¡Seré la VILLANA!...otra vez

Capitulo 9

- ¿Que le parece este señorita?-

- No, yo digo que este le quedara mejor-

- Ustedes no saben nada niñas, este es mejor para mi señorita-

'Uuf'

Ya hace una hora me levante, pero todabía estan eligiendo que vestido ponerme.

' Ademas, ni loca me voy a poner los vestidos que me enseñan'

- Nana, elige algo más sencillo. Aparte nos tenemos que ir ahora para llegar bien a la Capital. Acuerdate que son tres horas de viaje-

- Lo siento mucho mi señorita. Vení a ver cual te gusta-

Entré a esa habitación la cual se hacía llamar "vestidor", y si que lo era.

'Mmm, muy llamativo'

Agarre otro y lo mismo.

'Muy llamativo'

Esas palabras rondaban por mi cabeza.

'Muy llamativo'

'Muy llamativo'

'Muy llamativo'

'Muy llamativo'

Pero otra frase entro a la lista.

'¡Que feo!'

Por dios, que feo gusto tenía. Creo que tengo que remodelar TODO mi vestidor.

- Tiren todo estos vestidos-

- ¿Que, porque señorita?-

- No me gustan, hoy haré un cambio-

- Pero son todos de su marca favorita: Valchen-

- No me importa, lo tiran-

Las sirvientas me miraban con cara de horror.

¿ Y si, quien no?

Cada vestido valía el salarios de casi todo un año de trabajo para mis sirvientas.
Pero que puedo hacer, no me gustan y listo.

Despues de quince minutos más, elegí el vestido más sencillo que había encontrado.

- ¿Nos vamos joven señorita?-

- Si, nana-

Al ver que me estaba dirigiendo hacía el lugar del entrenamiento, nana me miro extraño.

- Yo misma escogere mis escoltas nana-

- Aah, me parece muy bien-

'Pss, obvio, ya tengo a mis complices'

Cuando llegue al campo de visión de los soldados hicieron una reverencia y se me quedaron mirando de mala gana.

¿Y bueno, quien no? Yo era re insoportable con mi padre, lo seguía a todos lados y también al campo de entrenamiento. Algo que molestaba a muchos.

- Mm, puden pasar al frente Lint y Molis?-

Al instante un dos caballeros aparecieron.

Uno era alto, de ojos negros y pelo castaño. Este era ceñudo; aunque este feliz todabía te mira mal.

El otro es alto; pero no tanto como Lint. Era delgado y por eso siempre recibía burlas; aunque en un futuro no muy lejano sera uno de los mejores espadachines. Esos ojos naranjas me miran con curiosidad y ese pelo tambien anaranjado se mueve por el viento.

- No les molesta ser mis escoltas, no?-

- Por supuesto que no, joven señorita-

- Okey, vamos-