Doce

32 6 19
                                    


–¡Corre Mark, ya nos toca!– Chilló Donghyuck empujándome para que anduviese más rápido.

–Tranquilo Donghyuck, solo es un ensayo.– Lo tranquilizó el profesor que iba por detrás de nosotros.

El nombrado suspiró soltándome para agarrar sus partituras y leérselas de nuevo aunque ya se las supiese de memoria desde hacía mucho tiempo.

Llegamos a la puerta que daba paso a la sala del auditorio donde íbamos a actuar en tan solo dos días y donde debíamos ensayar ese día; quedé impresionado porque a pesar de que nuestro conservatorio era muy grande no tenía ni punto de comparación con el edificio en el que nos encontrábamos.
Yo sabía con antelación que la competición era muy importante a nivel nacional pero no esperaba actuar en un auditorio con aquellas dimensiones.

Donghyuck tirando de mi mano me sacó de mis pensamientos y me condujo hasta la primera fila de butacas.
Vi cómo se contenía pequeños saltitos de lo emocionado que estaba y reí cuando subió al escenario y soltó un pequeño grito de admiración al ver la sala desde esa perspectiva.

–¿Cuál es el aforo del auditorio?– Pregunté al profesor mientras mi compañero curioseaba por las bambalinas.

–No estoy seguro, pero sé que más de mil personas, eso sí.– Me respondió mientras caminaba hacia la cabina de sonido e iluminación, donde debía hablar con los técnicos para discutir un par de cosas.

–¿¡Mil personas!?– Cuestionó Donghyuck asomando tan solo su cabeza por entre las cortinas.– ¿Y cuántas van a venir?

–Ya se han vendido todas las entradas.– Respondió justo antes de desaparecer tras una pequeña puerta blanca con el pulgar alzado en señal de aprobación.

Donghyuck abrió la boca exageradamente y se sentó en el suelo mirándome fijamente.

–¿Qué pasa?

–¿No estás emocionado?– Me preguntó invitándome con su mano a que me subiese al escenario con él.

–Claro que lo estoy.– Contesté haciéndole caso y apoyando mi mano en su muslo.

–Mm... No lo parece.– Me respondió mirándome acusatoriamente.– Yo no he dormido en una semana, no paro de repetir la canción en mi cabeza.

–Eso está mal, deberías descansar.– Lo regañé pegándole sin fuerza en el hombro.

–Es que no me puedo imaginar qué pasaría si cometo un error; la actuación es solo en dos días y antes me sentía muy preparado pero ahora no paro de pensar en qué podría salir mal y son muchas cosas.– Confesó sin parar de hablar ni un segundo para respirar y masajeando sus sienes estresado.

–Seguro que todo sale bien, ya lo verás.– Lo intenté tranquilizar con una media sonrisa.

–¿Que pasa si se me olvida la letra?– Preguntó con una mirada aterrada.

–Pues que seguiré cantando yo hasta que vuelvas a coger el hilo de la canción.– Expliqué y al ver que Donghyuck no parecía muy satisfecho con mi respuesta seguí hablando.– Voy a estar allí, ¿vale? Voy a cuidar de ti y aún así si nos equivocásemos tampoco pasaría nada, ya podremos ganar otro año, ¿de acuerdo?

Mi compañero apretó los labios y miró hacia arriba pensando en su respuesta.

–No, no estoy de acuerdo, no deberíamos plantear la oportunidad de no pasar de ronda.– Dijo cruzándose de brazos.– Pero lo otro ha sido muy bonito, quién diría que eras un sentimental.

Fui a replicar pero Donghyuck me envolvió en un cálido abrazo y me dio las gracias así que guardé silencio y le di unas palmaditas en la espalda.

Sing with me//Markhyuck Donde viven las historias. Descúbrelo ahora