¿Cuál es el sentido de la vida?

Capítulo IV ¿Que me esta pasando?

Una semana después, igualmente en la noche, mis padres dijeron que tenían algo que decirme, que querían hablar conmigo.

Mi madre me explico la situación de mi abuela, y de una manera muy triste, me dijo que el día que fue al doctor (3 días antes) le dijeron que este ya no le había dado cita...
-¿Mmm y porque o que? Conteste algo confundido, pues no entendía que significaba eso.
Ella me explico que al salir ella y mi abuela, el doctor se quedo hablando con Ángel, mi padrastro, diciéndole que lamentablemente no había que mas hacer con mi abuela, que todo estaba hecho y que la mandaría a estar en casa descansando sus últimos días.

Obviamente no se lo dijo a mi abuela, pero Ángel se lo contó a mi madre y ahora me lo contaban a mi...

La verdad cuando me dijeron esto pensé en ponerme súper mal, pero mi mente no sentía absolutamente nada, no sentía ni dolor, ni tristeza ¡Nada!
Es como si una especie de escudo protector se hubiera activado para que no me hiciera daño a mi mismo.

¿Recuerdan cuando les dije que me quería suicidar? Bueno, de no haberse activado este maldito escudo quien sabe que me hubiera hecho, en verdad.

Comencé a pasar mas tiempo con mi abuela y a decirle cuanto la quería, pero al mismo tiempo deje de aferrarme a ella, la deje ir.
Empecé a sentir como si mi familia no me perteneciera, como si tuviera que acostumbrarme a vivir sin ella.

El 7 de enero en la tarde, a la 2:00 pm para ser exactos, mi abuela fue internada en el hospital donde trabaja mi madre, estuvo internada todo el día hasta la madrugada del 8 de enero como a la 2:00 am...
Mi abuela había fallecido.
Era lo mas raro que había sentido en mi puta vida, jamás había perdido a alguien tan cercano, es mas, no sabia como reaccionar; a veces se me salían las lagrimas, otras veces no sentía el dolor que creí que sentiría. Fue demasiado extraño, la echaba de menos...

Así se pasaron semanas, me aparte de mi familia, me la pasaba encerrado en mi habitación escuchando música, ya saben.

Pero no es hasta hace poco que me entere que lo que había hecho era una manera de pensar budista, les explico.

Si tu tienes una copa en la que tomas vino, la limpias, la cuidas y la pones en una repisa, esta bien. Pero que pasa cuando venga una tormenta y el aire tire esa copa al piso y la rompa?

Bueno, pues la copa en realidad siempre ah estado rota.
Solo disfruta el vino cuanto lo tomes, disfruta la copa en el momento y ya, que la copa no es totalmente tuya.

Eso fue técnicamente lo que mi mente hizo. Cree un escudo el cual hacia que si de pronto algo malo les pasara a mis papás no lo sufriría tanto como si no hubiera ese escudo. Obviamente me dolería, y ayudaría a que no les pasara nada si estuviese en mis manos, pero si pasara yo estaría protegido. Ya que no estaría aferrado de tal manera que el dolor fuera mortal.

Los siguientes días de su muerte me volví más religioso que de costumbre.
No podía soportar la idea que que mi abuela al morir simplemente eso; moría.
Mi esperanza de niño era, graciosamente, congelar a mi familia al morir para que en un futuro la ciencia nos pudieras revivir (mas adelante hablare de este tema).
Pero esto no sucedió con mi abuela, a lo que caí en la creencia de la vida después de la muerte, para asimilar mejor su muerte.

Tiempo después, aunque no lo soportara, regrese a la idea del ateísmo, que aunque me doliera mucho, no podía creer en un dios solo para soportar la muerte de mi abuela.
Aquí fue donde, me auto proclame ateo.

Así que; si no había una razón mística para permanecer junto a mi familia felices por el resto de la eternidad,
entonces ¿Porque debería de haber una razón mística para estar en este mundo?
La verdadera razón, la que todo el mundo quiere escuchar.
Y así me pase unos meses meditando hasta que creí haber encontrado la vedad absoluta de la razón de nuestro existir.