20.

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Por sorprendente que fuera, Namjoon no veía a al omega con ojos lujuriosos, solo quería mimos, impregnar al chico de su aroma y no permitir que nadie se acercase, sintió la molestia del omega, pero sinceramente estaba muy adolorido como para investigar al respecto.

— Jin, por favor ayuda. — Una mirada de terror le fue dirigida. — Ven y dame mimos.— Aclaró.

— Que te los dé uno de tus omegas. — De inmediato supo lo que Yoongi le había dicho y tuvo ganas de golpearlo, pero también le quería agradecer porque le regaló una escena muy tierna: Jin celoso.

— Jin, por favor, si no me ibas a ayudar, al menos hubieras dejado la puerta abierta para que alguien dispuesto me ayudara.

— Alfa tonto. — Se sentó en el sillón y de inmediato recostó mi cabeza sobre su pierna con esperanza de que me diera mimos, ese era un modo distinto de ayudarlo.

Después de unos minutos, Jin cedió y empezó a acariciar las hebras blancas, relajándolo hasta el punto de adormecerlo. Tiempo después sintió tres aromas de alfa y dos de omega, el lobo lo dominó y se puso frente a Jin. El alfa estaba dispuesto a herir a cualquiera que se acercara, ellos decidieron no acercarse y se fueron.

— Te juro que no siempre soy así.

— Nunca había visto a un alfa en celo y mucho menos siendo territorial.

— Perdón por gruñirle a tus amigos y por no dejar que se acercaran, pero mi lobo tomó el control y no queríamos que Hoseok se acercara.

— ¿Por qué Hobi no? ¿Estás celoso alfita? — Preguntó con un tono juguetón.

— No. — Respondió cortante. — ¿Por qué estaría celoso? Tú y yo no somos nada. — No pensó sus palabras, solo las soltó, reaccionó tarde, el aroma del omega era agrio. — Yo no quería decir eso.

Seok no dijo nada, solo fue al baño y luego a la cocina bajo la atenta mirada del alfa, al terminar le entregó un supresor y un baso de agua.— Tomarás esto, pedirás comida y me iré.

— Pero-

— Nada de peros, yo no tengo nada que hacer aquí, es más, me largo. — Se iba a ir, pero Yoongi había cerrado con llave y por lo visto habían perdido la otra. — ¿Dónde está la llave Kim?

— No sé donde la dejaste.

— Está bien, no me lo digas. — Subió las escaleras y se encerró en alguna habitación. — ¡Aún tienes que pedir la comida! — Namjoon lo siguió, abrió la puerta de su habitación y ahí estaba el chico.

—Inteligente joven Seokjin, ¿cómo vamos a recibir la comida si no tenemos llave de la puerta? ¿Debo recordarte que alguien la perdió?

Eso lo enojo aún más, se hizo bolita y empezó a llorar.

❦︎Te declaro mío❦︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora