Enamorada de ti (AU Supercorp) Completa

Capítulo 16

Holaaaa! Hoy actualización temprano y tal vez tengan doble capítulo, pero ya conocen las reglas.
Votos y comentarios para seguir actualizando.
Disfeuten

El almuerzo con Diana fue maravilloso, pasamos mucho tiempo platicando, riendo y recordando viejos tiempos. Tenía mucho que no me divertía de esta manera, no me había dado cuenta de que la extrañaba, añoraba pasar tiempo así con una amiga, siendo solo yo sin restricciones por mis sentimientos.
-Entonces, ¿Steve y tú?
- Nos divorciados hace dos años, la verdad es que funcionamos mejor como amigos – Diana se había casado con su novio de la universidad un par de años después de graduarse
- ¿Se llevan bien? Después del divorcio
- De maravilla, somos mejores amigos, incluso él está por casarse de nuevo y Caity es una chica maravillosa
- Me alegro por él y por ti, te ves muy feliz, pero dime ¿hay alguien especial?
- Aun no, pero no pierdo las esperanzas ¿qué hay de ti? – dejo salir un suspiro pesado – uy, eso fue profundo, ¿hay alguien, cierto?
- En mi corazón si, pero es imposible – no puedo evitar que mi voz suene un poco quebrada, hasta hoy solo Sam, sabe de mi amor por Kara. La castaña se había tenido que ir a recoger a su hija de la escuela y me había dejado sola con Diana
- ¿quieres contarme? - asiento sin mirarla, necesito desahogar mi dolor con alguien más que con Sam, para mi amiga esto es complicado también. Hoy ella se molesto conmigo por llegar tarde, le entiendo, tiene que estar en medio de todo pues Kara al final del día es su cuñada
- Es una larga historia – suspiro viendo a la nada, mi historia con la mujer que amo no es fácil de entender
- Tengo tiempo, seguro que a mi futura socia no le molestara que me tome la tarde libre – le regalo una leve sonrisa, debo decirle, debo sacar mi dolor, tal vez hablándolo con alguien más me sea más sencillo arrancarla de mi corazón
- Me enamore de mi mejor amiga – le digo y ella abre los ojos como platos
- ¿de Sam?
- ¿qué? ¡No! No es Sam, ella está felizmente enamorada de Alex, la hermana de la mujer que amo
- Explícate, que no entiendo – me mira confundida y después de otro suspiro le cuento mi historia con Kara, como nos conocimos, como me enteré que tenía novio y como fui tan masoquista ayudando para que su boda se llevara a cabo. Le conté del accidente y todo lo que ha pasado después – ok, a ver si entendí. Tú estás enamorada de esta chica, Kara, pero ella solo te ha visto desde hace casi cuatro años solo como su mejor amiga
- Si
- Su esposo acaba de morir en un accidente, ella ha vivido contigo los últimos meses porque no puede estar sola y tú has sacrificado todo por estar a su lado – asiento ante todo lo que me dice, un silencio nos inunda a ambas durante algunos minutos - vaya Lena, eres
- Masoquista, idiota, ingenua, lo sé
- Increíble, valiente – le miró sorprendida por sus palabras, jamás me he considerado valiente, todo lo contrario
- No lo soy
- Lo eres – ella toma mis manos de forma cariñosa y me hace mirarla a los ojos – la amas tanto que eres capaz de sacrificarte por ella y sus hijos, estas a su lado, la cuidas, la proteges y no pides nada a cambio. La verdad es que, no me creo capaz de hacer algo así, no podría ver a la persona que amo llorando de amor y dolor por alguien mas, de verdad te admiro
- La amo Diana y lo que mas deseo es que ella sea feliz aunque no sea conmigo – unas lágrimas brotan de mis ojos – y por más que lo intento no puedo arrancarme este amor que siento, pero soy cobarde y no me atrevo a alejarme de ella, no puedo dejarla, no puedo – rompo en llanto y siento sus brazos a mi alrededor, ella me abraza con fuerza y yo dejo salir todo el dolor que me acompaña
Diana se quedó conmigo consolado mi dolor, me hacía tanta falta sacar lo que llevaba dentro. No me di cuenta que el tiempo había pasado muy rápido y llegué a casa pasadas las ocho de la noche. Cuando entre encontré todas las luces apagadas y una preocupación enorme me invadió, no encontraba a Kara por ningún lado. Tomé mi teléfono y marque su numero, escuche dos tonos y me contestaron.
-Hola, Kara ¿dónde estás?
- Hola, Lena, soy Nia, Kara se quedará esta noche conmigo, no se siente muy bien – me contestó la joven castaña
- Ah, muy bien ¿crees que pueda hablar con ella, por favor?
-Un momento – escuche algunas voces, pero no lograba identificar qué decían, al cabo de unos minutos me respondieron de nuevo
- Hola Lena, estoy bien, no te preocupes. Nos vemos mañana
- Kara, yo… - no me dejo terminar, la rubia me había colgado el teléfono ¿se habrá molestado porque llegue tarde? ¡Demonios! Le dije que llegaría temprano, pero ella entenderá, lo sé, mañana que este más tranquila le explicaré.
No logré dormir nada anoche, me he acostumbrado tanto al cuerpo de Kara junto al mío por las noches que no pude conciliar el sueño. La extraño, la extraño mucho. No puedo pasar ni siquiera una noche lejos de ella ¿cómo podría alejarme por completo? No, no puedo, ha quedado claro.
Hoy quedé de ir a la oficina con Diana, le prometí mostrarle todas nuestras instalaciones y avanzar con la propuesta de negocio para nuestras empresas. Pero antes debo buscar a Kara, debo verla y asegurarme que está bien, siento la necesidad de disculparme con ella por llegar tan tarde ayer.
- Hola, Nía – saludo a la joven que parece lista para salir a trabajar - ¿puedo ver a Kara?
- Oh sí, claro, pasa, está con Winn – la castaña me deja pasar y entra tras de mi - ¿te ofrezco un café?
- Estaría perfecto, muchas gracias
- Excelente, deja llamo a Kara para que baje y enseguida traigo tu café – la castaña se da media vuelta y sube las escaleras, lleva un tiempo viviendo con Winn y están por casarse
- Hola, Lena, qué gusto verte – el chico me saluda con un abrazo que correspondo con gusto - Nía y Kara no tardan en bajar, ven acompáñame por ese café que seguro ambos necesitamos – tanto Winn como yo nos volvimos adictos a esta bebida, éramos fervientes bebedores desde antes pero nuestra adicción aumento desde el accidente de Kara
- ¿Cómo esta? – le pregunto entrando a la cocina y el chico va directo por la cafetera
- Bien, no paso muy buena noche, Nía y yo tuvimos que turnarnos para calmarle
- Lo siento, yo…
- Hey, no te disculpes, no es tu responsabilidad y también es nuestra amiga. Al contrario, somos nosotros los que te debemos una disculpa, te hemos dejado sola ayudando a Kara todo este tiempo
- Lo hago con gusto, ella es muy importante para mí – el chico me tiende el café y lo recibo con gusto, el olor a cafeína me reanima pues me siento muy agotada por la falta de sueño
- Lo es para todos, dime una cosa – le miro atenta, no sé qué me quiera decir y me pongo nerviosa – las pesadillas ¿son así siempre? – me sorprende su pregunta
- ¿Así cómo?
- Anoche…ella no dejaba de gritar y llorar – bajo mi cabeza, sí, así son siempre
- Han disminuido un poco estos días, pero a veces sus crisis son más fuertes y no deja de llamar a Mike
- No, solo era eso, ella si llamaba a Mike, le pedía que no se fuera, pero también…
- Hola, Lena – el chico no había terminado de contarme sobre las pesadillas de Kara cuando ella entro, se veía agotada y con sus ojos hinchados por tanto llorar
- Yo iré a prepararme para ir a trabajar, con permiso – el chico se despedida de nosotras para dejarnos a solas y poder hablar
- Kara, yo…
- Está bien, Lena, entiendo. No puedes estar siempre para mí, debes atender tu empresa y lo entiendo. Discúlpame por mi comportamiento es solo que yo…
- Oye, no, no digas eso. Tú eres más importante que mi empresa, debí avisarte que tardaría más y lo lamento, debía estar contigo ayer – me acerco un poco a ella para tomar una de sus manos y le sentí muy nerviosa, quiso retirar su mano y lo entendía, estaba molesta conmigo – Winn, me contó que tuviste otra crisis a noche – sentí su agarre fuerte y vi sus ojos llenarse de lagrimas
- Fue horrible – me acerque a ella y le abrace con fuerza – te extrañe mucho, creo, creo que, me he acostumbrado a que seas tú quien me calme y anoche yo…
- Yo también te extrañe y de verdad lo siento, te prometo que no volverá a pasar – digo secando cada una de sus lágrimas de sus mejillas
- Gracias, gracias por todo Lena, no sé cómo puedes soportarme – porque te amo, por eso aguantaría esto y más con tal de estar a tu lado
- Porque eres muy importante para mí y nunca te voy a dejar
- Eres la mejor Lena…la mejor…amiga que alguien puede desear tener – claro, solo eso puede ser para ti, pero prefiero conformarme con tu amistad que tener tu desprecio si te revelo mis sentimientos
- Lo sé, soy la mejor – digo con fingida molestia y ella me sonríe
- ¿te quedaras hoy? – me dice con una de sus hermosas sonrisas que me vuelven loca, no quiero romper su alegría, pero debo hacerlo
- Yo, lo siento, pero…
- Debes trabajar – me dice algo decepcionada
- solo unas horas, pero podemos almorzar juntas ¿te parece? – le veo sonreír de nuevo y sus lágrimas han desaparecido
- Entonces, ¿es una cita? – realmente lo deseo
- Claro, una cita para almorzar con mi mejor amiga – le doy un fuerte abrazo y contengo mis lágrimas de salir
- Veo que todo esta bien, debemos irnos, pero se quedan en su casa chicas – no dice Nía, que ya está lista para irse a Catco
- No, esperen – les detengo – yo los llevo, tengo que ir a L- Corp el día de hoy
- Eso estaría genial, ir en autobús no es tan divertido – dice el castaño – así tenemos tiempo de charlar un poco
- Me parece genial, Winn – le digo sonriendo a mi amigo, hace tiempo que no platicamos – Kra, ¿te dejo en casa de Alex? – le noto fruncir el ceño algo molesta
- No, prefiero irme a casa – me dice con seriedad, aun no le pregunto sí discutió con su hermana
- Pero estarás sola toda la mañana – no puedo creer lo que haré - ¿quieres acompañarnos a L-Corp? Le daré un tour a Diana y me gustaría presentarte, a ambos – corrijo mirando a ambos
- ¿Quién es Diana? – pregunta con seriedad, de verdad esos cambios de humor me desconciertan
- Oh, ella es la nueva socia de mi empresa, bueno eso espero. Es a quien recogí esta mañana
- Espera, ¿Diana como Diana Prince? – me pregunta la castaña
- La misma – aseguro con una sonrisa
- No lo puedo creer, hemos buscado una entrevista con ella por meses, nuestras fuentes nos decían que vendría a la ciudad a hacer negocios, pero nunca imaginamos que fuera contigo – contó emocionada la chica
- Para serte sincera yo no sabía que vendría sino te hubiera dicho desde antes
- ¿Ya la conocías? – me pregunta la rubia
- Por supuesto, ella, Sam y yo fuimos amigas en la universidad, no la veía desde que nos graduamos y ayer que le volví a ver me llevé una gran sorpresa – dije con emoción
- Vaya, ahora entiendo por qué te tardaste – me dijo con ¿enojo?
- Sí, lo siento, debí decirte, pero es que me emocioné con ver de nuevo a mi amiga
- Puedo verlo
- Sí, bueno, Lena ¿crees que Diana nos quiera dar una entrevista? Aumentaría mucho nuestras ventas – me dice la castaña con mirada de suplica
- Claro que sí, yo me encargo de convencerla – digo con una sonrisa
- Pff – escucho el sonido molesto de Kara
- ¿Te sientes mal? – pregunto preocupada
- No, estoy perfecta – me da un intento de sonrisa que parece más una mueca
- Ok, entonces Nia, te avisaré cuándo puedes hacer la entrevista para que envíes un reportero
- Yo lo haré, no necesitas enviar a nadie – le interrumpe Kara sin dejar a la chica hablar
- Tú estás de licencia, no estás trabajando Kara – le digo algo molesta, más porque quiere trabajar cuando debe descansar
- Estoy perfectamente bien para una entrevista, además estoy cansada de estar encerrada. Si Diana Prince está en la ciudad y pasara tiempo por aquí puedo aprovechar y volver a mi trabajo de reportera
- Kara, aún no estás bien y necesitas descanso
- Estoy muy bien para realizar algunas preguntas ¿de acuerdo? No es como que vaya a escalar el Monte Everest ni nada, además seguro Lena estará ahí ¿no es cierto? – me mira de una forma extraña y no logro comprender qué le sucede
- Clara, ahí estaré
- Perfecto, ya lo tienes Nía, tendrás la exclusiva de la sociedad de Lena Luthor y Dina Pince, ahora sí ¿nos vamos? – dice saliendo de la casa de nuestros amigos sin darnos oportunidad de hablar
- ¡Vaya! Yo de verdad espero que no te pongas así cuando esperes a nuestro primer hijo – le dice el chico a su novia provocando que Nía y yo soltemos una pequeña risa
- ¿Vienen o no? hay trabajo – nos grita la rubia desde la puerta
- Ya vamos – le respondemos los tres al mismo tiempo.
Los cuatro subimos a mi auto para dirigirnos a nuestros trabajos, yo no estaba nada de acuerdo con que Kara trabara, pero era tan necia y sabíamos que no habría forma de hacerle cambiar de opinión, así que me tocaba hablar con Diana para pedirle que fuera amable con ella y le permitiera hacer la entrevista. La actitud de Kara de estos días me tiene realmente desconcierta, quisiera saber qué pasa por su hermosa cabecita y poder ayudarle, no hay nada que no haga por ella.

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¿Serán celos? O ¿qué estara pasando con Kara?
Hay muchas preguntas en esta historia que poco a poco se irán resolviendo.
Y para quienes preguntas, Kara y Alex tardarán un poco en reconciliarse y la razón de su pelea la sabremos cuando Kara nos cuente su versión de la historia.
Saludos y nos leemos pronto 🤗🤗🤗