Sylver, el príncipe desterrado, está cansado de las reglas del mundo mágico. La organización fue creada para que los demi-âme y hechiceros pudieran comenzar una vida nueva, junto a los humanos en vuestro mundo ordinario. Sin embargo, el romance entre humanos y seres mágicos está prohibido. Artemisa es muy diferente a lo que Sylver conoce de las humanas. Ella es dulce, amable, una persona responsable que ha cuidado de su hermana menor por si sola. Una mujer digna de admiración, pero que se niega a aceptar. Y cuando la guerra se desata, ambos lucharán para poder conseguir libertad, igualdad y conseguir un mundo mejor, donde todos puedan vivir en paz, sin preocuparse por la sangre.