Capítulo 11

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REALEZA

"Uneasy is the head that wears a crown"

-O-‌

El palacio de la Corte Real, esa que gobierna a todos los mares y océanos, que podría regir incluso a los ríos y lagos, se encuentra situada en las profundidades del Océano Pacífico. Contrario a lo que muchos imaginarían, el lugar no tiene nada que evoque a la realeza, si se pudiera comparar a algo, sería a un fuerte impenetrable, listo para la batalla; al menos es así desde hace unos cuantos años; desde que cierto híbrido nació. Este evento provocó muchos cambios en la familia real, cambios de los cuales solo la familia y ciertos allegados tienen conocimiento, debería ser un secreto el hecho de que el hijo de enmedio del rey es sólo hijo del rey, pero como todo sitio en la tierra -y en el mar aparentemente- las paredes tienen oídos y siempre hay alguien que ve o escucha de más. La reina se enteró de este hecho (que la información sobre Jihoon se había filtrado) y se las ingenió para desaparecer de la vista del resto de la gente del mar durante la gestación de dicho bebé, una vez hubo nacido lo acogió en el palacio y lo crió como suyo. Sólo el rey sabe qué fue lo que le pasó a la madre, la reina se limitó sólo a cuidar del bebé y, con tal de mantenerlo a salvo tuvo que resignarse a fingir que en el reino no pasaba nada respecto a todas las leyes que el rey rompía para su propio beneficio. Tiempo después hubo un tercer bebé, y mientras éste crecía, las cosas parecieron mejorar en la familia.

Actualmente, los tres príncipes viven fuera de esa fortaleza que es el palacio de la corte real. El Rey siempre se los había estado vigilando constantemente, pero cuando Jeonghan dejó el palacio hace dos años para hacer una especie de prueba de reinado, algo que el rey tuvo que aceptar más por compromiso, la información de los movimientos de los jóvenes príncipes estaba cada vez menos exacta y había ocasiones en que no sabía realmente qué hacía cada uno. Era como si desde que el heredero al trono dejó el palacio de la corte real, las cosas se habían salido de control para el rey, quien en su paranoia de un levantamiento en su contra, estaba seguro que su hijo mayor quería traicionarlo y quedarse con la corona para sí mismo. Todo esto era ignorado por los príncipes, pero no por la reina, quien cuidaba de sus tres hijos por sobre todo.

Pero cierta mañana todo cambió.

―¿Se encuentra bien Majestad?― preguntó uno de los guardias, quien llevaba alrededor de diez minutos observando como la reina nadaba a lo largo de la sala en un ir y venir, una mueca de lo que parecía preocupación en el rostro. Pero ella no contestó a su pregunta, solo le dedicó una mirada y salió de la habitación, seguida únicamente de su guardia personal.

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En Coralina, Jeonghan se preparaba para salir del palacio rumbo a la corte real y sólo estaría acompañado por sus dos guardias personales. Sería un viaje corto, debido a que la mensajería entre él y su padre había cesado, iba a ir personalmente para ver cómo estaban las cosas en casa y aclarar que la mensajería entre Coralina y el Palacio Real no era su culpa, ésto debido a que el joven tritón conocía muy bien a su padre y como éste no se encontraba muy bien desde hacía algún tiempo; algo que seguía ocultando de sus hermanos menores con el fin de no preocuparlos. Razón por la cual no vio necesario sacar ese tema y el de Jihoon en la pequeña reunión que había tenido con sus hermanos el día anterior.

Jihoon quedaría a cargo en el palacio durante la ausencia de Jeonghan, Chan seguiría asistiendo a sus clases como normalmente hacía y Mingyu estaba enterado que, al menos por esos días, los tritones no lo visitarian en tierra firme, todo estaría casi como de costumbre.

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