El Arte De Las Espadas

capítulo 1

Pov. Kirito

Frustración.

Desesperación.

Terror.

Solo había pasado una semana desde el "tutorial" del juego y ya habían muerto más de 100 jugadores. Luego de que Kayaba terminará de explicar nuestra situación, todos los jugadores entraron en pánicos. Unos jugadores, como los beta testers  decidieron avanzar a la siguiente ciudad, otros decidieron acabar con su sufrimiento y los demás seguían en la ciudad de los inicios.

En este momento yo estaba sentado contra la pared de un edificio, con mis piernas pegadas a mi pecho y mi cara oculta.

Por el momento decidí quedarme en la ciudad, no sabía que era lo tenía que hacer.
Si avanza a la ciudad que seguia, sin la experiencia necesaria, corría el riesgo de que mi barra de vida disminuyera, también estaba la opción de quedarme aquí, pero no podía permitirme eso, al menos no por mucho tiempo.

Solté un suspiro y abrace más mis piernas. Tenía que hacer algo, no podía vivir de esta manera, si no salgo de este juego y muero, no volvería a ver a mi familia. Estaba frustrado.

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Pov. Normal

Mientras tanto a lo lejos de donde se encontraba kirito, se escucharon unos pasos que venían acercándose a él.

Kirito todavia tenía su cabeza escondida entre sus piernas, hasta que escucho a alguien frente a él hablándole.

"Te encuentras bien?" Pregunto con preocupación una chica mayor, como de unos 19 años, acompañada de tres niños a su lado (eran un poco más grandes que kirito).

Kirito al escucharla levantó su mirada y observo a la chica con detalle, él no se había dado cuenta, pero tenía lágrimas descendiendo por sus mejillas.
Al sentirlas las limpio rápidamente con la manga de su camisa, y miro nuevamente a la chica.

"Si" Dijo con su voz un poco entrecortada.

Kirito estaba un poco sorprendido, era muy raro no encontrar a jugadores aterrorizados. Pero, ella se veía diferente, parecía alguien a quien no le afectará tanto y supiera controla sus emociones.

"¿Quien eres?" Pregunto luego de unos segundos, y miro a los niños que la acompañaban atrás de ella.

La chica lo miro, comprendiendo a qué se referia, se arrodilló con cuidado a la altura en la que encontraba kirito, ella no quería asustarlo.

"Mi nombre es Sasha, cuál es el tuyo?" Pregunto con gentileza.

"Kirito" dijo con un poco de desconfianza, si algo había aprendido muy bien de la vida era que no se podía confiar en cualquier persona, no sin saber sus intenciones.

"Kirito eh?, ¿Que te parece si vienes con nosotros? Tu, al igual que ellos" dijo refiriéndose a los niños que estaban con ella "necesitan ayuda, te prometo que todo estará bien yo me encargaré de cuidar de ustedes"dijo con una voz suave.

Eso hizo que Kirito se pusiera a meditar durante unos minutos, tal vez esto era lo que necesitaba, alguien que lo ayudara o al menos eso era lo que él quería pensar, no tenía nada que perder, ella no parecía ser una persona de mal corazón.
Miro como Sasha se levantaba del suelo y extendía una mano hacia él para ayudarlo a levantarse.

Al principio kirito vaciló un poco, pero unos segundos después levantó su mano y tomo la de Sasha, levantándose del suelo, sin despegar su mirada del piso, sus ojos estaban un poco cristalizados y llenos de tristeza.

Cuando ya estaba de pie, Sasha pensaba hablar, pero kirito no pudo aguantar más y abrazo a Sasha con fuerza de la cintura, ocultando su cara en ella, Comenzo a llorar.

Todo el dolor y tristeza que había acumulado se estaba desbordando, la promesa que le hizo a su hermana se había roto, y necesitaba una forma de desahogarse.

Sasha al principio se sorprendió por esta acción tan repentina, luego miro a kirito con ternura y lo rodeo con sus brazos acariciando sus cabellos negro, en un intento de consuelo.
Los niños que venían con ella al ver esa reacción del pelinegro quisieron ayudarla, juntandoce en un pequeño abrazo grupal.

Paso alrededor de media hora y kirito  se había quedado dormido en los brazos de Sasha. Al darse cuenta, Sasha lo recogió con cuidado, como si de un bebé se tratase y comenzó a caminar seguida por los niños que estaban preocupados.

"Crees que se encuentre bien?" pregunto una niña mirando a kirito.

"Si, después de todo lo que ha pasado, me sorprende que haya sido tan fuerte" miro a kirito, se veía tan tranquilo, como si todas sus preocupaciones se hubieran desvanecido.

Caminaron un rato y lograron llegar a la entrada de una iglesia abandonada que estaba situada en la ciudad.

Al principio Sasha no tenía pensado que estaría asiendo esto, cuando comenzó el juego, ella había entrado en pánico al igual que todos, ella no quería estar ahi, incluso estaba considerando la idea de termina con su vida.

O al menos eso era lo ella pensaba, hasta que encontró a unos niños llorando desconsolados, sin saber que era lo que les iba a ocurrir, o si saldrían de ahí, entonces ella entendió que si esos niños estaba aquí, significaba que habría más como ellos que necesitarían ayuda, eso la hizo tomar la decisión de querer hacerse cargo de ellos, sin importar la circunstancia.

Ella encontró esa iglesia, donde se encargaba de cuidar de los niños, una tarde ella decidió salír a ver si alguien necesitaba ayuda, acompañada de ellos, hasta que logro ver a kirito a lo lejos sentado en el suelo.

Sasha soltó un suspiro y miro el cielo, ya iba a anochecer, miro a kirito una última vez, y entro a la iglesia, con los niños corriendo a su lado felices.
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Espero que le allá gustado.

En fin ..... Gracias por leer!