No es una cita

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Daniel

Al llegar a mi casa después de la práctica veo a mi mamá en la cocina preparando la cena, la verdad es que cada día se le nota más que tiene cáncer y me pone muy triste verla así y no poder hacer nada para ayudarla, pero eso no me impedirá que yo le demuestre todo mi amor, la disfrutaré como si cada día fuera el último. Me dirijo a la cocina para saludarla

–Hola mami –se lo digo dándole un beso en la cabeza.

–Hola Dani –me lo dice con una enorme sonrisa –¿Cómo te fue hoy cariño?

–Me fue muy bien, aunque hubo un tema que no logré comprender muy bien y eso me molesta.

–¿Y por qué no le pides ayuda a algún amigo?

–Ya lo hice, pero ellos quedaron con las mismas dudas que yo.

–Bueno pídele ayuda a alguien que ya haya pasado esa materia, tal vez se acuerde y te pueda ayudar –y de una vez se me viene a la mente Elizabeth.

–Es una buena idea, gracias –le doy otro beso y me dirijo al cuarto.

Tomo una ducha y me dirijo al escritorio para realizar mis trabajos, bueno, para entender esa tarea que me tiene frustrado; vuelvo a echarle un vistazo a la libreta, pero no lo comprendo, no puedo y eso me frustra, así que agarro mi celular para chatearle a Elizabeth, al buscar su contacto veo que se ha puesto un corazón y se me forma una pequeña sonrisa en el rostro.

Tomo una ducha y me dirijo al escritorio para realizar mis trabajos, bueno, para entender esa tarea que me tiene frustrado; vuelvo a echarle un vistazo a la libreta, pero no lo comprendo, no puedo y eso me frustra, así que agarro mi celular para c...

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Mientras la miro (Entre miradas I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora