-Oh... -asentí, y me levanté del sillón.
-Lisa -tomó mi mano.
Miré para otro lugar, mis ojos estaban aguados.
-Lili, yo te quiero. -susurró.
No era suficiente.
-Debo irme a casa. -susurré.
-Pero Lisa. -se levantó. -Debes darme más tiempo, por favor.
La miré por un momento.
-Pensé que me amabas Jennie... Cuando me lo dijiste en la finca, ¿mentías? -pregunté dolida.
-Lisa, fue algo qué se me salió. Yo... no sabía lo que decía.
-Vale. Tengo que irme a casa. -caminé hacía la puerta, en donde estaba mi ropa tirada.
- Lisa, ¿por qué haces las cosas difíciles? -preguntó Jennie acercándose.
-Deberías vestirte. -le dije, haciendo referencia a su estado de desnudez.
Jennie miró hacia abajo, y volvió a mirarme.
-No me importa si estoy vestida o no, solo quiero hablar contigo.
Me puse las bragas y la miré.
-Debo irme a casa, ya te dije. —declaré recogiendo mi sostén y poniéndomelo.
-Estás huyendo, maldita sea Lalisa Manoban. -tomó mi brazo. -¿Qué era lo que esperabas?
-Qué me dijeras que también me amabas. -contesté.
-Te quiero. -susurró.
-Pero no me amas. -dije fría. -¿Es por qué no soy cómo tu hermana? ¿Por qué soy una simple nerd? ¿Por eso? -estaba molesta.
-No. -contestó. -Es porqué necesito tiempo.
-¿Tiempo? -fruncí el ceño.
-Sí, tiempo. -suspiró. -No quiero que me lastimen, no quiero enamorarme para que luego me dejen tirada. Siempre pasa lo mismo. Toda mi vida ha sido así, las chicas juegan conmigo o solo quieren experimentar y luego se van. No quiero que pase lo mismo esta vez.
-Tú sabes perfectamente que yo no estoy jugando contigo Jennie. -le dije.
Comencé a ponerme los shorts al ver qué no respondía.
-Necesito decirte algo. -habló de repente.
La miré.
-¿Qué? -pregunté, mientras me ponía la blusa.
Suspiró y se acercó.
-Pero antes... Prométeme que me vas a perdonar Lili, o por lo menos que vas a intentarlo. -tragó saliva.
-Dime. -la miré a los ojos.
-Promételo, Lisa. -exclamó nerviosa.
-Lo prometo. -declaré.
-Hice una apuesta con mis amigas. -Comenzó a decir.
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Enamorada de mi Vecina.
FanfictionEnamorada de mi Vecina Ella es única, ella es sensual, ella es provocativa, ella hubiera podido tener cualquiera a sus pies, pero la escogió a ella, a la más inocente, a la menos indicada. Jennie Kim es una chica hermosa de 17 años, la nueva vecina...
