Zenitsu sentía la presión de ofrecer una melodía que fuera del gusto de su esposo para el día de su cumpleaños. Desde que recibió el shamizen, practicaba todos los días, a excepción de los días en los que algún cuervo llegaba indicando otra misión y debía salir. No tenia mucho tiempo, entre su cumpleaños y el de Tengen, solo era poco menos de dos meses, así que debía esforzarse.
Un par de semanas antes del gran día, el omega salía de casa junto a su instrumento, para que su alfa no escuchara la sorpresa que tenia para él. Lo sorprenderlo un par de veces que intento espiarle, regresándolo a casa bajo la amenaza de mantenerlo en abstinencia hasta año nuevo. Solo así, Uzui regresaba a casa para dejar al otro practicar.
De esa forma, pudo componer un par de melodías nuevas como regalo de cumpleaños.
Mas tarde, el ultimo día del mes de octubre...
El rubio despertó primero, además de su sorpresa musical, había pensado en algo más.
Afuera aún estaba a oscuras y, ligeramente se tornaba mas claro, estaba amaneciendo.
Tengen tenía una respiración suave, con su rostro en dirección al rostro del rubio y su brazo encima de este, de manera posesiva. Con cuidado, fue liberándose de su agarre, vigilando en todo momento que no se despertara antes y arruinara la sorpresa.
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Durante el medio día, Tengen despertaba de una siesta y un sonido en particular llamo su atención.
Salió hacia al pasillo, caminando en dirección de donde provenía aquella melodía, hasta que llego a la orilla donde estaba el estanque de peces Koi. Ahí, Zenitsu tocaba su shamizen. Reconocería aquella música donde estuviese.
Se quedo de pie, contemplando a unos pasos a su esposo, tenia la mirada enfocada en su instrumento, hasta que notó la presencia del alfa.
— ¿Uzui-san? —sus mejillas tomaron un color rojo, avergonzado de haber sido encontrado tocando— Lo siento, ¿mi música te despertó?
—Ya había despertado— camino unos pasos, acercándose y tomando lugar a un lado del omega —Esa melodía que estabas tocando ¿de dónde la escuchaste?
Hizo una pregunta sutil, ya esperaba la respuesta del rubio, sintiendo su corazón estrujarse al confirmar su respuesta.
—No lo sé...no lo recuerdo, simplemente sentí deseos de tocar y la música fluyo sola, aunque fue un poco complicado acomodar el shamizen con mi vientre abultado— con una sonrisa triste, contemplaba el agua del estanque, viendo a los peces nadar — ¿Tú la habías oído antes?
—Si— le sonrió y después miro hacia el estanque, su mirada se perdió por un segundo en esta, recordando el pasado— Hace un tiempo, alguien toco esa melodía para mí en mi cumpleaños, me encanta esa melodía.
Zenitsu sonrió al escuchar eso, miro abajo, hacia el shamisen y sus manos.
—Entonces la tocaré mas seguido, para ti— aquello sorprendió a Tengen, con una sonrisa correspondió a la amable sonrisa del omega.
—Gracias, eso me haría muy feliz— acerco su mano al rostro del rubio, acariciando su mejilla. Zen movió el rostro, acunándose mas en su mano, disfrutando de esa calidez.
El albino se acercó más, besando los suaves labios de su esposo.
Con las mejillas rosadas y una agradable calidez en el pecho, acomodo el instrumento para seguir tocando.
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Memorias de primavera ~UzuZen~ [Omegaverse] FINALIZADO
أدب الهواةUn año después de casados, Zenitsu por fin esta esperando al primer hijo de Tengen. Tras una discusión con él, Zenitsu se ve involucrado en el ataque de un demonio que le hace perder todo recuerdo relacionado con su alfa. Créditos de la portada: アス...