Griffin Arlen era una estrella, no podía verse como algo diferente frente a los demás. Las personas siempre tenían esa idea de chico alegre que estaba todo el tiempo relajado, quizás fue cierto en algún punto, pero Griffin era mucho más que eso, era un revoltijo de inseguridades que habían aparecido en él apenas era un adolescente, era la soledad que había tenido de compañía cuando sus padres se marchaban de casa y se quedaba sin nadie más que él mismo, era el miedo de quedar como mal líder frente a muchos, era la costumbre de hacer siempre a las personas felices. Pero ¿qué lo hacía feliz a él?