ᴍᴇʀʀʏ xᴍᴀsʜ! | ᴏɴᴇsʜᴏᴛs

Una peculiar cena navideña

De: Takito.

Para: Suzune614

Y todo empezó con una sonrisa...

Si con una sonrisa fruncida, de labios partidos, chueca, gruñona y amargada... Bueno, olviden la sonrisa, la sonrisa es fea ¡Ah! ¡P-pero su voz! Deberían escucharlo es como oír ángeles cantar, habla como si tuviera una bocina atorada en la garganta y siempre escupe al gritar... ¡Bien, les estoy mintiendo! Su voz no es de ángeles si no la de un perro rabioso y sarnoso. Lo único que deben entender es que me enamore de su mirada, ¡Si su mirada! Esa mirada arrugada, furiosa y que siempre parece amenazadora como si dijera: "Te pateare el trasero tan duro que morirás desangrado del culo".

¡Ahhh! ¡Se que esto se oye mal al describir al chico que me gusta! ¡No puedo explicar su belleza interior! ¡Su mirada, si es terrorífica, su personalidad es descortés y su boca mal hablada pero eso no es lo feo de esta historia. Lo feo es que es un maldito héroe pero eso tampoco es lo peor de esta historia. Lo peor es que lo he invitado para navidad y no sabe que yo...

Soy un villano...

Contaré mis antecedentes rápido: Mi nombre es Midoriya Izuku tengo dieciséis años y soy hijo de una familia de villanos. Mi madre era una famosa y sigilosa asesina y ladrona de joyas gracias a su quirk de telequinesis y mi padre un pirómano escupe fuego que le gustaba ver a los edificios altos arder como antorchas. Ambos retirados.

Mis recuerdos de niñez eran ver a mi madre entrar a mi cuarto y después del beso de buenas noches me decía: "Miente, engaña, estafa, roba y nunca te arrepientas". Siguiendo esta herencia me he convertido en un villano principiante que incursiona en pequeños robos a casas. Si soy cleptómano.

Un día saliendo de una casa bonita con un botín me crucé al chico rubio en sus deberes de estudiante de héroe quien me tacleó y con una explosión me arrojó contra una azotea.

—Ladronzuelo de mierda voy a partirte la cara hasta que quedes como un chicle de sangre.

No era la primera vez que un héroe me derribaba y se me trepaba encima, siempre usaba mi poder telequinético, el cual heredé de mi madre, atraía cualquier cosa dura para golpearlos detrás de la cabeza. Esa ocasión fue diferente mis ojos verdes se abrieron de par en par y contemplaron con cierto temblor en las pupilas a sus ojos rojos tras su antifaz negro.

Su mirada era furiosa, su actitud se confundía con un villano y era la primera vez que un héroe me amenazaba de muerte en lugar de decir como todos los otros: "Tienes muchos problemas y un viaje directo a la justicia". Tal vez eso fue lo que me enamoró. Ese lado salvaje y a la vez heroico sobretodo esa condenada y torcida sonrisa. Sin embargo, a pesar de su fachada malvada es distinto a mí y tiene un horrible defecto.

Era un héroe bueno e incorruptible.

Aquella vez logré escapar de sus garras y los meses pasaron. Kacchan me hallaba robando y siempre me perseguía con sus explosiones mientras yo lanzaba una lluvia de proyectiles como flechas hasta desaparecer. Sus persecuciones repetidas solo me flaqueaban las piernas y se me aceleraba el corazón, confundiéndome a tal punto que terminé espiándolo.