Capítulo 40

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Como ando inspirada les traigo un capítulo más de esta historia que cada vez se pone más... Ufff
Este capítulo está fuerte así que no me maten jejejeje
Disfruten... Y no olviden sus comentarios y votos

POV Lena
Dos días, pasaron dos días sin verla y no soportaba más. Tenía que buscarla, tenía que hablar con ella y saber qué había pasado realmente con Diana. No me había contestado llamadas ni mensajes, nada… no había sabido nada de ella y me estaba volviendo loca.
-¡Lena! -. Apenas vi sus hermosos ojos azules sentí que volvía a respirar, no dije nada y solo me lancé a darle un abrazo
- Te he extrañado tanto. – digo sin querer soltarla
- Yo también. – escucho que me dice en el abrazo -. Lena… yo
- Habla conmigo Kara, por favor -. Le digo después de verla dudar por mi presencia
- Pasa -. Me deja entrar y noto que se encuentra sola
- ¿y Eliza? – pregunto. La próxima semana tiene la cita para su cesárea y no es conveniente que esté sola.
- Mamá… ella fue a ver lo de la casa
- ¿casa?
- SI… emmm… encontramos una casa cerca de aquí para vivir ahí junto con los bebés… mamá pidió su transferencia a Ciudad Nacional porque no quiero irme a Midvale, me trae… malos recuerdos – no se irá, eso me hace sonreír
- Entonces, ¿se quedarán aquí?
-  Si, mamá se mudara conmigo y… bueno estaré cerca de mi hermana
- Y me tendrás a mi…
- Si. – dice bajando la cabeza
- ¿Qué ocurre? ¿Qué pasó con Diana? Ella me dijo que
- No fue nada. – dice molesta
- Saliste enojada y te fuiste de casa y…
- Tu casa, me fui de tu casa porque ya no quiero ser una molestia
- No eres una molestia Kara, soy feliz de que vivas conmigo
- ¡Lo soy! Mereces tener una vida
- Tengo una vida. – tú, eres mi vida
- ¡No es verdad! No sales, no te diviertes, te la pasas cuidándome y… tienes derecho a más. – se ve triste
- ¿Qué te dijo? – me mira confundida – Diana ¿Qué te dijo? Porque ella no tiene ningún derecho de…
- No me dijo nada… solo… me di cuenta que…
- ¿de qué?
- De que no quiero ser una carga para ti, que no quiero que estés conmigo por lástima y sacrifique toda tu vida ¿Por qué lo haces? ¿Por qué me cuidas tanto? – porque te amo más que a nada en este mundo
- Porque me importas, Kara - ¡Cobarde! ¡Díselo, es tu oportunidad!
- ¿Solo por eso? ¿Por qué soy tu amiga? - ¡NOOO! ¡Lo hago porque eres el amor de mi vida!
- Eres mi familia. - ¡Soy tan cobarde!
- Somos familia. – me dice con una sonrisa triste. ¡SOY UNA IDIOTA!
- No solo es por eso, es porque yo te…
- ¡Tía Lena! - ¡Maldita sea! ¿Por qué ahora?
- Hola, mi princesa. – saludo a mi sobrina que llega junto a Eliza y Alex
- Fuimos a ver la nueva casa de la abuela y mi tía Kara, esta preciosa, tiene un jardín enorme y mamá dice que las podremos visitar todos los días ¿tú ya la viste? – dice mi sobrina emocionada sin saber que acaba de interrumpir el momento más importante de mi vida
- Aún no he ido, pero espero recibir una invitación pronto. – digo sonriendo
- Serás bienvenida cuando gustes, cariño – me responde Eliza acercándose para saludarme – me da gusto verte
- A mí también – respondo
- Hola, Lena. Que gusto que vinieras – me dice Alex dándome un abrazo
- ¿Así que te quedaras en la ciudad? – preguntó a la mayor de las Danvers
- Si, Kara no quiere irse a Midvale ya que aquí tiene toda su vida y yo no puedo dejarla sola con dos bebés, así que decidimos que lo mejor es que me quede a vivir con ella por algún tiempo más
- Es una buena idea, pero ella no está sola me tiene a mi… y a Alex y Sam
- Y a mí – responde la pequeña
- Gracias Lena, pero tú has hecho mucho por mí y mis bebés. Es hora de que vaya buscando mi propio espacio. – dijo mis bebés, no puedo evitar sentirme herida
- Tus… tus bebés… si… ya casi es hora. – digo con dolor – pensé… pensé que me dejarías acompañarte
- Lena, yo…
- Rubbs, ¿te parece si vamos con la abuela por un helado? – interrumpe la pelirroja
- ¿Me dejaras comer helado antes del almuerzo? – pregunta sorprendida la niña
- Solo si prometes no contarle a tu madre – le responde con una sonrisa
- Lo prometo mamá – contesta la pequeña con una sonrisa
- Nos veremos más tarde, cariño. Lena, te veré después – dice la mayor y me dedica una sonrisa. Las tres mujeres salen del apartamento dejándonos nuevamente solas
- Me… me dijiste que te quedarías conmigo hasta que los bebés nacieran ¿Qué cambio?
- Nada, aun no me voy y… no me iré… seguiré en la ciudad. Es solo que… ya no podemos vivir juntas. – si mi corazón estaba roto, ahora estaba completamente destrozado
- Kara…
- No tiene nada que ver contigo o… Diana – dice su nombre con enojo. – pero quiero demostrarme que podré salir adelante con mis hijos sola y no necesito que me esté cuidando cada cinco minutos. – dice con dolor
- ¿de verdad, eso quieres?
- Si. – responde segura
- Cómo tú desees, yo… lo que menos quiero es que sientas que te presionó. Si no quieres que esté contigo cuando nazcan yo…
- ¡No! - ¿no me quiere ahí? – es decir, si… quiero que estés conmigo el día que nazcan los bebés. Eso no ha cambiado – suelto un suspiro de alivio, al menos estaré con ella en ese momento.
- ¿Y qué cambio? – preguntó con miedo
- Qué… me di cuenta que estoy siendo egoísta contigo y… lo que más deseo es que tú también seas feliz. – solo contigo podría serlo
- Lo soy
- No es verdad – dice soltando un suspiro ¿Qué sabe ella de mi felicidad?
- Te has dedicado a mi desde el accidente y ya ni si quiera sales a divertirte como antes, tu vida gira en torno a mí y… no es justo. – eso no me importa, me importas tú
- Me gusta cuidarte y… bueno no salgo porque tengo trabajo y…
- ¿Qué hay de Diana? – suelta de pronto
- ¿qué con ella?
- Ella está interesada en ti ¿lo sabes, no?
- Si, pero…
- ¿Te gusta? Y dime la verdad, no… no me voy a enojar, a menos que me mientas y sabre si lo haces
- No, ella. – me mira a los ojos como diciendo que le estoy mintiendo. – si me gusta. – le contestó y veo que su mirada refleja dolor ¿le duele? – pero no ella no me interesa. Si te soy sincera si, me gusta Diana, me gustaba en la universidad y volverla a ver a sido, maravilloso y ella es estupenda, pero no… no me interesa
- ¿Por qué no? Ella sabe qué te gusta, te diviertes con ella y es muy hermosa. – no mas que tú y no me interesa porque la única a la que amo es a ti
- Porque...
- Yo sé por qué. – sus palabras me sorprenden y abro mis ojos como platos ¿sabrá sobre mis sentimientos? – es por mi… te dedicas a mí y te has olvidado de ti… yo… no quiero eso. – no, no es por eso
- Kara, eso no
- Es la verdad, y ya no seré más un impedimento para ti. Si te gusta Diana, ve, búscala y date una oportunidad. Mereces todo Lena, mereces más de lo que yo puedo darte… mereces ser feliz y amada… por favor, yo… no quiero seguir sintiendo que te estoy robando la oportunidad de ser feliz con alguien que… alguien que se interesa por ti, porque estés bien, por hacerte sonreír - ¿Por qué me dices esto mi amor, por que? Si tú me haces inmensamente feliz solo con estar mi lado
- Yo no necesito mas
- ¡Mereces más Lena! Y ya no quiero ser un estorbo, una carga… por favor, vete… busca tu felicidad. - ¡Mi felicidad eres tú!
- Kara, por favor… no – trato de acercarme y tocarla, debo decirle que la amo, debo decirla la verdad
- Ya basta, Lena, por favor. Te lo suplico… vete. – veo tanto dolor en sus ojos ¿yo te estoy dañando? – necesito… necesito que te vayas. Tengo… tengo que aclarar muchas cosas, por favor, no hagas esto más difícil. – esto es lo mas doloroso que me pudo decir, yo la estoy lastimando. No digo nada y asiento con la cabeza, mis lágrimas amenazan con salir, pero las reprimió. No quiero que me vea llorar
- Si es lo que quieres
- Si, es lo que quiero. – dice segura. Me alejo dándole una última mirada y salgo del apartamento con mi corazón hecho pedazos.
No fui a trabajar en todo el día, llamé a Jess para pedirle que cancelara todas mis citas y reuniones. Sé que tenía una reunión con unos inversionistas para ver algo de unas ganancias, pero ya no me importaba nada. Mi corazón estaba herido porque ella se había ido y había dejado. Ni siquiera estoy segura que me deje estar con ella cuando nazcan los bebés y yo siento que me muero por no estar a su lado.
Había llorado por horas que ni siquiera me di cuenta que ya había anochecido. Me serví un whisky y de gustaba el sabor amargo de mi bebida en la boca cuando el timbre de mi apartamento llamo mi atención. No quería ver a nadie, así que no hice caso, pronto se casaran de insistir.
No lo hicieron, el timbre seguía sonando y me estaba cansando, pero seguía ignorando lo, quien fuera, no quería ver a nadie, solo a ella. Después de un tiempo el timbre dejó de sonar y yo había perdido la cuenta de los tragos que llevaba.
-¡Lena! – veo que Diana entra en mi apartamento y corre a verme. No me había percatado que estaba tirada sobre el piso bebiendo
- ¿Có… como en… entraste? – pregunto
- Tuve que sobornar al portero para que me diera la copia. – dice con una sonrisa vergonzosa
- Diana Prince rompió las reglas ¿quién lo diría? – digo en forma sarcástica
- No hubiera tenido necesidad de hacerlo si hubieras abierto. – dice ayudándome a levantar y la abrazo por los hombros
- No quería ver a nadie… porque… porque… no me acuerdo por qué. – digo riéndome, creo que alcohol me ha cobrado factura
- Tomaste mucho, ven, vamos a qué te duches. – apenas puede conmigo y yo no sé la pondré fácil
- ¿Entraras conmigo a la ducha? – me giro a abrazarla y quedar cerca de sus labios – porque eso me gustaría mucho
- Vamos, Lena, te ayudaré a que te sientas mejor. – dice alejándome
- ¿Mejor? Nadie… puede ayudarme a sentir mejor… otra vez… otra vez perdí a lo que más amo… ella… ella me dejó. – digo dejando caer mis lágrimas
- ¿Qué pasó? – me acomoda en el sofá
- ¿Ya no hay baño? – le digo con un puchero y ella me sonríe
- Si, si habrá baño, pero antes quiero saber qué te pasa
- ¿Qué me pasa? ¡NADA! Yo… estoy perfecta. – trato de levantarme del sofá, pero mis piernas me tiemblan y casi caigo al suelo. De no ser por los brazos de Diana que alcanzan a detenerme - ¡Wow! ¡Eres fuerte! ¿Acaso puedes ser más perfecta? Eres como una maravilla. - ¿y si… la beso? Me acerco a ella lentamente
- No, Lena, así no… será mejor que te lleve a esa ducha. – dice alejándose de mis labios y me siento rechazada ¡a ella tampoco le importo!
- ¿No quieres besarme? ¿No te gusto?
- ¡Claro que me gustas! Y te quiero, y es por eso que no pienso aprovecharme de tu condición, estas mal y solo quiero ayudarte, ven, vamos.
Diana vuelve a ayudarme a caminar y me lleva hasta la ducha, llena la bañera y me ayuda a quitar la ropa, trato de seducirla, pero parece que no le interesó para nada. Ella me mete con cuidado al agua y me ayuda a lavar el cabello.
Después del baño, me ayuda a ponerme un pijama y llevarme a mi habitación, se siente tan solitario, tan vacío sin ella y mis lágrimas vuelven a dejarse llevar.
-Me dejó, Diana, Kara me dejó. – le digo a. Mi amiga llorando
- Lena, yo… lo lamento mucho… tal vez no debí…
- No… No debiste…. – digo y ella baja su cabeza avergonzada. – no sé qué le dijiste, pero lo que haya sido… tú… no tenías derecho… ahora… ella se ha ido y yo… vuelvo a estar sola. – agachó mi cabeza llorando y ella sujeta mi barbilla con cuidado para que la vea
- No estás sola Lena, me tienes a mi y a Sam que te amamos con todo el corazón y. – no la dejo terminar, sin pensar me lanzó a su brazos y la beso con pasión, con desespero. Necesito sentirme querida, amada, deseada. – Lena. – dice soltando un genio y comienzo a acariciar su cuerpo, ella no me rechaza y me devuelve el beso y las caricias, la encaminó hasta la cama y la dejo caer sobre ella, sigo con mi misión de besarla, quiero sentir, quiero olvidar. - ¡Ahh! ¡Lena, esto, no… no… - dice entre besos y gemidos, pero no pienso rendirme
- Por favor, por favor. – digo en sus labios. – no me rechaces, por favor, te… deseo. – Veo sus ojos oscurecer de deseo y sé que ella también quiere esto, me acerco a su cuello y bajó lentamente por él, con mi mano voy abriendo lentamente los botones de su blusa, quiero hacerla mía, acerco mi mano hasta su pecho y dejo pequeñas caricias. Beso su abdomen y me detengo en sus pecho ¡es tan perfecta!
- ¡Basta Lena! ¡Basta!  - dice parándose de golpe y abrochado su blusa, me siento herida nuevamente por su rechazo
- ¿No lo quieres? ¿No…me deseas? – le pregunto con dolor en mis palabras
- Por supuesto que te deseo, quiero estar contigo, pero no así. Será mejor que duermas. – dice y se levanta de la cama
- Yo lo quiero, quiero estar contigo. – digo tratando de detenerla
- No Lena, tú lo que quieres es olvidarte de Kara, y yo… yo no dejaré que me uses para eso… te dije que me gustas y es la verdad. Yo quiero todo contigo, quiero una relación, quiero amarte y que me dejes cuidarte, pero no es momento… Sé que tu corazón le pertenece a Kara
- No… no digas su nombre, por favor. – el solo oírla mencionar hace que mi corazón vuelva a sufrir
- Descansa Lena, mañana...mañana hablaremos con calma – me dice con una sonrisa triste
- ¿te iras? – el pensar que ella también me deja me duele en lo más profundo
- No, me quedaré en el sofá para cuidar que estés bien, tú descansa. – me ayuda a acomodar en la cama y me deja un tiene besos en la frente.
- Diana. – le llamó antes de salir de mi habitación. – Gracias. – ella asiente con una sonrisa y sale, dejándome de nuevo sola, mañana… me arrepentiré de esto.

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Y pues.... Ya vieron... Kara fue la primera en irse y es solo una de las cosas que hace para terminar de romper el corazón de Lena, quien ya vimos cómo reacciono
¿Qué opinan de esto?
¿Qué creen que pase después?
Diana no piensa ser usada como medio de olvido, pero eso ko significa que se haga a un lado.
Saludos y nos leemos pronto 🤗🤗🤗

Enamorada de ti (AU Supercorp) Completa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora