‹‹❛❀﹏ Donde la heterosexualidad de Hyunjin se va después de que conoce a Félix en un juego. ⿻ ─ ❨ 書 ❩ ⠈.⠈.⠈.⠈.⠈.⠈.
. ⌲◟⿻. - Félix estuvo esperando ese día durante mucho tiempo. . . .
⸙ historia completamente mía.
⸙ Es mi primer intento de histo...
—Hyunjin... — fue interrumpido por sus gemidos, apretando sus manos en la sábana, con sus ojos cerrados se centra en placer que su esposo le otorga, sintiéndose en las nubes.
Ambos cuerpos sudorosos, Félix mordiendo sus labios para no generar demasíado ruido. Hyunjin baja su rostro para unir sus labios, en un beso necesitado mientras sus caderas se encargan en dar justo en el punto del más bajo.
—¡Dios santo, ahí! — para Lee fue muy difícil reprimir aquellos, mandando al carajo que sus gemidos se escucharan en todas partes, al diablo los vecinos.
El ruido de sus pieles chocar era excitante para ambos, el ritmo de las estocadas cada vez eran más precisas, de igual forma para el menor de ambos era como música escuchar los jadeos de Hwang. Ver como el sudor baja desde su cabello desordenado para perderse en su cuello y admirar lo bonito que se ve con los labios entreabiertos y los ojos cerrados.
Arte.
Tres, cuatro, cinco estocadas más fueron suficientes para que ambos llegarán al clímax, Félix enterrando sus uñas en la espalda de Hyunjin ante la sensación tan placentera.
Los dos se tumban agotados sobre el colchón, sus pechos en un sube y baja tratando de regular su respiración. Después de tanto tiempo sin tener relaciones podían disfrutar de una noche juntos. Gracias a lo escaso que podían estar en un ambiente tan íntimo gracias a una responsabilidad más grande, su hija.
—Como adoro la manera en la que los bebés se crean. — murmura Hyunjin dejando un beso en la mejilla de su amado. — solo que entre hombres no funciona así y es mejor, creo yo.
—¿Están creando otro hermanito para mí?. — una voz dulce suena desde el marco de la puerta. Ambos se giran a mirar impactados a su pequeña niña de tan solo cuatro años ahí.
—Es algo largo que explicar mi vida... — Félix no podía con la vergüenza y Hyunjin solo se reía de eso.
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Bajando las escaleras, Hyunjin con la pequeña Suni en sus brazos, la niña jugando con el cabello de su padre mientras el mayor pasa sus manos por las costillas de su hija generándole cosquillas.
Hwang Suni, una bonita niña al cual adoptaron hace más de dos años atrás. También después de una larga discusión de cual apellido llevaría.
Para Lee al ver a su familia le enternece, la manera en la que ahora está con las personas que más ama le genera un sentimiento tan bonito. Su relación con Hyunjin si dio frutos después de todo, ambos con un trabajo bastante estable, Hwang siguió su carrera de actuación y ahora él era un coreógrafo profesional.
Desde que habían decidido adoptar a un bebé aquellos dos chicos fueron los más felices, siendo una decisión un tanto rápida por su edad que a ellos realmente no les interesaba. Ahora tenían a una bonita familia, viviendo en un apartamento en el centro de la cuidad, cerca de sus padres para que pudieran ver más seguido a la niña.
