Capitulo 10: "Día 3 - Parte 2"

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Wei Wuxian se enfocó en instalar las repisas de madera en el cuarto de Trabajo y la sala, junto algunas macetas colgantes con variedades de plantas y un aire acondicionado. Unas cortinas celestes – blanco – dorado en capaz hermosa en el gran ventanal en vista a la ciudad. ¡Muy hermoso está quedando el interior del cuarto! Orgulloso es el sentimiento. Cuando empezó a terminar las cerámicas del suelo en la sala, con mucho esfuerzo en mover los muebles y cajas para hacer espacio y poner la cerámica...

El tiempo surgió muy rápido, entrando el atardecer y mostrando a un Wei Wuxian desparramado en el suelo, completamente sudado y acalorado mientras dormitaba un poco mareado. No podía encender el aire acondicionado con esas condiciones, ¡Podía pasarle algo malo ante golpe repentino del cambio de clima!

La lechuza... La lechuza... Hace: "Shh" Hace: "Shh" Todos calladitos, como la lechuza que hace: "Shh" Que hace: "Shh"

Mentalmente cantaba Wei Wuxian para no caer en el sueño profundo. Sentía un malestar muscular en su cuerpo y mucha hambre. Pensaba llamar a su esposo para que lo ayude a bañarlo o mínimo a levantarlo, pero dejo el celular en el cuarto. Bufo ante su mala suerte. Bueno, quedara en el suelo por otra hora más.

Ahora que lo pensaba... Ya venía el cumpleaños de su marido. El 23 de enero. ¿Qué debería hacerle ese día? Hm, Podría regalar el típico regalo de: "Cartera, medias y boxes nuevos" ¡Jajaja! Rechazo la idea. Entonces, ¿Qué será? ¿Un beso y un abrazo? Ahora que se ponía a meditar... Él nunca ha invitado a Lan Zhan a una velada romántica o algo por el estilo. Siempre fueron cosas divertidas como hacer turismo, viajar o algo entretenido como parques de diversiones, cine o esos sitios variados.

—¿Debería ponerme un esmoquin? —Musito su pregunta. — Me veré muy raro... — Ni siquiera en la cena familiar en los Lan se vistió tan formar para presentarse. — ¿Qué hare...? —Se sentía perdido.

Frunció sus labios indecisos. Casi se queda dormido luego de varios minutos con la mente en blanco, hasta que llego Lan Wangji en la habitación. Ante de decir algo, contemplo el lugar asombrado y encantado de cómo está quedando los resultados de su esfuerzo. Hoy es viernes, le quedan tres días para que gane la apuesta. Pero eso no importaba en este momento, ¡surgió una emergencia...!

—¡Wei Ying! — El mencionado se asusta un poco, pero se relaja segundos después. — Te llaman. — Wei Wuxian musita "¿Quién?" — Wen Qing. — Sorprendido, se incorpora velozmente para atender la llamada.

—¡¿Si, Dígame?!

Oh... ¡Oh!

—¡¡Lan Zhan!! —Con lágrimas en los ojos, mira a su esposo emocionado y feliz. — ¡¡Despertó!!

—.—

El ambiente lúgubre es la descripción perfecta para este lugar tan escalofriante llamado: Hospital. ¡Nunca le ha gustado este lugar, nunca en su vida! ¡Jamás! Sentía que morirá por cualquier cosa, cuando solamente le estaban dando unas vitaminas C o buscar medicina en pastillas.

El dramatismo y el pánico se apoderaban en Wei Wuxian cuando se enfermaba:

¿Tiene gripe? Es cáncer. ¡Mínimo! ¿Una tos? Pff, mañana amanezco tieso. ¿Una mancha oscura en la piel? (Que resulta ser un pegote de suciedad por no pasarse jabón en los brazos) Mm...Ya. ¡Mamá, tuve una buena vida! No fui lo suficientemente fuerte en mi sistema inmune. Este cuerpo fue muy troll... Y débil para seguir viviendo por más años.

"Manos a la Obra" | WangXian - MDZSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora