Capítulo 6

499 60 0
                                    


Chris no tardó en volver a bajar y sin decir ni una sola palabra, se acomodó con nosotras en el sofá.

-¿Vamos a ver la película o qué?- cuestionó mirando a Índigo, ella sonrió ampliamente antes de ponerla en la televisión.

Lo miré confusa, no por lo de la película sino por todo lo que estaba pasando con nosotros estos días. Su mirada me transmitió calma, así que tal vez era momento de mantener la calma...

Las caricias de Chris en mi cabello me distrajeron durante toda la película, a la cual no pude prestar demasiada atención por tener mi mente ocupada con otras cosas. Índigo se apresura en poner la segunda película cuando esta se acaba y Christopher da unos toquecitos en mi nuca.

—Si no vas a prestarle atención a la película al menos disimula. — susurra en mi oído, yo evito bufar porque sé que a nuestra hija no le agradaría en lo absoluto.

Dejo que mi cabeza descanse en su hombro y centro mi mirada en la pantalla, a pesar de que no estoy prestando le atención nuevamente.
No sé en qué momento me quedé dormida pero cuando vuelvo a abrir los ojos me encuentro en la cama y con Christopher acariciando mi cabello de una forma tan relajante que tranquilamente podría haberme dormido otra vez.

—Oh, ya te has despertado.— murmuró curvando una sonrisa en los labios—. He tenido que verme yo solo las dos siguientes películas con Índigo... Y también consolarla cuando el tal Newt murió, joder, ¿cómo le explico que solo es un personaje ficticio?

—Aún así hay que llorarle a su muerte.— digo antes de soltar un bostezo—. Él era todo lo que estaba bien en las películas.

—No me digas que tú también tienes un crush con ese chico...— dijo poniendo los ojos en blanco con fingida molestia.

—¡Claro que si!— exclamo sonriente.

Él sonríe mientras niega con la cabeza, se inclina para dejar un casto beso y acunar mi rostro con sus manos.

—Índigo está en su habitación en una videollamada con sus amigas, me pidió que no la molestara.— dijo encogiéndose de hombros.

—Hay que dejarla disfrutar de la adolescencia, ¿no? — murmuré pasando mi dedo índice por su abdomen.

Él asintió ligeramente, acto seguido me hizo sentarme sobre él. Envolvió sus brazos en mi cintura y me miró a los ojos, dejé mis manos en su pecho para después imitar su acción.

Hay algo que quiere decirme, por supuesto, pero no encontraba la forma de decírmelo.

Conocía a Christopher desde hacía bastantes años como parar saber sus expresiones cuando algo le preocupaba, cuando no encontraba palabras.

—¿Sabes que puedes decírmelo, verdad? — murmuro en voz baja, él alza la cejas sorprendido antes de asentir.

—Lo sé... Pero no encuentro forma de decirte todo lo que quiero.

Me lo imaginaba.

—Tampoco voy a presionarte, no es la mejor opción.— respondo con una sonrisa ladeada.

Él arruga su nariz, como si estuviera en desacuerdo a mis palabras. Nos quedamos en silencio durante un par de minutos, mirándonos y sonriendo el roce de nuestros cuerpos.

Finalmente, Chris decide hablar.

—Han encontrado el cuerpo sin vida de Rusell hace tan solo unas horas... Todo indica a que pudo ser un suicidio.— hace una pausa antes de continuar—. Sobredosis.

No, no puede ser posible.

Conocía a Rusell un mínimo como para saber que él no haría eso...

—¿Qué?— pregunté anonadada.

—Sé que es difícil de creer, Jewel... La autopsia lo ha confirmado.— susurró acunando mi rostro con sus manos.

—No puede ser, Christopher, él era tan de hacer lo correcto... Jamás se le cruzaría por la mente la idea de suicidarse, y menos si eso implicaba drogarse.

—Lo sé, lo sé... Es que nada de lo que está pasando tendría sentido si él decide acabar con su vida— susurra negando con la cabeza—. Escaparse de la cárcel, venir a casa para hablar contigo, las fotos, la amenaza...

¿Qué estaba pasando..?

—A no ser que...

—¿Qué que?— pregunto impaciente, me estresa que se quede callado cuando está a punto de decir algo importante.

—No estaba haciendo las cosas él solo.— murmuró alzando las cosas.

Chasquee la lengua estando de acuerdo.

—Deberíamos de informar a la policía.— dije en voz baja.

—No, no deberíamos... Él era policía, así que lo más probable es que su aliado también lo sea.

Touché

¿Que íbamos a hacer entonces?

Yo estaba más confusa que nunca... Sin embargo, Christopher parecía tener las ideas muy claras.

Recuerdos de ParísDonde viven las historias. Descúbrelo ahora