Capítulo 22

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Holaaaa!
El último por el momento, no quise dejarlas con la angustia mucho tiempo. Quedó más largo pues les tocará esperar unos días por el siguiente. No se preocupen, no serán muchos, solo que quiero actualizar mis otras historias y tengo que ser adulto responsable con mi trabajo jejeje.
Por mientras, disfruten

El miedo es el peor sentimiento que puede haber cuando amas a una persona, mi más grande temor es perderla, que algo le pase y ese sentimiento ha crecido desde ese día que la vi en una cama de hospital conectada a un sinfín de aparatos, mi mundo se habia roto, mi vida habría terminado con la de ella si no hubiera despertado de ese sueño.
Cuándo la escuche gritar por mi mente solo podían pasar aquellos recuerdos de mi hermosa rubia postrada en aquella cama, el sonido del monitor palpitante que me hacía saber que ella seguía con vida pero sin saber por cuánto tiempo más.
-LENA, LENA – gritaba con desesperación, abrí la puerta casi de golpe y la vi, sentada sobre la cama llorando desconsolada – Lena!! – dice y corre a mis brazos llorando, no entiendo qué pasa
- ¿Estas bien? ¿Te sientes mal? ¿Quieres que llame al doctor? – ella niega con su cabeza en el abrazo, no me suelta y no me deja ir, solo quiero saber que esta bien – por favor, Kara, dime qué te pasa – ella no deja de llorar, el miedo que siento de que algo malo le pase no deja de inundar mi ser – Kara, por favor, no me asustes
- No me dejes, por favor, no me dejes – me dice llorando
- No lo haré, aquí estoy, aquí estoy – le digo acariciando su espalda intentando calmarla.
- No estabas, Lee, no estabas. Desperté y tú no estabas – me dice entre sollozos, no deja de abrazarme y llorar.
- Perdóname, te estaba preparando el desayuno, pero aquí estoy. No iré a ningún lado Kara, te lo prometo – siento como se va relajando y se separa de mi abrazo poco a poco
- Yo…yo…no quise asustarte, lo… lo siento – me dice limpiando sus ojos de las lágrimas
- No tienes por qué disculparte, tranquila, todo estará bien. Ven siéntate – la llevo hasta la cama para que tome asiento y termine de calmarse - ¿fue una pesadilla? – le preguntó, es la única explicación que encuentro a su comportamiento y ella asiente nerviosa
- Fue… fue horrible
-¿quieres hablar de ello? – preguntó con cautela, no quiero estresarle más
- N… no…no quiero hablar de eso, yo…yo lo siento – me dice y veo que sus ojos se inundan nuevamente de lágrimas
- ¡Hey!, tranquila, no pasa nada – me acerco y le abrazo nuevamente para hacerla sentir segura – estás pasando por mucho ahora y necesitas estar tranquila por los bebés – le digo con cariño
- S…si…si, es sólo qué…sentí mucho miedo, lo siento
- No tienes porque disculparte, ¿quieres que te traiga el desayuno?
- N…no…no te vayas, por favor – me dice aferrándose a mi cuerpo
- No iré a ningún lado, sólo traeré tu desayuno ¿sí?
- No me dejes sola, por favor, tengo miedo – escucho su voz y suena temerosa
- Bien, me quedaré contigo o puedes acompañarme a la cocina para que desayunes ¿de acuerdo?
- No tengo hambre
- Debes comer, estos pequeños -digo tocando su vientre – necesitan alimento, anda ven, vamos a la cocina – me levanto con cuidado y tomo su mano. Le tengo que llamar a Kelly para que me diga cómo actuar, Kara ha estado muy extraña estos días y lo mejor seria que tuviera una terapia con ella.
Llegamos a la cocina y veo el desastre que deje por salir corriendo a buscar a Kara. No me ha soltado la mano desde que salimos de la habitación y la siento temblar.
- Ven, toma asiento en el sofá, iré por tu desayuno
- ¡No, no te vayas! – me dice aferrándose a mi mano con fuerza, justo como el día del funeral de Mike
- Sólo voy a la cocina, no me perderás de vista ¿de acuerdo? – ella asiente dudando y no le queda remedio más que soltarme para que yo pueda ir a la cocina. Puedo sentir que me sigue con su mirada y me doy prisa lo más que puedo para no tardar. – Ten, te prepare huevos revueltos y poco de fruta – le digo dejando la bandeja en la mesa de centro – toma un poco de jugo, te ayudara – le doy el vaso y ella lo toma temblorosa.
- G…gracias – lleva el vaso a sus labios y escucho el timbre de la puerta lo que la hace sobresaltar - ¿qué, qué fue eso?
- Tranquila, es solo el timbre, iré a ver quién es – ella asiente, me dirijo a la puerta y sigue sin quitar su vista de mí. Quisiera saber qué soñó que la tiene tan nerviosa.
- Hola!! ¿por qué no contestas tu teléfono? – me dice Nia entrando a la casa, le hago una seña dirigida a Kara - ¿ella está bien? – pregunta preocupada
- Si, solo está asustada – digo cerrando la puerta del departamento
- ¿Qué ocurrió aquí? – me pregunta mirando el desastre de la cocina
- Oh! Fue…un pequeño accidente, pero ya limpio
- Le…Lena – escucho que me llama
- Tranquila, ve con ella que yo me encargo de limpiar. Liego me explicas qué paso – le doy una mirada de agradecimiento y me dirijo a Kara
- ¿Estás bien? ¿Necesitas algo? – le pregunto nerviosa
- N…no, no estoy bien, solo quería…yo…
- Tranquila cariño, todo está bien – digo comprensiva
- Gracias por cuidarme y perdón por asustarte, sé que tienes trabajo, lo siento – me dice avergonzada
- ¡Hey! Nada es más importante que tú. Y no te preocupes – asiente nerviosa, es tan hermosa y se preocupa por todo
- ¡Listo! Ya quedo limpia la cocina – me dice Nia entrando a la sala - ¿Cómo te sientes Kara?
- Más tranquila, gracias. Pero ¿qué haces aquí? – pregunta la rubia y recuerdo que no le dije que Nia se quedaría con ella hoy
- Oh, yo…
- Ella vino a cuidarte, hoy tengo mucho trabajo en la oficina y pensé que seria buena idea que Nia te hiciera compañía y podían avanzar en lo de la entrevista, pero si te sientes mal puedo cancelar mi reunión y…
- ¡No! ....No tienes que seguir cancelando tus cosas por mí, ya…ya me siento mejor y trabajar me ayudará a distraerme un poco, ve tranquila – me dice con una sonrisa poco convincente
- ¿Estás segura? Diana entenderá si…
- Por favor, ve. No tienes que cancelar tus citas por mí, estoy bien – me dice con un tono algo molesto
- Kara, no quiero dejarte mal, si me necesitas
- ¡Estoy bien! Tú también tienes cosas que hacer, Nia estará aquí y no me pasará nada, por favor ve a cumplir con tus obligaciones
- Lena, vete tranquila, yo me quedaré con ella y sí ocurre algo, te prometo que te llamaré de inmediato – me dice Nia tratando de calmar el asunto, ella como yo se dio cuenta que algo le molesta a Kara, pero esta claro que ahora no quiere hablar.
- Está bien, pero por favor, cualquier cosa me llamas – le suplico, me daré prisa con mi reunión para venir temprano con ella
- Si bueno, creo que te llamaré a la oficina mientras consigues otro celular – me dice y veo que saca mi teléfono del bolsillo de su jeans
- ¿Qué le paso? -pregunta Kara preocupada
- Creo que no aguanto la ira Luthor – dice NIa en forma de broma
- ¿Estas enojada? – me pregunta con preocupación la rubia
- No, no es nada eso. Es solo que…se me cayó por anda de prisa – no quise decir que fue por el susto que avente mi teléfono, no quiero que ella se sienta culpable – hoy mismo compro otro teléfono para que podamos comunicarnos y por lo pronto cualquier cosa llamas a mi directo en la oficina por favor – digo dirigiéndome a Nia
- No te preocupes que Kara y yo nos divertiremos trabajando ¿cierto amiga? – la rubia asiente nerviosa
- Entonces, me iré, cuídate mucho Kara y por favor, termina tu desayuno – le doy un abrazo fuerte a la rubia y me despido de Nia.
Sali para L-Corp y me di cuenta que casi eran las 9 de la mañana, Sam me matará, quedamos en que llegaría a las 8 para preparar todo. Llego corriendo y tomo el elevador, si me doy prisa puedo terminar todo antes del almuerzo y volver con Kara, no quiero dejarla sola tanto tiempo.
- Señorita Luthor, la Señorita Arias la esta esperando en su oficina – me informa Jess, mi secretaria
- Muchas gracias, Jess, por favor, tráeme un café, comunícame con la Dra. Olsen y consígueme un teléfono nuevo, por favor – le digo antes de entrar a mi oficina, doy un suspiro largo y me preparo para lo que viene
- ¡Por fin llegas! ¿Por qué no contestas el maldito teléfono? Llevo toda la mañana llamándote – a veces mi amiga es un poco…bueno muy exagerada
- Lo siento, Kara se puso mal y…
- ¿Mal? ¿Qué le paso? ¿Llamaste a Alex? – veo que el semblante de su rostro cambia de uno a enojado a uno preocupado
- Tranquila, ella está bien. Fue otra pesadilla, pero estaba muy nerviosa – su rostro se relaja, sé que ella se preocupa mucho por su cuñada
- ¿Y por eso no contestabas las llamadas?
- No, no es eso. Mi teléfono sufrió un accidente y se rompió – digo caminando a mi escritorio
- Mmmm, ¿y tú estás bien?
- Preocupada – digo sentándome en mi silla – ella se veía muy nerviosa, ha tenido días malos, pero hoy…hoy me asusto mucho
- Ella estará bien, llamaré a Alex para que le visite más tarde
- No sé si sea buena idea, con lo que paso ayer no quisiera que se alterara más – digo recordando que antes de volver a casa Alex y su hermana habían peleado
- ¿Anoche? ¿Qué paso anoche? – me pregunta confundida
- ¿No te contó Alex? Volvieron a discutir, antes de que ella y yo volviéramos a casa – le digo, tal vez la pelirroja no le había contado a su novia
- Ah, eso. Tranquila, seguro lo resuelven y le vendrá bien hablar con Alex. Mientras debemos ponernos a trabajar que no tenemos mucho tiempo – la puerta de mi oficina se abre y entra mi secretaria con mi encargo
- Señorita Luthor, aquí tiene su café. Su nuevo teléfono llega en media hora y su llamada esta por la línea 3, ¿algo más que se le ofrezca?
- Nada más Jess, muchas gracias – digo tomando el teléfono para hablar con Kelly
- Con permiso – le escucho decir y sale de mi oficina dejándome de nuevo con Sam
- Hola, Kelly. Muchas gracias por recibir mi llamada, espero no encontrarte ocupada – digo apenas contestar, veo que Sam me mira con atención
- Hola, Lena. Para nada, dime ¿en qué puedo ayudarte?
- Se trata de Kara, hoy tuvo una pesadilla y se puso nerviosa, no dejaba de llorar y no quería alejarse de mi
- ¿sabes de qué trató lo pesadilla?
- No, no me dijo. Ella no quiso hablar de eso, pero la note muy alterada, además ha tenido muchos cambios de humor
- Lo mejor será verla en terapia, ¿te parece bien hoy a las 5?
- Si, me parece perfecto a esa hora
- Lena, me gustaría tener una sesión contigo también, puedo ver a Kara primero y después hablar contigo - ¿conmigo? Para qué necesitare yo una terapia, he estado muy bien
- No es necesario Kelly, yo estoy muy bien y…
- Has estado bajo mucho estrés, si no quieres hoy, puede ser mañana. Pero es importante que hables
- Bien, después de la sesión de Kara estará bien – acepté no muy convencida, hace tiempo que había dejado de ir a terapias con Kelly y ahora lo único que me importaba era la rubia
- Entonces las veré a las dos a las 5, hasta pronto
- Nos vemos más tarde, muchas gracias – digo y cuelgo el teléfono, me quedó un momento con él en la mano, sigo sin entender para qué quiere que yo tome terapia, ahora la única que importa es Kara y que le ayude a sanar todo el dolor que está sufriendo
- Lena, Lena ¿estás bien? – escucho la voz de Sam
- ¿Qué? Si, si, lo siento. Me quedé pensando
- Me di cuenta, ¿todo bien?
- Sí, hoy llevaré a Kara a una terapia con Kelly
- Eso es bueno, lo necesita
- Y al parecer yo también tendré que tomar terapia – le digo con tono de frustración
- Eso es aún mejor, tú también lo necesitas – me giro a verla confundida – llevas meses centrada solo en Kara y antes de que digas cualquier excusa como que ella te necesita y que la amas debes entender que tienes que estar bien tú para poder ayudarle. Lena, no me molesta que estés con ella, lo entiendo. Sé cuánto la amas y que darías tu vida por ella, pero me preocupa que tu vida solo gire en torno a ella
- Eso no es verdad – le digo algo molesta
- Lo es, pero no te has dado cuenta. Anda, debemos preparar todo para la reunión – me dice.
Mi vida es Kara, ella lo es todo para mí, pero tampoco es como que haya abandonado mi vida por completo, sí he estado distraída, pero mi principal preocupación ahora es ella. Sam y yo nos ponemos a trabajar de inmediato, hay muchos documentos por revisar antes de la firma, Diana llegará a las 10 de la mañana y tenemos la reunión con mis socios a las 11, si mis cálculos no me fallan, para la 1 de la tarde estaré libre de volver con Kara, estas horas me parecerán eternas y debo darme prisa.
- Señorita Luthor, la Señorita Prince ha llegado – dice Jess por el intercomunicador. Diana llego antes a la reunión
- Que pase a mi oficina por favor – digo mientras miro a Sam confundida por la llegada temprana de la morena.
- Hola, hola. Sé que aún es temprano, pero estoy segura que ninguna desayuno esta mañana – dice la morena entrando a mi oficina con una bolsa
- Hola, Prince – saluda la castaña – te he de decir que yo sí desayune, mi fabulosa novia no me deja salir de casa sin antes haber comido, pero te puedo asegurar que cierta Luthor viene con el estómago vacío – dice mirándome y es cuando mi estomago da un vuelco, por el susto y las prisas me olvide de desayunar y solo he bebido café
- Que bueno que vengo preparada y traje los favoritos de Lena – dice mostrándome la bolsa de mi restaurante francés favorito
- Eres un ángel, muchas gracias, Diana – digo emocionada, hace meses que no como Croissants de ese restaurante - ¿cómo supiste que son mis favoritos? – digo acercándome a ella y dándole un abrazo
- Eso amiga mía, es información clasificada, tú solo disfruta este manjar y déjate consentir – me dice con una sonrisa
- Y bien que te hace falta – dice Sam con una sonrisa – yo las voy dejando solas, iré a terminar los preparativos de la junta
- Oh, pero deja que te ayude – le digo, me siento culpable por haber llegado tarde y todavía dejarla que se encargue de todo
- Para nada, solo me retrasaras – dice en forma de burla y le doy una mirada – tú disfruta ese delicioso desayuno francés y deja que yo me encargue de todo. Prince, asegúrate que esta mujer desayune porque te apuesto lo que quieras a que solo tiene café en su estomago
- No te preocupes por eso, yo me encargo de ella – le dice Diana con una sonrisa y mi amiga sale de la oficina – bien, cuéntame ¿estás lista para firmar nuestro contrato? – me dice tomando asiento en el sofá de mi oficina y me acomodo a su lado
- Pues, como pudiste darte cuenta Sam, se ha encargado de todo – digo y tomo la bolsa sacando un bocadillo
- Hey, son para las dos – dice y me quita la bolsa. Toma uno y lo lleva a sus labios – oh! ¡¡¡Son deliciosos!!! Casi podría jurar que son los mismos que comimos en Paris ¿recuerdas?
- ¡Claro! ¿Cómo olvidarlo? Sam, Steve y tú me retaron a comer 10 de esos deliciosos bocadillos
- Y no lograste el reto, por cierto aun me debes una botella de vino por esa apuesta – dice riendo
- No te preocupes, que siempre pago mis deudas – le digo y pruebo el bocadillo y es delicioso, me recuerda a la vez que fui con Kara a comerlos, claro que ella sí logro comerse más de 10 Croissants.
- Dime, ¿qué te preocupa?
- ¿Perdón?
- Te conozco Lena y sé que algo ronda por esa cabecita irlandesa tuya, dime ¿qué es? ¿se trata de Kara? – doy un suspiro largo, ella me conoce bien – mmmm ese suspiro me lo ha confirmado
- Es solo que, hoy tuvo una pesadilla y se puso muy nerviosa – digo preocupada
- ¿Y está bien?
- Sí, se quedó con Nia, una amiga de ella que trabaja en Catco, ambas trabajaran en lo de tu entrevista
- Entonces ¿qué te preocupa? – bajo la mirada y no se qué contestar, desde s accidente me preocupa todo de ella – sabes que puedes confiar en mí, sé lo que sientes por ella y entiendo que te preocupes por lo que le pasa
- Me asusté mucho, ¿sabes? Cuando la escuche gritar…yo…- una lagrima comenzó a formarse en mis ojos – sentí mucho miedo de que algo le pasara
- Pero ella está bien, solo fue un susto. Debes entender que en su estado ella está muy sensible, pero estás ahí para ella, no está sola y tú tampoco, tienes a muchas personas que te quieren y se preocupan por ti.
- Lo sé, pero no me gusta que me pidan que me aleje de ella
- Lo dices por la plática de anoche ¿cierto? – asiento mientras limpio las lágrimas de mis mejillas que se habían escapado de mis ojos – no creo que Sam y Alex lo digan solo por querer alejarte de ella, ambas se preocupan por ti. En especial esa loca amiga que tenemos, ella te adora y le duele verte sufrir
- Yo no…
- Lo estás, sufres al saber que ella no te corresponde y te torturas al estar a su lado y sí, es tu decisión y de verdad te admiro por ello, yo no sería capaz de hacer algo así. Pero también creo que debes pensar un poco más en ti, salir y divertirte. Dime una cosa, si fuera al revés. Si tú fueras la que está pasando por lo que pasa Kara ¿qué harías? ¿Te gustaría que ella dejara su vida de lado por ti?
- ¡Nooo! ¡Claro que no!
- Entonces, ¿Qué crees que haría ella por ti? ¿te dejaría seguir alejándote de todos? O ¿te diría que continúes tu vida?
- Yo…yo no puedo dejarla
- No te digo que lo hagas, sé que ella te necesita tanto como tú a ella, pero deja que ayuden, esa familia que has hecho se nota que te aman y se apoyan entre todas. Permite que te ayuden y déjate consentir tú también
- Yo…yo…
- Mira, hoy en nuestro almuerzo quiero que me prometas que te dedicaras a divertirte - ¿Almuerzo? ¡Diablos! – lo olvidaste ¿cierto?
- Lo…lo siento, pero es que paso tanto que…
- Tranquila, no estoy molesta – dice tomando mi mano – como sé que estás preocupada por Kara en estos momentos, te perdonaré el almuerzo, pero no te podrás negar a una cena conmigo esta noche, sin excusas. Deja que Alex y Sam se encarguen de Kara esta noche que TÚ señorita Luthor te tomaras un descanso
- Pero yo…
- NADA! Tiene una cita conmigo y no acepto negativas ¿entendido? - ,e dice firma, ni siquiera me dejo negarme y tuve que asentir aceptando su propuesta. – Excelente, pasare por ti a las 8 en punto, ni un minuto más ni un minuto menos – dice sonriendo, terminamos nuestro desayuno y minutos después llega Sam para indicarnos que todo esta listo y podemos pasar a firmar el contrato.

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Espero que les haya gustado y lo disfrutaran. Yo empiezo a amar a Diana y su forma de ser con Lena.
Recuerden votar y comentar.
Saludos y nos leemos pronto 🤗🤗

Enamorada de ti (AU Supercorp) Completa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora