Sing with me//Markhyuck

Cuatro

–¿Para qué es eso?– Preguntó un asustado Donghyuck al ver dos cintas blancas que traía el profesor en las manos.

–No te asustes, solo es para una actividad que vais a hacer Mark y tú ahora.– Rió el profesor que parecía que hoy venía de muy buen humor.

–Entonces sí que estoy asustado.

Rodé los ojos y me tumbé mirando hacia el techo en el suelo del escenario mientras Donghyuck y el hombre lo preparaban todo.

–¿Y qué es lo que vamos a hacer?– Pregunté levantando un poco mi cabeza para mirarles.

–Empezaremos con una actividad muy sencilla, las cintas serán para más tarde.– Reí al ver cómo el cuerpo del moreno se relajaba al escuchar eso.– Solo quiero que os sentéis el uno enfrente del otro y digáis dos cosas que os gusten y una que no; pueden ser de vosotros mismos, de la otra persona o de lo que queráis, es para que os conozcáis un poco. Yo voy a irme para que estéis más tranquilos, ¿de acuerdo?

Si para el profesor estar tranquilo significaba tener que aguantar a Donghyuck sin nadie más en una habitación creo que teníamos conceptos muy distintos de tranquilidad pero no dije nada porque no era nadie para juzgar los métodos del hombre.

–Venga, sentaos en el centro del escenario, uno enfrente del otro, es importante que os miréis.– Explicó cogiendo a Donghyuck del hombro y arrastrándolo hasta el sitio que indicaba.

Una vez estuvimos colocados el profesor se marchó diciéndonos que nos lo pasásemos bien y nos lo tomásemos en serio. Yo intenté no reírme con todas mis fuerzas porque tendía a reír con mucha facilidad y más cuando estaba incómodo o no sabía qué hacer.

–Empieza tú.– Ordenó el moreno con una expresión seria.

–¿Por qué yo?

–Simple, eres el mayor.– Era un buen argumento pero desde luego no tenía ganas de hacerle caso así que suspiré y hablé.

–Pero tú vas antes si nos guiamos por el orden alfabético.– Donghyuck frunció el ceño y apretó los labios.

–Yo he dicho antes que tú empieces antes así que tú vas primero.– Dijo rápidamente de forma que tuve que quedarme en silencio y pensar en lo que había dicho porque era muy lioso. Donghyuck sonrió triunfante.

No me quedó otra que hacerle caso así que suspiré y apoyando mi barbilla en mi mano miré al suelo de madera intentando pensar en 3 cosas.

–Em, me gusta la música y el color rojo pero no me gusta el frío.– Solté sintiéndome estúpido. El castaño me miró mal y, cómo no, rechistó.

–Me gusta la música no vale, claramente te gusta la música, estamos en un conservatorio de música.– Dijo echándose para atrás y apoyando todo su peso en sus brazos.

–El profesor dijo que valía cualquier cosa, no me vengas con esas.– Le repliqué fastidiado.

–Está bien, di cosas obvias pero yo lo haré bien.– Finalizó.– Me gustan las películas de suspense, me gusta ver mis propias actuaciones varias veces al día y detesto tener que trabajar contigo.– Todo iba bien ( y sumamente aburrido, ya que no me interesaban lo más mínimo sus gustos) hasta que decidió soltar aquella frase.

Sonreí sarcásticamente notando como me iba enfadando poco a poco y decidí seguirle el juego.

–Me gusta la lluvia, las matemáticas y no me gusta que seas una persona tan terriblemente egocéntrica.– Donghyuck alzó las cejas y también su tono de voz cuando siguió hablando.

–Me gusta escuchar música cuando no puedo dormir, me gusta el color amarillo y no me gusta que hayas llegado de Canadá hace nada y ya creas que puedes hacer lo que quieras.– Dijo con un tono amargo.