Abro mis ojos al sentir la sensación de dolor en mi espalda y sonrió al recordar la noche anterior. Me volteó poco a poco y no veo a Jorge a mi lado, ¿dónde está? ¿ya se habrá ido con Bella?
Voy al baño, me cepillo los dientes y me arregló un poco el cabello. Buscó mis bragas para ponérmelas y luego su abrigo el cual me queda gigante. Bajo las escaleras dispuesta a preparar el desayuno, pero me detengo al verlo de espaldas preparando el desayuno, al instante sonrió y me recuesto en el umbral de la puerta.
-¿Admirando la vista?-Pregunta y río.
Me acercó a él y pongo mis brazos en su cintura. Coloco mi cabeza en su espalda a la vez le dejo un pequeño beso, segundos después Jorge se da la vuelta y me abraza seguido de un beso en la frente.
-¿Mucha hambre?-Pregunta sonriendo de lado y asiento.
-Después de lo de anoche...¿quien no?Ambos nos reímos y sin pensarlo nos acercamos para besarnos los labios. Jorge termina de servir el desayuno y en cuanto me siento me sonríe.
-Vengo enseguida.-Asiento confundido pero aún así asiento.-No empieces sin mi.-Advierte. Decido tomar un poco de jugo mientras lo espero, pasan unos minutos y frunzo el ceño.
-Jorge ,tengo mucha hambre, ¿qué tanto haces?
-Dos segundos.-Dice y al instante aparece con globos gigantes. Sonrió a la vez que río, luego de que los pone en la mesa se acerca a mi con un lindo pastel de cumpleaños, acompañado de un ramo de rosas rojas.
-Ay Jorge...-Sonrió tomando las rosas. Estiro mi brazo para abrazarlo y él me sonríe.
-Feliz cumpleaños mi amor.-Me dice besando mi mejilla.-Te amo.-Dice. Siento mis mejillas arder y comienzo a reír de los nervios, ¿como es posible que después de tantos años separados aún me haga sentir así? ¿sería pronto decirle?
-Gracias mi cielo.-Le beso los labios con amor y por eso sonrío en medio del beso.
-¿Desayunamos?-Asiento y él me besa la frente.
(...)
-¡Danna! Ven a la habitación.-Grita Jorge.
Corto la llamada con mi mamá y voy hacia allá. Ha estado callado desde hace una hora, pero no le he prestado mucha atención ya que he recibido muchas llamadas de felicitaciones. Al entrar a la habitación lo veo con su celular grabándome.
-¿Qué haces?-Pregunto sonriendo.
-Ve.-Señala la cama y tapo mi boca.
-Es hermoso.-Digo riendo y lo abrazo.
Él continúa grabando y siento mis ojos arder, quiero llorar.
-Vé, tomaré una foto.
-Gracias por todo esto.-Le digo tomándolo suavemente de las mejillas para besarlo.
(...)
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