo pudo ocultarse entre ellos mientras sobaba la zona golpeada.

Jódete Park Jimin! ㅡ gritó taemin haciendo que el mencionado solo le enseñara el dedo del medio mientras se burlaba con sus amigos ㅡ

Se llevaron a yoongi de allí entrando a su salón correspondiente ya que les tocaba historia en ese preciso instante.

Yoongi rezó mentalmente que jimin hoy no lo agredieran a la salida del instituto, al menos no hoy. Y así fue, aseguró que sus plegarias fueron concedidas cuando estaba fuera de su casa sin ni un rasguño más que su mejilla hinchada.

Se adentró a su casa pasando de sus padres y hermano mayor llendo directo a su cuarto en donde se encerró y no salió hasta la noche para cenar.

¿Amor o Obsesión? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora