Lesson 1-8

119 12 1
                                    

[TW]

El ruido de un cajón cerrándose me despertó, al abrir los ojos estaba acostada en la habitación de Satan y él estaba a unos pasos de distancia de espaldas buscando algo en un mueble. Me trate de levantar para ver qué era lo que buscaba exactamente, pero al escuchar las mantas moviéndose se dio vuelta y con voz calmada me pidió que no me mueva tan repentinamente. Lo mire extrañada al no entender hasta que me percate que lo que sostenía eran vendas, algodón y antiséptico.

-Si te mueves tanto puedes reabrir las heridas- ahora que lo mencionaba tenía vendas en varias partes de mi cuerpo, pero no dolían en lo más mínimo.

- ¿Por qué no duelen? Son muchos cortes y recuerdo que algunos son profundos, pero no arden ni nada- se acercó a mí y tomo mi brazo con delicadeza para empezar a cambiar el vendaje.

-Isadora preparo un ungüento anestésico- me mostro el frasco violeta que anteriormente confundí con antiséptico- Solo debes descansar y dejar que tu cuerpo se encargue de sanar por completo.

- ¿Isa lo hizo para mí? pensé que estaba enojada conmigo por lo de antes... por cierto ¿dónde está? quiero disculparme y darle las gracias por el ungüento.

- Dijo que tenía que ir a trabajar ya es lunes-

- ¿lunes? ¿dormí por un día completo? - Satan asintió concentrado en tratar mis lastimaduras- ...perdón

- ¿Por qué te disculpas? - levanto la mirada encontrando mis ojos

- Habías dicho que tenga cuidado y no haga nada estúpido y fue lo primero que hice- estaba avergonzada, solo logre que se preocuparan por mí y les cause más problemas- soy una idiota, perdón

-No voy a negar que algunas veces eres impulsiva y no piensas, pero no me agrada que te digas idiota- asentí cerrando los ojos, al hacerlo sentí sus labios posarse en mi frente y luego mis labios- jamás me vuelvas a preocupar tanto, los humanos son frágiles y no quiero perderte a causa de tu curiosidad.

-Prometo tener más cuidado honey pie.

Deje que Satan termine con los vendajes y cuando ya estaban listos se sentó frente a mí, se veía muy cansado como si fuera a quedarse dormido en cualquier momento. Seguramente no descanso bien la noche anterior estar preocupado. Antes de que le pueda preguntar si quería dormir en la cama pregunto- ¿Qué paso exactamente?

Pensé un momento ya que los recuerdos estaban fragmentados, mi memoria no es buena y es difícil recordar sin que me duela la cabeza- Emm... cuando salí de la papelería me encontré una luz que confundí con una hitodama, mi tía solía contarme historias de la mitología japonesa porque somos de allá y recordé que menciono que las hitodama aparecían cuando alguien estaba en problemas así que la seguí para ayudar- lo mire y él estaba escuchando con los ojos cerrados- la seguí hasta el cuerpo de un niño, estaba en el suelo inmóvil lo puse en mi espalda para traerlo de vuelta y buscar ayuda pero resultó ser un Kitsune.

-Entonces confundiste una hitodama con Kitsunebi

-Si... después llamo a sus amigos y me confundieron con mi madre que al parecer se llevaba bien con ellos y un chico Kitsune me llevo a ver un festival

-¿Qué?- me miro sorprendido- ¿No hizo nada indebido o sí? Si así fue lo voy a cazar y convertir en alfombra

-No hizo nada en específico. Simplemente no quería que me vaya y parecía estar muy obsesionado... tanto que fue quien me persiguió cuando me escabullí y -tuve que respirar hondo, todavía podía sentir el pánico del momento en el que se abalanzo sobre mi causando la gran mayoría de rasguños y moretones-.

-Está bien, no es necesario que lo digas en voz alta si no estas lista- tomó mi mano y la acaricio reconfortantemente

-No podía usar el poder del pacto porque había un sello en la entrada del bosque, no le preste atención, pero estaba ahí. Pude escapar porque el espíritu de un conejo lo distrajo - suspiré- no volveré a ir nunca más.

Unas horas más tarde decidimos ir a Hocus Pocus donde Isadora trabajaba para disculparme correctamente. En el camino encontramos a Asmo quien dijo que iría porque ahí se están vendiendo entradas para una fiesta muy importante y especial.

Al entrar Asmo se dirigió a una empleada de pelo verde corto vestida con un traje violeta obscuro, parecía ser el uniforme porque Isadora también llevaba uno similar solo que un poco más sofisticado. Me acerqué, pero no me noto ya que estaba anotando cosas en un cuaderno con unos cuantos libros cerca, parecía que era importante.

-Hola- dije no muy fuerte. Ella cerro los libros y los guardo antes de responder.

-Mc y Satan, bienvenidos ¿están buscando algo?

-¿Qué tipos de libros eran esos?- cuestiono el más alto de las tres.

-Libros de magia y conjuros- no agrego mucho más.

- ¿Para que los usas? - pregunté curiosa.

-Los uso para investigar cosas, es un proyecto personal- estaba claro que no respondería- ¿A qué se debe la visita? Se supone que deberías estar reposando, esas heridas no se curan solas.

-Exactamente por eso veníamos. Muchas gracias por el ungüento, sirve de mucho y también quería pedir perdón por, ya sabes, haberle dicho eso a Lucifer. Se que me debes odiar, pero quería que sepas que me arrepiento- dije mirando al suelo apenada.

-No te odio, no podría hacerlo jamás- al levantar la mirada no pude encontrar una gota de sarcasmo o falsedad en su rostro- Solo no lo vuelvas a hacer. La prueba había salido negativa gracias al universo y por eso quería mantenerlo un secreto. No quiero tener hijos y se lo deje muy en claro durante la charla, aunque al parecer él sí, si es que la oportunidad se presenta, por eso terminamos discutiendo- miro a un lado un segundo y luego volvió a vernos a ambos- lo único que pido es que no te metas en las relaciones de los demás, por favor.

-No lo volveré a hacer, en- el sonido de un celular me interrumpió.

-Es mío, esperen un poco- se alejó un poco y contestó- Hola... ¿pudiste encontrar lo que te pedí?... sé que es difícil pero no tengo mis notas y sos el único hechicero que me puede ayudar...-no pude evitar escuchar. Por lo que entiendo debe estar relacionado con el proyecto personal que menciono hace un momento- Solomon, no me importa que dije en el pasado... quiero saber que me estoy perdiendo ¿Qué tan malo pudo haber sido?... está bien. Le voy a pedir ayuda a Barbatos o lo puedo hacer yo misma, no te preocupes... adiós- colgó y volvió con nosotros.

-¿Era Solomon?- dijo Satan

-Si, se suponía que me ayudaría con mi investigación, pero dijo que ya no lo haría- suspiro y luego sonrió- no se preocupen, voy a poder lograrlo sola, pero me va a tomar mucho más tiempo.

-Está bien ¿Te gustaría ir a casa más tarde?

-No voy a poder, ya tengo planes después de cerrar. Escuche que abrieron una nueva sala de karaoke, podrían ir si no tienen nada que hacer, dicen que es el ambiente es genial.

-Podríamos esperar e ir los tres un día- dije sonriendo por el momento no quería ir a ningún lado- Bueno, debería irme a casa y seguir descansando, adiós.

Nos despedimos y volvimos a casa tomados de la mano. El dolor de las heridas había regresado y se hacía más y más insoportable con cada paso. En un momento Satan tuvo que rodearme con un brazo para que no pierda el equilibro por el dolor en mis piernas. Finalmente, llegamos a casa y pude descansar.

Souvenirs de Devildom/ Obey Me! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora