poor.

1K 110 10
                                    

Día viernes, último día de clases en la semana. Yoongi se paseaba por los pasillos mientras ojeaba su cuaderno de inglés ya que en unos minutos al sonar el timbre tendría examen de esa materia.

De pronto su cuaderno fue arrebatado por alguien que no vio venir hasta que levantó su cabeza y vio como jimin estaba a escasos centímetros de él sonriendo con burla por haberle quitado su único instrumento entendible para inglés. Suspiró con cansancio, estiró su mano para tomar su cuaderno y jimin lo levantó para que no lo alcanzara.

Ahora no jimin, tengo examen. ㅡ susurró levantando sus brazos para poder tomar su cuaderno fracasando al instante, pues jimin era un poco más alto y a la altura en que estaba su cuaderno él no llegaba ni porque se esforzarse. ㅡ

Dime, MinMin, tus amigos no han venido hoy? Estás muy solo. ㅡ se recargo en una de las paredes del pasillo mientras leía un poco de lo que había escrito en las hojas del cuaderno. ㅡ

Rendido, se decidió a caminar y solo mantener en su memoria lo que ya había repasado estudiando antes. Fue agarrado con fuerza del brazo y de un segundo a otro se encontraba estampado en la pared, jadeando bajito por el dolor en su espalda ya que había sido acorralado con fuerza.

Jimin lo había jalado, el pasillo aún estaba vacío y no contaban con cámaras de seguridad en aquél instituto. De eso siempre sacaba ventaja ya que sin ellas acusarlo sería una perdida de tiempo, nadie creería que él fuera tan malo.

Yoongi cerró sus ojos ya que jimin estaba muy cerca de él, fue tomado de la mandíbula al girar su cabeza, su agresor exigía que le mirara y lo hizo, temblando de miedo encontrándse con sus oscuros y rasgados ojos.

Park se acercó a su oído y le susurró un par de cosas haciendo que yoongi se escogiera en su lugar cerrando con fuerza sus ojos. Al sentir que jimin se alejó un poco de él abrió sus ojos lentamente sin mirarlo, su cuaderno llegó a sus manos nuevamente y corrió al recibirlo. Salió del pasillo casi tropezando con sus propios píes.

Si su tez de piel era pálida, no quería saber como estaba solo por el miedo que le recorría por todo el cuerpo en ese momento. La campana anunció la entrada a clases y sin encontrar a su amigos, entró al salón, preparado para el examen, se sentó en el último asiento del lado izquierdo. Levantó sus manos a la altura de su boca comenzando a morder sus dedos nervioso.

Las dos horas habían pasado volando, había recordado por suerte la mayoría de cosas puestas en el examen y ahora solo debía esperar al lunes para saber su calificación.

Estaba en el patio por dónde se la pasaban sus amigos, y efectivamente, ahí los pilló, los saludó desde su lugar sentado en uno de los bancos que habían.

Centró su mirada en un punto muerto del suelo junto a sus píes perdiéndose ahí recordando cosas que vinieron a su cabeza de manera random.

Cariño, qué es eso? ㅡ la señora min apuntó a la boca se su hijo menor y con desesperación se acercó más para verificar si su hijo estaba bien. No era la primera vez que lo veía con algún golpe en su bello rostro. Tomó entre sus manos la carita de yoongi acunando con cariño su rostro. ㅡ

Estoy bien mamá... me he golpeado por accidente en educación física. ㅡ mintió, claro que no era así, ese día jimin lo había metido a la fuerza a los baños junto a su grupo de amigos para golpearlo, patearlo y meter su cabeza al retrete. No hacía nada al respecto por miedo, y porque donde estudiaba no estaba permitido, tampoco le creerían, jimin es un maestro del engaño y con sus encantos de niño bueno cualquiera cree que es un pan de dios. ㅡ tranquila, soy torpe, no duele tanto.

Tranquilizó a su amada madre esbozando una leve sonrisa para luego abrazarla y besar su mejilla. Ella solo lo miró con preocupación, no era tonta, pero no quería arruinar la oportunidad de su hijo académicamente.

Si bien yoongi no era adinerado, tampoco pobre, pero no pertenecía a ese tipo de personas en todo en instituto, solo había ganado una beca por buenas calificaciones y perfecta asistencia. Su primer día fue bien recibido, no era gente mala, tal vez uno que otro lo miraban mal, pero la mayoría había sido bueno. Dos semanas fueron suficientes para que comenzaran las agresiones por parte de muchos, pero más destacable fue Park, Park Jimin.

Estaba agradecido de una cosa, era el último año de jimin ahí y por fin podría liberarse de él.

Sonrió inconscientemente negando con la cabeza un par de veces ㅡ podrás estar tranquilo en unos meses, aguanta un poco más Min Yoongi.

Pero no, el pobre yoongi no sabía lo que le esperaba con la salida de Park, no tenía idea de los planes que tenía su agresor. Reza por lo que venga Min, porque no te gustará.

¿Amor o Obsesión? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora