Capítulo 1.16

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—Realmente lo estaba disfrutando, pero vale más mi vida que el placer.— Le susurró una última vez antes de dejar un casto beso en su frente, la chica estaba punto de levantarse cuando la puerta del lugar se abrió.

—MIERDA 2 ¿QUE HICISTE?— Pregunto alarmada 1, ella confía demasiado en esa chica, pero a veces no aceptaba muy bien sus métodos.

—Si solo querías tener placer lo hubieras hecho, no tenías por qué matarlo.—5 miro preocupada al pobre hombre tirado en el piso.

—No está muerto, solo está inconsciente. A ver me van a ayudar o se van a quedar ahí paradas.— Se levantó de dónde estaba el chico para poder apagar la música y poder mover al hombre a uno de los cuartos de arriba.

—Ve y abre la puerta, yo lo llevo.— 1 le contesto mientras que levantaban al chico con su energía, 2 hizo aquello y 5 las seguía por detrás.

—Okay pero exactamente, ¿Dónde lo vamos a dejar?, no tenemos mucho espacio.— La de cabellos azules pregunto al recordar que ya no tenían más cuartos disponibles para algún invitado más.

—Por el momento se quedará en el cuarto de Enyd, es el que tiene más seguridad y protección, se supone que 2 y yo lo diseñamos para que nadie ni nada pueda entrar a el, no solo me refiero a cosas físicas como personas o objetos, sino que también con la mente.— La más alta miro raro a su compañera no entendía bien a qué se refiria y 2 lo noto.

—Como sabes 1 puede leer mentes y se dio cuenta que había más gente como ella, así que ella encontró la manera de proteger su mente de que alguien entrara en ella y para no entrar mucho en detallé. Los relojes que tenemos están vinculados con el de ella y ese el que ella tiene está vinculado a su mente protegiéndonos de que alguien entre a nuestra mente. Así que cuando nació Enyd, intentamos ver si era capaz de poder proteger el cuarto también.— Las tres chicas ya estaban en el cuarto acomodando que nada quedará al alcance del chico y que no tuviera nada para poder escapar.

—¿Pero eso no es usar mucha energía?— Si bien entendía cuando estaban aún cautivas, los científicos le habían dicho que su energía se alimentaba del mismo elemento que usaban, por eso ella a veces prefería dormir en la bañera y 2 tomaba el sol junto a una fogata, aunque la que más hacia estás cosas era ella.

—Si, por eso soy la que está despierta en las mañanas y duerme por las noches, ya que cuando ustedes se recuperan yo aveces me uno, ya que casi puedo utilizar los 4 elementos me recupero un poco más rápido.— 2 le pasó unas esposas a 1 para que las usará en el sujeto, estás eran diseñadas por ella misma y era imposible que el chico se las quitara.

—Bien, salgamos y hablemos de porque lo deje inconsciente.— La de cabellos rojos salió del lugar seguida de las demás llegando a la sala para hablar más a gusto.

La bebé dormía en la sala en una cuna diseñada obviamente por 2, era un regalo que había estado preparando desde hace ya tiempo.

—Oye ese no era el señor que se me perdió.— Recordó la más alta al ver recordar a los dos hombres.

—Así es, la verdad lo iba a dejar escapar para ver qué hacia pero me he llevado una buena sorpresa.— Dijo mostrando las imágenes del soldado del invierno.

—¿Cómo mierda?— Se le soltaron las palabras a la peliazul.

—Bueno quizás si lo veíamos venir, recuerda que De Luque dijo que los "héroes" estaban detrás de nosotras.— Le recordó 1 mientras que pensaba en que podían hacer con esta información.

—Aun así, hay que estar atentas al otro sujeto, cuando se de cuenta que su compañero no llegue, a la mejor lo primero que haga es que venga, si es que él, le dijo a dónde iba.— La peliazul tomo asiento junto a la cuna de la niña.

In My Veins.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora