•Capítulo 52: Nuestra familia•

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Saludos cordiales, Villanos.

Y feliz año nuevo a todos ustedes, espero que estás fiestas hayan sido gratas para todos, que hayan estado a salvo y que este 2021 los trate con algo más de cariño. Yo, por mi parte, tuve un buen final de año y estoy listo para retomar mis escritos como es debido. Estamos muy cerca del final y ansío ver sus reacciones.

Antes de empezar, tengo que agradecerles de todo corazón por seguir leyendo, por votar y comentar. Hace unos días llegamos a las 40k leídas, y eso me puso muy feliz; cuando empecé no creí que llegaría ni a las 10k leídas, es un orgullo y una alegría indescriptibles saber que mi historia gusta y recibe tanta atención. En serio, muchas gracias.

Ahora, por el momento simplemente voy a hablarles de un tema delicado, que quise tocar antes pero no tuve finalmente la oportunidad; permítanme hablarles un poco acerca de la depresión en el embarazo. Es muy común escuchar hablar acerca de la depresión postparto, pero alrededor de un 7% de las mujeres gestantes sufren depresión durante el embarazo. Sin embargo, la taza podría ser mas alta.

El problema con la depresión durante el embarazo es que síntomas como cambios en el sueño, perdida o ganancia del apetito, baja en el nivel de energía y el libido son síntomas asociados directamente al desequilibrio hormonal que implica el embarazo, por lo que se puede pasar por alto. Adicionalmente, es común que no se discuta la salud mental de la mujer durante el periodo de gestación, pues se prioriza su estado físico; además, el estigma social que implica la depresión, y como este puede influir en la mujer orilla a un cierre respecto al tema.

Los signos y síntomas son los mismos que en la población general, sin embargo, a estos se suman otras pistas de la presencia del trastorno, como por ejemplo: baja en la autoestima, sensación de no estar en capacidad de asumir la maternidad, cumplimiento deficiente del cuidado prenatal, consumo de sustancias que puedan afectar la salud del bebé o su nacimiento, entre otros.

Estos episodios tienden a ocurrir con mayor frecuencia en el primer trimestre, debido a la presión que implica un embarazo y las preocupaciones que acarrean los cuidados pertinentes; y durante el tercer trimestre, pues es el momento en que la realidad se vuelve inevitable y las dudas y cuestionamientos acerca de la capacidad para estar a cargo de otra vida aumentan.

El problema de no recibir un tratamiento óptimo, más allá del riego que representa para la madre, implica también que no se proporcionarán los cuidados apropiados, hay un mayor riesgo de sufrir depresión postparto y no formar lazos afectivos con el bebé una vez nazca. Dependiendo de la gravedad de la depresión, puede requerirse un tratamiento con psicoterapia o con antidepresivos y terapia combinados.

Ahora, yo no suelo hablar explícitamente de vivencias o trastornos, a menos que recolecte la información suficiente para hacerlo; sin embargo, en este caso quiero abrirme un poco más a narrar los sentimientos de Flug, pues está en un momento crítico mental y físicamente. Mi trabajo es advertirles al respecto, para evitar detonar en alguien un recuerdo no deseado o una sensación desagradable. Por favor, si sientes que esto puede afectarte, procede con cuidado o no leas; de todos modos, no te hará falta para el siguiente capítulo.

Por otro lado, y habiendo dicho eso, quisiera que se remontáran al capítulo 46 y releyéran la información acerca de el sexo durante el embarazo, simplemente para refrescar la memoria. Igual que en esa ocasión, me tomé el trabajo de colocar en negrilla la primera letra de cada párrafo de la escena explicita, para quienes puedan llegar a sentir incomodidad.

Creo que he dicho todo lo que tengo que decir, hay otras búsquedas que hice para poder escribir, pero no considero relevante ponerlas en la nota; más que nada para no volver esto sumamente tedioso.

De Monstruos Y Humanos|Villainous|PaperHatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora