TOUCHME2 (ALFINXD)

XI

La noche de bodas continuó, tan hermosa como la misma boda, varias flores azules y rojas  adornaban la habitación de Zed que ahora era de ambos.

Aquel cuarto oscuro se convirtió en uno lleno de vida, paredes color crema, y una enredadera salía por la ventana. Un "wow" salió de la boca del menor, Zed sonrió, pues logró impresionar al azabache. - ¿Te gusta? - preguntó a pesar de saber la respuesta.

- Me has sorprendido- Kayn le dedico una sonrisa mientras se dirigía a acostarse sobre las blancas sábanas. Sus ojos volvieron a bailar por la silueta del menor, recorriendo cada parte, sin saber como ni porque esos ojos azules dejaban caer lagrimas por sus sonrosadas mejillas.

- Zed - Pronunció tembloroso - ¿Qué harás con el cuando nazca? - Kayn jugueteaba con su cabello y a su vez retirando las flores de este.

- Fácil, le daré un nombre, lo criaré para que sea fuerte incluso más fuerte que yo - El albino sonreía ilusionado, al parecer, imaginaba ya el futuro de aquel pequeño. El menor por primera vez se ruborizo verdaderamente con un acto por parte de Zed, el albino había acortado la distancia y un beso, un cálido y suave beso en su frente lo hizo avergonzarse lo suficiente para sonreír tontamente como una adolescente luego de dar su primer beso.

Mentira.

Otra vez volvió a ser media noche, la luna volvía a colarse por as ventanas. Su luz se mezclaba con la de las velas, dando la sensación de que el pasillo fuese infinito, vela tras vela los pensamiento de Kayn se volvían más confusos. ¿Qué era eso dentro del gran salón? Una silueta de un hombre, alto, delgado, se movía con gracia, con naturalidad mientras tocaba aquella melancólica melodía. Desbordaba recuerdos amargos para ambos hombres ¿Cuánto habían sufrido solo por amarse? solo aquella melodía podía expresarlo.

La respiración agitada detrás de la mascara no dejaba ver el silencioso llanto del mayor, pues cuando el amaba, lo hacía como si no hubiera un mañana. Cuando amaba...cuando lo amaba a el...solo a el...el era lo que no salía de su cabeza.

¿Kayn era hermoso? Jhin ni siquiera lo había notado.

- Salgamos de aquí - Habló Kayn deteniendo aquella melodía de piano que con cada nota estrujaba su corazón.

(N/A: Chales, estoy llorando por que se lo que se viene TnT...BAY TOMEN AWA DE UWU SIN OWO)