Can I hear you sing? 🎤MikaYuu [Concluida]

15🎤 Unidos

Aquel par de tortolitos, se encontraba en el departamento del ojizafiro, los dos, en el balcón.

Cada uno tenía una copa de champán con el líquido a casi terminar, el rubio sostenía de la cintura al morocho mientras lo besaba con amor y dulzura. Se separaron de aquel ósculo, chocaron sus copas con suavidad y bebieron lo que sobraba del licor.

Al terminarlo entraron al departamento, dejando las copas en una de las repisas yendo hacia el cuarto del rubio.

Ahí volvieron a besarse con el mismo amor y dulzura, agregándole una pizca de pasión a aquel ósculo.

Ya eran pareja. Podían besarse las veces que quisieran sin que nadie los juzgue. Podrían hacer el amor libremente sin pensar que son prohibidos. Podrían ser felices, tenerse confianza, apoyarse y amarse mutuamente. Formarían una hermosa familia, donde en su hogar haya mucho amor, felicidad, armonía, comprensión y apoyo.

Poco a poco, Yuichirou quedó acostado en la cama con Mikaela encima de él y en medio de sus piernas.

Deshicieron el beso, se vieron por un rato. Cada uno admirando el rostro del otro, se rieron un poco luego se dieron un piquito.

El ojizafiro miró un rato el cuello del menor, deseaba besarlo, pero no lo haría sin su consentimiento. Le vió a los ojos, el azabache asintió en respuesta, quien al poco momento empezó a suspirar sintiendo la boca de su pareja en aquella zona erógena.

Nuevamente el más bajo recibió la mirada azulada, volviendo a asentir de que podía tocarlo y besarlo en cualquier zona de su cuerpo.

Dentro de unos minutos, el mayor se deshizo del vestido de su pareja, viendo que este tenía puesto un top de encaje que casi le dejaba ver los pezones del moreno y que decir de las medias, era relativamente sexy. Con una de sus manos, cubre su boca sonrojándose más de la cuenta.

—Cuando me propongo ser sexy, lo cumplo —dijo el moreno quitándole el blazer, suéter y camisa al rubio.

Una vez que lo deja sin camisa puede notar como el mayor tiene un tatuaje en su pectoral derecho, este era la luna en su fase creciente y entre sus puntas había una estrella, luego vio otro de un dragón en su brazo derecho.

No dijo nada simplemente se volvieron a besar.

El más alto recorría con sus manos el cuerpo del más bajo, pasando suavemente sus yemas por la piel levemente bronceada.

Poco a poco se deshizo de las medias y ropa interior del más bajo, dejándolo desnudo a su merced. Su boca bajo hasta el pecho del menor, lamiendo y chupando los pezones de este, provocándole pequeños gemidos y jadeos.

Siguió bajando hasta llegar al miembro ajeno. Lo tomó con delicadeza, lo lamio un poco, para seguido meterlo a su boca y chuparlo. Así se deleitaba con los dulces gemidos de su pareja.
Luego lo sacó para lamer la entrada de este.

Se aleja y limpia sus labios, con su derecha alcanza el cajón de la mesa de noche de ahí saca una botella de lubricante.

La destapa y pone cierta cantidad en sus dedos. Los cuales pasa por el ano del más bajo. Luego los introduce suavemente, sintiendo como el interior del moreno se relaja.

Los mueve lentamente seguido aumenta el ritmo. Cuando siente que este está listo, saca los dedos del interior de su pareja. Desabrocha sus pantalones y se los quita junto con sus boxers; nuevamente aplica lubricante en su mano y la pasa por su miembro.

El más bajo le toma de las mejillas sonriendo le dulcemente. Se besan por unos segundos, luego, Mika pone la cabeza de su pene sobre el ano de Yuu presionando suavemente. Comenzando a entrar, el interior del morocho no estaba estrecho, lo cual le permitía al miembro más grande entrar sin complicaciones.

Ambos gimieron cuando la hombría del rubio se encontraba completamente adentro de su novio. Esperó unos minutos y empezó a mover su cadera en un vaivén lento pero profundo.

El ritmo no fue aumentado, solo que las posiciones cambiaban, ellos solo disfrutaban de los besos, caricias y placer que se otorgaban.

Sus gemidos estaban sincronizados con el choque de sus pieles. El cuello del moreno era besado con amor, a veces sentía lamidas que le hacía girar para besarse con su novio si estaba su espalda contra el pecho del rubio.

Pronto volvieron a pose inicial, ahí, acabaron con su acto de amor, llegando a su orgasmo. El más alto liberando su esperma en el interior de su pareja, mientras que éste lo hacía en el abdomen de ambos. Gimiendo a la vez.

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Se encontraban abrazados, suspirando llenos de amor.

Mikaela le otorgaba mimos a su novio, mientras éste simplemente se dejaba consentir.

—Esto fue lo mejor que me ha pasado —comenta el moreno con una hermosa sonrisa.

—Lo mismo digo —comenta el rubio con una amplia sonrisa.

Ambos de miran a los ojos luego se besan. Para después separarse.

Yuichirou pone su mirada en el pectoral derecho del ojizafiro, pasando su mano encima del tatuaje.

—¿Qué significa? —pregunta sin apartar la mirada del dibujo en la piel de su novio.

—Es el símbolo de nuestra banda, los cinco decidimos hacernos ese tatuaje. Aunque... Shushaku no quiso, al final se armó de valor y se lo hizo —dijo rascando su nuca, provocando que su novio se riera.

—¿Y él dragón? —pregunta otra vez esta vez viéndolo a los ojos.

—El valor que tuve a enfrentar muchas cosas en mi vida y así seguir adelante aprendiendo del dolor y remediando errores —respondé.

—Sin duda eres el mejor —dijo el menor haciendo que el de tez pálida se sonrojara y oculta su rostro en los cabellos negros y alborotados del más bajo.

Luego de varios minutos ambos se quedaron dormidos después de haberse besado por última vez en su noche.

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Al día siguiente, ambos se despertaron, se dieron los buenos días entre muchos besos y mimos.

Decidieron levantarse de la cama, Mika le puso su camisa a su novio y los dos fueron a la cocina a hacer el omelette de arroz y pollo que el rubio prometió al menor enseñarle cómo se hacía.

Y esta vez a Yuu le quedó bien, incluso tenía mejor sabor que los que hacía su novio.

Al terminar de comer decidieron hacer el amor otra vez.

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Actualización: 01 enero de 2020

Ay el amor.jpg xd

Feliz Año Nuevo :D tengo cólicos y me siento de la verga ;-;