Midnight Murderers [Matt Bomer]

Capítulo 7: Racconto.

Charlotte POV's

Al día siguiente, apenas pude despertarme, eran más de la una de la tarde y aún seguía en la cama. Mis músculos apenas respondían, mi cabeza daba vueltas y mis ojos probablemente estaban inyectados en sangre. No recordaba nada de lo que había soñado la noche anterior, esa fue una buena señal, eso quería decir que no hubo pesadillas esta noche. Apenas pude sacar mi cuerpo de la cama y darme una ducha caliente, tuve que ponerme vendas de nuevo porque los cortes eran profundos. Cuando bajé las escaleras vi a mi madre cocinando quién sabe qué.

- Buenos días. - Sonrió, vi que aún llevaba mi pijama, sus cabellos estaban revueltos y parecía mejor que ayer. - Perdón... Buenas tardes.

- Buenas... - Hice un amago de sonreír. Miré lo que tenía en la mano, una sartén con huevos en su interior. Vaya... ya hacía tiempo que no comía algo así, tan... normal. Aunque haya estado viviendo sola durante ya casi cuatro años, a la hora de comer me dedicaba el tiempo de cocinar. A veces omelet, otras hot cakes de fruta, o algunas que otras veces panecillos rellenos de mermelada. Sentí el aroma de los huevos friéndose y me trajo recuerdos de todas esas mañanas en la casa Rockwood.

Me senté en la mesa que estaba en la cocina, preparándome un café.Mi madre se sentó en frente de mi, colocando dos platos con huevos revueltos sobre la mesa. Si la vieran dirían que es una réplica exacta de mí pero, obviamente, mayor que yo. Comimos en silencio, unas que otras veces se cruzaban trivialidades entre nosotras, luego lavamos y cada una se fue por habitaciones diferentes. Las cosas entre ella y yo nunca se definieron bien...

Creo que llegó la hora de explicarles, la historia desde un principio, vamos hacia los orígenes de ésto. 

Racconto...

June Moore - mi madre - en el pasado había sido una estudiante de arquitectura que se enamoró perdidamente de un imbécil de nombre Dan Rockwood, un hombre apuesto ojiverde, alto, esbelto y carismático. Ambos se enamoraron como por arte de magia y se casaron apenas salieron de la universidad. June con veintisiete años en ese entonces, creía que su esposo de veintinueve, trabajaba como inversionista y socio de grandes empresas, y esa era la explicación de cómo obtenía tanto dinero. Al poco tiempo se compraron una casa en New York, vivían cómodamente y eran felices, June había encontrado trabajo como arquitecta y por supuesto ambos ganaban bien. 

Los problemas empezaron cuando June descubre una bolsa de lona entre las cosas de su amado; revólveres, rifles, cuchillos, frascos con líquidos de diferentes colores y guantes de cuero. Ella sin dudarlo llama a su marido y le exige una explicación, ¿Quién diría que Dan fuese un asesino a sueldo? Cuando ella supo la verdad, Dan le aseguró que todo iría bien y que nada les sucedería a los tres; Así es, June estaba embarazada. Ella estaba aterrada por el hecho de que su marido cada vez que se iba a "trabajar" podría ser la última que se verían, pero Dan insistió y eventualmente aceptó. 

Ambos acordaron que ocultarían todo acerca de aquel trabajo a su futuro bebé y luego de nueve meses una pequeña había llegado a la casa de los Rockwood; Charlotte Rockwood. Cuando Charlotte cumplió los siete años, descubrió en el cuarto de su padre un revólver, solo Dios sabe como no murió de un balazo esa niña; milagro, supongo. Luego de aquel incidente, a Dan se le ocurre la brillante idea de enseñarle cómo disparar y cómo manejar armas a su pequeña hija, para que ella viera normal el tema de tener armas en casa. 

¡Vaya idea Dan!

A los doce, Charlotte ya había dominado perfectamente el tema de los cuchillos por sobre cualquier arma existente, su padre nunca había estado tan orgulloso de eso, y por su puesto, June estaba totalmente en desacuerdo. Dan y June habían tenido fuertes discusiones sobre eso, pero él siempre acababa ganando.