3.

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Siempre apoyándote✿

Hinata.
Me encontraba caminado hacia la escuela, está vez no iría en bicicleta, así que salí un poco más temprano de mi casa.
No tenía ganas de ir, pero no estaría bien de mi parte tener ya dos faltas.

Mi madre ayer fue a mi escuela para arreglar la papelería de mi tranferencia y hablo con mi abuela al respecto, mi abuela estaba fascinada por la noticia pues ya hace tiempo no me ha visto y tenerme como acompañante en su casita le agradaba la idea.

Estaba llegando y veo a Kageyama en la entrada, en cuanto lo ví solo pude fruncir la mirada, estaba recargado en la pared cercas de la entrada.

"¿Ahora sí soy importante?" Pensé con un tono de enojo.

Al verme solo se paró firmemente, pensó que iba a detenerme a hablar, pero seguí mi camino al salón. Escuche sus pasos detrás de mi, pero igual no le di importancia y seguí caminado.

Era aún temprano, no había muchos alumnos en la escuela, Kageyama tomo la oportunidad de que nadie se encontraba en la zona y tomo de mi brazo haciendo que lo volteada a ver, lo mire con enojó, jale mi brazo para soltarme de su agarre.

- ¿Que quieres? -

Mi pregunta salió tranquila de mis labios, pero estaba llena de tanto coraje.

- Tu sabes bien que quiero. -

-  No, no se que es lo que quieres, así que déjame en paz de una puta vez, ¿Quieres? -

Kageyama abrió los ojos con gran sorpresa al escucharme hablar así.

- Pero que demonios te pasa, tú no eres así. -

- ¿Te sorprende? Wow~ espera deja recuerdo porque mi cambio tan drástico -

Simule en que pensaba en una respuesta.

- hmmm... ¡Ah! Ya lo recuerdo, ¡es por cierto idiota que quiso jugar con mis sentimientos como si de un partido de voley se tratara! -

- ¡Pues tú debiste concentrarte más en lo que hacías! -

- ¡Ah! ¡¿Ahora es mi jodida culpa!? Para informarte, siempre estuve al pendiente porque me importabas, pero ahora me vale una total mierda que pase... -

- ¡No hablaba de lo nuestro, hablaba del vóley, idiota! -

- ¡¿AH!? -

- ¡¿Porqué nunca te enfocas en las prácticas, qué acaso eres estúpido?! -

- Se acabo... Terminamos... -

- ¿Qué tanto balbuceas? -

- ¡TERMINAMOS, ESTUPIDO KAGEYAMA! -

Me doy la vuelta para seguir mi camino, quería llorar, dicho y hecho empecé a llorar
Iba camino al salón con la mirada baja sin importar con o con quien chocará. Choque de frente con alguien, solo me límite a decir un " lo siento " y seguir caminado, pero al momento de caminar fui detenido, mire a la persona que detuvo mi andar.

Era Tsukishima...

- Si vas al salón, entonces vas por el camino equivocado... -

Yo solo me le quede viendo, comprendió que no quería hablar, el solo empezo a jalarme hacia el salón.
En el transcurso el apretaba mi brazo, como si algo lo molestara, estábamos ya a unos pasos de llegar, pero siguió caminando, me le quede viendo a la puesta del salón para después voltear al frente.

🍂Alas de Zorro🍂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora