Eternidad

Capítulo 4

En la mañana siguiente el sol que entraba por la ventana logro despertar a las criaturas que yacían acurrucadas, el más pequeño no se había despegado de su pecho en toda la noche mientras Wei Wuxian lo abrazaba suavemente.

- Buenos días Lan Zhan, es hora de despertar~ -hablo en un bostezo mientras movía con cuidado al pequeño, pero este seguía con los ojos cerrados – Vamos A-Zhan, tenemos que desayunar, no tienes hambre?

- Si~- respondió mientras aún seguía sosteniendo una de las colas felpuda de Wei Wuxian entre sus manitas.

- Bien, iré a pedirlo entonces...- hizo el amague de querer levantar el cuerpo de Lan Zhan pero este se aferró a él con fuerza- Lan Zhan?

-...-lo miro intentando decirle que no lo dejara, pero las palabras no salían de su boca.

- Sólo saldré un momento, sí? - no logro que lo soltará, al contrario, lo agarro con más fuerza al parecer- Bien, entendí entendí... - se río mientras se levantaba sujetando a Lan Zhan y después ponerlo de pie sobre la cama - Vamos a cambiarnos para bajar a desayunar juntos...-

- Mm...- sus ojos brillaron al ver la dulce sonrisa de su ahora salvador.

El mayor le puso una túnica superior celeste claro con detalles en azul oscuro en los bordes de las mangas y el final de las túnicas, también le coloco una faja y cinturón que hacía juego.

Cuando termino de arreglar los detalles de su vestimenta lo acomodo en el asiento del tocador que tenía la habitación para peinar su cabello en una media cola sujetándolo con una cinta celeste cielo, decorándolo con un tocado de plata y una horquilla del mismo material.

Cualquiera que lo viera se quedaría fascinado ante la belleza que tenía el pequeño felino ahora que estaba limpio y bien vestido.

Wei Wuxian se quedó embobado por un momento con lo hermoso que se veía hasta se podría decir que había brillos a su alrededor y en sus ojos color miel que lo hacían aún más atractivo.

- Wow...Las mujeres se pelearán por ti...- elogio mientras terminaba de cepillar el largo cabello de Lan Zhan.

- Mm? -

- Emm no nada -se río un poco- no me hagas caso, lo entenderás cuando seas mayor...-dijo mientras dejaba el cepillo sobre el tocador y bajaba a Lan Zhan al suelo.

- Esta bien...-

- Bueno, ahora me toca a mí ponerme guapo - le guiño el ojo antes de besar su frente y dirigirse al mueble donde guardo sus cosas. Se sacó las túnicas que se había usado para dormir y se puso una en colores negras y roja que eran sus favoritas.

Luego se sentó frente al tocador donde había puesto a Lan Zhan antes y se cepillo sus largos cabellos para amarrarlos en una media cola con su cinta roja que tanto le gustaba usar.

También cepillo un poco sus colas, pero no pudo terminar cuando vio al pequeño agarrar nuevamente una de ellas que estaba recién peinada y más felpuda.

- Te gusta A-Zhan? - acarició su cabeza dejando que jugará con sus colas.

- Mm...Es suave- dijo algo tímido y con la punta de sus orejas sonrojada.

- Hoo...pero la tuya también es muy suave - cuando acarició la cola del pequeño se erizo un poco, pero permitió que siguiera.

- basta, hace cosquillas... - estaba intentando aguantar la risa, pero tan pronto dijo eso las caricias aumentaron y después su estómago fue atacado con cosquillas que le hicieron soltar una risa que jamás había hecho antes.

- Ya!...Ya basta! -las lágrimas de la risa mojaron su rostro sonrojado.

- Tienes una risa muy linda A-Zhan...- abrazo con fuerza al pequeño que le correspondió agarrando con fuerza su hombro - Quiero escucharte así muy seguido...-