El Cuadro de Hannah

Capitulo 10.

Capitulo 10.

Hannah

No sabía a dónde se iban, esos secuestradores de gatos. Habíamos recogido todo y nos prosguimos a seguirlo me sentía mal porque no había encontrado a mi gato y resultó que alguien quería llevárselo . Se metieron a un callejón, y más adelante había un restaurante donde unos hombres de traje nos detuvieron.

— ¿Tienen reservación?– pregunto uno

— No me interesa una reservación, tienen a mi gato ladrones.– empecé a gritar me sentía molesta

— Déjenos entrar por favor.– dijo Patch se le notaba algo intenso pero no supe que quería expresar con su rostro.

— No podemos dejarlos pasar.– volvió a hablar el hombre.– Además ni siquiera tienen dinero para pedir algo.

— Señores déjenos pasar, sin ese gato mi novia no puede sentirse bien para su recuperación.– Los señores lo miraron extraño, y yo también no sabía que estaba diciendo ¿Novia que es exactamente? Y además ¿Recuperación?

— De que estás ..– me interrumpió y volvió a hablar.

— Por favor, ella sufre de depresión y casi se va de casa – Está vez estiró la mano para que la tomará, yo me quedé viendo la no sabía porque estaba mitiendo de nuevo pero quería mi gato, la tomé y esos señores nos notaron, volvieron a hablarse entre si y uno habló.

— Bueno, déjeme preguntarle al jefe, sobre su  gato que triste su situación señorita.

Esperamos un par de minutos y el otro salió señaló a Patch.

— Puede entrar el chico, vamos además ya dimos información de su rostro y su padre está aquí perdonenos señor Patch .

Patch soltó mi mano y dijo.

— Espérame aquí, ya vuelvo y vendré con tu gato.– comento

— Pero yo quiero ir.– cruzándome de brazos.

— Dame unos minutos sí, ya vuelvo no te muevas de aquí.– le dieron pasó, y entro yo me coloque cerca de una pared, y me puse a cantar un poco, no debería molestarme si estaría con Boo.

— Oye eres muy bonita.– dijo uno de los hombres.

— ¿Bonita? Eh vale – comenté

— Sabes deberías salir conmigo está noche.

— Lo siento, no puedo tengo una cita con Patch y no puedo irme – comenté- Tal vez otro día

Ese hombre se me estaba acercando, y me sentí nerviosa y muy invadida.

— Yo quiero hoy una cita.– dijo él

— Pero no puedo.– di un par de pasos hacia tras y quede pegada contra una pared.– Por favor señor alejese de mi.

— No te pongas inquieta podemos pasarla bien si tu te dejas, además darnos unos buenos besos.– estaba poniendo ambos brazos en la pared.

— Me da asco, y todos hablan de besos pero no sé lo que es pero si es con usted no quisiera jamás hombre asqueroso.– dije

— Eres un poco loca pero eso se puede arreglar.– dijo él

Me alteré mucho que le di una patada entre la piernas, se quitó de mí no ví mucha opción que entrar a ese restaurante, había muchas personas también la música demasiado alta mire al mi alrededor y no ví a Patch. Un hombre me empujó, otra mujer se chocó conmigo mi agitación se aceleró y empecé a temblar. Estaba abrazándome a mi misma.

— Ya por favor hagan silencio.– grité

Pero no ayudaba de mucho, me miraron extraño.

— Ahí estás.– dijo el hombre, voltee y luego salí corriendo hacia un pasillo. Se notaba la cocina, y ahí pase tratando de escapar cuándo sin notar me resbalé y caí en el suelo al instante de que me voy a volver a levantar ese hombre estaba cerca de mí me acurruque y baje la cabeza.

— A las niñas malas como tú deberían de darle castigo.

— No por favor, no seas tan extraño por favor no seas como el del callejón por favor.– repetí varias veces.

— Vez que si eres extraña, pero eso se te quita.– tomo mi rostro y me hizo verlo.– No se porque no me miras a la cara es de mala educación Loca..

Empezaron a salir Lágrimas, y me sentí muy perdida, el levanto la mano cuando de pronto alguien lo golpeó haciendp que cayera en el suelo, yo ví y era el Patch se lanzó encima de ese hombre. Yo cerré los ojos y baje la cabeza.

— No vuelvas a tocarla ahí si que no respondo, papá debería llevárselo.– dijo a alguien pero no sabría.

— Hannah.– dijo Patch.– Ese hombre hizo algo más...

Me levanté llorando y me acerque a él, lo rodee con mis brazos. Y no aguantaba la intensidad y la rabia. Aunque esto es lo llamado abrazo.

— Hey ya estoy aquí.

— Eres un tonto, me dejaste sola no te vuelvas a ir y dejarme no lo hagas – lo golpeé varias veces en su pecho era inútil no eran tan fuertes el trato de rodearme, un poco y no me incomodaba su cercanía no sabía porque no me sentía nerviosa, o alterada por su cercanía que eso que mi corazón está latiendo a kilómetro por hora esto es imposible.–

— No no me iré Hannah, perdóname no quería que pasaras un susto como este, mi pequeña.– susurró él– Además ya tengo a tu gato.

Lo solté, y sonreí.

_— ¿Dónde está?– pregunté

— Oigan ustedes no pueden estar aquí.– dijo un camarero.

— Estamos esperando a su Boo.– dijo Patch

— ¿Boo?– pregunto el hombro confundido

— Su gato – comentó

A pocos minutos, salió un hombre sostenido con mi gato y me lo dió. Salimos de allí.