Capítulo 13: Protección antes y después de realizarle una liberación a alguien

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(hechos 26:17)

En este capítulo explicaré como debemos protegernos siempre antes de realizar cualquier trabajo que incluya exorcizar a alguien o a un lugar, si no estamos bien protegidos y preparados a la hora de servir a Dios de esta manera entonces los resultados no serán positivos para la persona que vamos ayudar, ni para la persona que hará el procedimiento , será peor porque se quedara con todo lo negativo que tenga la otra persona, jamás realices un procedimiento de liberación a otra persona ni a ti mismo en tú propia casa ni en un lugar donde residas, ya que tu casa quedara contaminada.

Recomiendo no hacer nada de esto, a menos que sea una necesidad urgente, y a menos que usted haya tenido un crecimiento espiritual muy avanzado o que usted sea un lider religioso con experiencia y conocimientos amplios en la palabra de Dios, de lo contrario esto puede muy ser peligroso para usted. Este es el trabajo más complicado y exigente de la vida consagrada, para hacerlo bien debes de llevar una rutina diaria de oración y crecimiento espiritual, realizar ayunos por lo menos una vez a la semana y realizar lectura bíblica muy frecuente.

Qué hacer antes de realizar cualquier procedimiento de liberación:

1) Lo más importante siempre es tener fe firme en Dios de que el Jamás dejara que nos contaminemos de lo que vamos a limpiar.

2) Realiza ese mismo día o un día antes uno de los ayunos poderosos que explique en el capítulo "ayuno" según indique. (Preferiblemente el "Yom kipur").

3) Lleva puesto sobre tu cuello una santa cruz.

4) Reza el rosario varios días antes, y ese mismo día, y los días siguientes (todos los días debes de rezarlo).

5) Es necesario que acudas frecuentemente a tu iglesia, sobre todo, días antes de realizar el procedimiento, y si eres católico es muy importante que recibas la comunión.

6) Antes de realizar el procedimiento encomiéndate a la oración de protección de San miguel Arcángel, ya que fue el quien expulso a Satanás del cielo:

"San Miguel Arcángel, defiéndenos en la lucha. Sé nuestro amparo contra la perversidad y acechanzas del demonio. Que Dios manifieste sobre el su poder, es nuestra humilde súplica. Y tú, oh Príncipe de la Milicia Celestial, con el poder que Dios te ha conferido, arroja al infierno a Satanás, y a los demás espíritus malignos que vagan por el mundo para la perdición de las almas. Amén."

7) Nueve días antes de realizar la liberación reza la novena de la sangre de cristo, una vez llevada acabo estarás protegido de todo mal.

8) Lávate las manos antes de empezar.

9) (Josué 2: 18) ponte cordón rojo protección en tu mano derecha, esto evitara que tengas una posesión infernal en tu cuerpo.

10) Pondremos en nuestro ombligo un poco de algodón y lo cubriremos con micropore en forma de cruz (esto evitara una posesión infernal en nosotros)

11) Antes de empezar realiza esta oración: Judith 13- 4:5 (biblia Jerusalén)

"Señor, Dios de toda fortaleza, favorece en esta hora lo que voy a hacer para gloria de esta casa. 5. Este es el momento para que salves a tu pueblo. Da éxito a mis planes para aplastar a los enemigos que se han levantado en contra nuestra.»"

Después de liberar a alguien:

Siempre después de realizar cualquier procedimiento de liberar otra persona debemos limpiarnos para sentirnos tranquilos y limpios de todo mal, una de las cosas que pueden hacer es lo siguiente:

1) Levítico 11: 32: sumergir en agua para purificar algo que ha sido impuro.

Este capítulo del levítico nos dice que después de quedar impuro por tocar cadáveres o cosas impuras, la persona debe de sumergirse en agua por unos minutos para volver a quedar puro, debe de hacerse así:

Para esto debemos sumergirnos en una bañera, en un rio, o en un mar por aproximadamente quince minutos, mientras estamos en el agua rezamos un padre nuestro seguido de esta oración:

Salmo 26:6-12:

Lavo mis manos en señal de inocencia
y doy vueltas alrededor de tú altar,
proclamando tú alabanza en alta voz
y narrando tus maravillas.

Yo amo la Casa donde habitas,
el lugar donde reside tú gloria.

No me incluyas entre los pecadores
ni entre los hombres sanguinarios:
ellos tienen las manos llenas de infamia,
y su derecha está repleta de sobornos.

Yo, en cambio, procedo íntegramente:
líbrame y concédeme tú gracia.
Mis pies están firmes sobre el camino llano,
y en la asamblea bendeciré al Señor.

2) Lucas 11:42 :

Este segunda opción es por si en caso de que varios días después de haber hecho una liberación usted se siente muy desesperado, angustiado o siente que se contamino de lo que tenia la otra persona entonces ustedes deberá coger:

- Una planta de ruda.

- Sal marina.

La pondrá a hervir en agua la ruda y cuando este bien cocinada, espera a que el agua este tibia y deberá bañarse con esa agua de arriba hacia abajo, después procedes a bañarse con la sal marina de igual manera, de arriba hacia abajo, rezando un padre nuestro y recitando la siguiente oración:

Salmo 35:1-10

1. Defiéndeme, Señor, de los que me atacan;
combate a los que me combaten.
2 Toma tu adarga, tu escudo,
y acude en mi ayuda.
3 Empuña la lanza y el hacha,
y haz frente a[
] los que me persiguen.
Quiero oírte decir:
«Yo soy tú salvación».

4 Queden confundidos y avergonzados
los que procuran matarme;
retrocedan humillados
los que traman mi ruina.
5 Sean como la paja en el viento,
acosados por el ángel del Señor;
6 sea su senda oscura y resbalosa,
perseguidos por el ángel del Señor.
7 Ya que sin motivo me tendieron una trampa,
y sin motivo cavaron una fosa para mí,
8 que la ruina los tome por sorpresa;
que caigan en su propia trampa,
en la fosa que ellos mismos cavaron.

9 Así mi alma se alegrará en el Señor
y se deleitará en su salvación;
10 así todo mi ser exclamará:
«¿Quién como tú, Señor?
Tú libras de los poderosos a los pobres;
a los pobres y necesitados libras
de aquellos que los explotan».

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