Capítulo 27

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Después de llorar durante unas horas, decidí que no podía arrepentirme. Fui irresponsable, estaba cegada por el amor y las ilusiones.
Lauren no se apartó de mi lado ni un segundo, decía todo el tiempo que no cambiaba nada lo que sentía por mí y que sin importar el resultado, era conmigo con quien quería estar y construir una vida.

Durante la noche, simplemente nos acostamos, una frente a la otra. Ella acaricio mi rostro mientras sonreía. Me encantaba verla sonreir.

-¿Por qué sonríes así? - Sabía cuál era su respuesta, pero quería escucharla de su boca.

-Porque mi amor está aquí conmigo. -Al mismo tiempo terminé riendo como una tonta. Lauren me dio un beso en la mejilla y nos quedamos horas ahí, siempre quise tener una relación así, donde el silencio no sea incómodo, donde la risa no sea forzada y las declaraciones de amor sean verdaderas.

-¿Qué estás pensando?- Lauren murmuró

- Qué tengo la novia más linda del mundo ¿y tú?

-Parece que nuestros pensamientos son los mismos.- Lauren sonrió ampliamente.
-¿Soy tu novia?

-Sí, mi novia. - Le di un beso rápido.

-Sabes que no tienes que hacer esto si no te sientes cómoda ...

-Shh. - Puse mi dedo índice en sus labios. - No se puede vivir a la mitad y estoy cansada de vivir pensando lo que dirán los demás. Quiero vivir para ser feliz ... feliz contigo.
Entonces señorita Lauren, trataré de hacerte feliz.

- Lo soy. - Lauren soltó un chillido y me abrazó fuerte.

-Parece que alguien está feliz.

- Parece que estoy, muy muy feliz.- Lauren me dio varios besos por toda la cara y así poco a poco nos fuimos adormeciendo y durmiendo.

Cuando desperté, extrañaba su calidez a mi lado. Está bien que Lauren ponga el aire acondicionado a una temperatura mínima porque prefirió dormir envuelta en varias mantas que sudada.
Antes de lavarme los dientes fui en busca de Lauren, ella no estaba en la cocina, así que fui a la sala. Lauren estaba al teléfono, escribiendo algunas cosas en su diario, finalmente colgó. Me quedé en silencio, ella escribió algo más, luego puso el diario en el sofá.

-iBuen día! - Le di un pequeño susto

-¡A la v...! Disculpa amor me asustaste. Buen día mi amor. - Vino hacia mí y cuando me iba a besar la detuve.

-Aún no me he cepillado los dientes.

- Qué absurdo. - Me besó. - Desayunemos afuera. Me las arreglé para conseguir una cita para hoy. - Creo que mi expresión no era muy buena, porque Lauren vaciló. - Si no quieres hoy, podemos ir otro día, pero Camila, necesitas saberlo.

- Lo sé.- Dejo escapar un largo suspiro. - ¿A donde iremos?

- A un hospital que está cerca de aquí, el padre de una amiga es médico allí y ella consiguió una consulta gratis, solo tendremos que pagar los exámenes. Pero tenemos que irnos pronto porque eres la tercera.

-Voy a darme una ducha rápida y a vestirme.

Dejamos su apartamento media hora más tarde. Estaba tan
nerviosa que incluso me enfermé. Lauren estaba muy preocupada mientras conducía. Los minutos parecían durar una eternidad y las calles parecían más largas de lo que realmente eran. Cuando ingresamos al hospital, Lauren pidió mis documentos, fue a la recepción y al poco tiempo regresó con una tarjeta, me la dio para rellenar.

-Come algo, amor.- habló en voz baja.

-No tengo hambre, creo que solo podré comer después de que todo esto termine.

Más que una aventura| CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora