FILM 11

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ETHAN.

Al siguiente día en el colegio Ethan había estado menos perceptivo que cualquier otro día, pero se mantuvo completo durante el transcurso de las clases. Tal fue su confidencia en su actuación que Olivia ni Vivian le preguntaron si le ocurría algo, aunque si debía ser honesto, sabía por alguna que otra mirada de ambas chicas, que las dos tenían alguna sospecha. Después de todo no estaba comportándose de la misma manera que siempre.

Era curioso, o eso le parecía al chico, pues en cada compañero de clases, en cada hombre que se le pasaba por el frente, un miedo irracional se disparaba en su interior. Sabía perfectamente que ninguno de ellos era Maxwell y aun así su rostro aparecía en el de cada hombre. No sabía cuanto duraría esa sensación, solo esperaba que acabara pronto porque no le gustaba sentirse de esa manera.

Para cuando las clases terminaron, Vivian se fue más temprano de lo usual por un compromiso familiar dejando a Olivia y a él solos antes de lo normal. Ethan sabía que Vivian no era la mejor haciendo teorías o suposiciones, pues usualmente se equivocaba o simplemente obtenía la verdad a medias, así que no le preocupaba mucho que su amiga llegara a preguntarle algo respecto a su distinto humor ese día, por otro lado, Olivia había logrado descifrar unas cuantas cosas de Ethan incluso antes de que él mismo las aceptara o supiera, así que cuando se le acercó, una vez que la mayoría del salón estaba saliendo, no se sintió tomado por sorpresa.

– ¿Algo que contar, March? – aventuró la pelirroja mientras el chico guardaba sus cosas, él solo negó – sé que no entraste a tu casa después de que te dejé en tu casa, y realmente no es eso lo que me importa, quiero saber si estás bien.

El chico la miró, en silencio, sin decir una sola palabra, pero con dolor en sus ojos.

– Yo...

Y después no dijo nada más, pues tenía miedo de volver a llorar y no se sentía con energía de hacerlo, sin embargo, no dejaba de pensar que tenía que ir a su clase de fotografía y ver a Max ahí dentro. Había estado llorando durante suficiente tiempo, incluso sentía que se había quedado sin lágrimas suficientes como para continuar llorando.

– ¿Ves? Haz estado callado durante todo el bendito día, temo que Max te dijera algo, ese chico no me daba buena espina y aunque insisto, mi intención no es regañarte, al final del día haces lo que tú quieres, pero estoy segura de que si lo que fuese que hubiera pasado, es bueno, no estarías así...

Y fue ahí donde el chico dejó escapar una lágrima, se lanzó hacia su amiga sin importarle si aún había uno que otro compañero apenas dejando atrás el salón y entre sollozos y susurros dejó escapar lo que sentía en un incesante llanto, pero no le contó nada. 

– No es nada – trató de decir el chico – solo problemas en casa.

La chica lo miró con duda, alzando una sola ceja y nuevamente, dándole una mirada al chico como aquella que le dio el primer día, cuando Ethan sintió que Olivia trataba de leer su interior.

– Vale, si tú lo dices – aunque la pelirroja mantenía sus dudas, no quiso presionar a su amigo, esperando que le contaría en el momento adecuado – hoy te esperaré cuando salgas de tu taller, yo te llevaré a casa.

Sin dejar que se notara, Ethan respiró aliviado ante tal decisión de su amiga, por un momento incluso creyó que la chica si podía leer los pensamientos que tenía y que quizá, solo quizá, Olivia ya sabía todo y no tenía que contarle nada, aunque si así era, seguramente la plática que estaban manteniendo no sería la misma.

Ambos caminaron al salón del taller de fotografía, Olivia acompañó a Ethan dentro aprovechando que solo había dos alumnos más. El chico se instaló donde había sido su sitio de la clase pasada y sacó su libreta, dos minutos después Max entró al salón, este miró a Ethan y pudo sentir como en sus ojos se esfumaba una idea mientras giraba hacia donde estaba el escritorio que habitualmente usaba y se iba a sentar.

The Way I Fell [N.H.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora