ᴍᴇʀʀʏ xᴍᴀsʜ! | ᴏɴᴇsʜᴏᴛs

Muérdago, un beso y sexo

De: Takito

Para: Szalin07

¡Mierda!

Había pensado demasiado tarde. El atolondrado de Deku ya estaba besándome debajo del muérdago. Sus mejillas rojas y sus labios torpes tomaban mi boca con una energía tímida pues a veces paraba como si se preguntara "¿Estoy besando a Kacchan?" entonces se daba cuenta de la realidad y continuaba dejándome múltiples picos.

¡Mierda le gusto a Deku? ¿Cuándo ocurrió?

Deku puso sus manos en mis hombros y me empujo. La puertas del armario temblaron, estábamos en mi habitación y en el piso de abajo la fiesta navideña continuaba. Nuestros padres algo ebrios estaban cantando en el karaoke con All Might. Podía oírlos en coro decir: "Santa claus is coming to town..." a la vez que sentía los vaivenes de mi santa claus sorpresa sobre mi. No creo que deba especificar que el idiota se puso ebrio y se desinhibió con beber un par de vasos de sake.

Deku jaló mi bufanda roja. Por fin me mostró su cara ebria y rosada, sus ojos encendidos y la boca hinchada de tanto besarme.

—Kaccchan —dijo haciendo círculos invisibles en mi pecho y se escuchó tan dulce como cuando teníamos cinco. De pronto mis piernas flaquearon a su linda voz.

¡Linda voz! ¡Mierda! ¡Deku es un hombre, los hombres no tienen linda voz! ¡Desde aquí puedo ver su asquerosa manzana de adán al hablar!

—Basta —gruñí empujándolo —Ya nos besamos bajo el muérdago hasta aquí se acaba.

Todo hubiera regresado a la normalidad. Deku y yo hubiéramos vuelto a la sala con nuestros padres y fingiríamos olvidar el incidente pero desconocía que la terquedad y la obsesión que Deku poseía siendo normal se triplicaba cuando estaba ebrio.

—¡No te vayas! —insistió y volvió a ponerme contra el armario.

Deku no me dejo ir. Se arrodilló con una sonrisilla traviesa y mis ojos casi se salen al ver como desabotonaba mis pantalones hasta sacar mi pene. Mi corazón se aceleró, no porque estuviera enamorado de Deku, ¡No claro que no! Si no porque al entrar aquí no pusimos seguro a la puerta. Si mamá entraba a mi habitación y veía a su hijo de dieciséis en esta escena bochornosa me pegaría y...

—¡Ah! ¡Deku! —El estúpido nerd me sorprendió al meterse la punta de mi pene a su boca y movió su cabeza de atrás hacia adelante. —¡No! —quise empujar su frente y echarlo atrás pero sentí sus colmillos raspándome y tuve miedo que me lo mordiera a causa de su borrachera y libido pendejo.

Vi todo el espectáculo y la sangre hinchaba cada una de mis venas hasta llegar a las venas de mis genitales. La boca de Deku me puso duro y sentí un poco de celos. Me lo chupó como paleta y se lo comió como si tuviera experiencia.

—¿Lo has hecho antes? —pregunte y aproveche que se alejó para respirar para proteger mi pene con las manos —¿Quién te enseñó, tontoroki o lentes? —reclame como si fuera su novio y me sentí raro —Tus amigos siempre me parecieron unos pervertidos...

Deku no me respondió. De hecho comenzó a quitarse la chaqueta verde que llevaba y a bajarse los pantalones. Me puse nervioso y fui a asegurar la puerta.

¡Mierda! ¡Qué estoy haciendo!

Oí que All Might y la tía Inko cantaban: "Era Rodolfo un reno, que tenía la nariz, roja como la grana y de un brillo singular..."

Y yo estaba rojisimo al ver como Izuku se quedaba en calzoncillos navideños con un Rodolfo y su nariz roja que se levantaba a causa de su erección. Me fui a sentar a mi cama y la boca se me abría al ver el cuerpo de mi amigo de la infancia. Mi corazón no dejaba de golpear tan duro el pecho.

—¿De verdad te gusto tanto? —dije al ver el tamaño de su erección. La tenía muy grande, era eso o es que era la primera vez que veía un pene ajeno.

—No es obvio, Kacchan —dijo con las mejillas rojas y se bajo su ropa interior. Su pene goteaba deseoso. Pase saliva como si tuviera ganas de tragarlo.

¡Qué estoy haciendo! ¡Deku me está influenciando!

Deje que Deku se me trepara encima. Quedé entre sus piernas y sin pensar acaricié lo redondo de su trasero mientras él rozaba mi erección con sus montículos de carne y sentí escalofríos cuando mi glande quedó entre sus carnes justo en su entrada cerrada.

—¡Joder! ¡No debemos! —dije y mis manos se alejaron de Deku —¡Ya bájate!¡La bruja podría venir y...!

Deku tomó mi boca y me calló. Me hizo arrugar la cara porque me estaba dominando. Metió su lengua, acarició mi cabello y lo estiró.

—¡Ah! ¡Kacchan me gustas mucho! —dijo con su aliento alcohólico al separarse de mis labios y pegó su frente a la mía. Me atacó con sus grandes ojos esmeraldas. Yo respire agitado, sus ojos siempre me dieron miedo, me perseguían constantemente y siempre estuvieron mirando mi espalda hasta ahora.

—Por fin soy tu igual, Kacchan —susurró y acomodándose mi pene fue hundiéndose con un cierto dolor en la cara. ¡Ah! entonces era virgen como yo pensé. Él gimió un poco cuando entró mi cabeza y luego mi carne se deslizó más fácil en sus entrañas. Sus manos se apoyaron en mis hombros y sus uñas se enterraron en el suéter negro que usaba.

—S-salte —me queje. Me sentía raro. Aún me quedaba un poco de cordura.

—No quiero aunque duela yo...

¡Maldita sea! Debí detenerlo pero el calor en su interior me debilitaba el carácter. Deku comenzó a moverse lento muy lento y yo eché la cabeza atrás. Estaba unido al nerd como nunca imagine. Mis latidos se aceleraban al igual que sus quejidos de dolor y de placer. Deku estaba borracho y me demostró lo que siempre pensaba cada vez que me veía.

El tipo siempre quiso montarme.

Entonces el nerd que creí que era inocente e inofensivo me empujó a la cama y me recostó, con sus manos en mis pectorales, dio saltitos eufóricos y mi pene salió y entró de un lugar tan prohibido como un ano masculino. Mi cara lo decía todo, disfrutaba de su movimiento candente sobre mi regazo. El sudor se me acumuló en la frente y mi cara se arrugó como la de un animal en el éxtasis.

—¡Maldita sea, Deku! ¡Joder! ¡Hijo de puta! —grite en el clímax.

Deku me torturaba con sus saltos y su trasero se movía como una prostituta bien entrenada, aunque eso fuera mentira, yo era un maldito virgen cualquier movimiento me hubiera parecido increíble.

Entonces oí a mis padres cantar en dueto "Blanca navidad" y el rechinar de la cama aumentó. Mi amigo de la infancia era un lujurioso de mierda.

—Deku ya, ya —dije aún echado en la cama y apreté las sabanas justo cuando mis padres cantaban: "Oh, blanca navidad, nieve..." y todo mi semen blanco inundó a Deku y el suyo se disparó frenético y cayó en mi cara. Después de respirar un poco inesperadamente Deku se cayó dormido y la mitad de su cuerpo retumbó en mi pecho.

—Lo que me faltaba —gruñí al oírlo roncar en mi cuello.

Enseguida me salí de él entonces me limpié y lo limpié y batallé en vestirlo. Deku dormía como piedra, no se despertaba con nada, así que lo acosté en mi cama y lo arropé. Deku se movió un poco y murmuró:

"Quiero un beso bajo el muérdago... Debo llevar a Kacchan bajo el muérdago y besarlo... Quiero robarle un beso de navidad"

—¡Estúpido, no te robaste un beso te robaste mi virginidad entera! —regañé pero él solo siguió murmurando cosas. Luego vi sus lindas pecas que medio se escondían debajo de mi cobija. Deku parecía un niñito y no se me quitó de la cabeza su pequeño cuerpo danzando borracho y eróticamente sobre mi.

¡Mierda ahora me gusta Deku!

-Fin-