Vulnerable

XIV

La túnica que Lucius le había mandado como regalo navideño se acomodaba a su cuerpo de una forma que lo hacía sentir increíblemente cómodo, obligándolo a amarla de inmediato, no es que le costara demasiado hacerlo, más aun cuando sentía que lo confortaba un poco para presentarse esa noche a Malfoy Manor, donde un montón de sangrepuras inadvertidos de la invitación expresa del matrimonio Malfoy hacia él, se sentirían consternados por su presencia, dado su condición clara de mestizo y su compañía, siendo que en un acuerdo entre los chicos que James seria el que se presentara a la víspera de año nuevo junto a él.

Lo que no le encantaba al Gryffindor, pero cumpliría dado las pocas opciones alrededor, debido que, si bien su condición de sangre era mala sería peor llevar a otro mestizo con él, a un recién repudiado Black o acudir solo directamente, cosa que con sinceridad le daba ligero temor por las criticas que habría al día siguiente. 

Por ello, suspirando, tomo el brazo que James le ofrecía, despidiéndose en un suave movimiento de los otros dos chicos y los padres del morocho que no estaban muy conformes con perder a su bebé a unas horas del año nuevo, menos aun de perder a su nieto ni a otro bebé proclamado, pues después de todo, la señora Potter había terminado adoptándolo de palabra, al igual que a Sirius, lo que le hacía sospechar que Euphemia era una mamá gallina en búsqueda de cuantos pollitos pudiera encontrar.

Entonces, transportados nuevamente por Dobby, llegaron al ala privada de la mansión, a pesar de la negativa de Lucius de ser agradable con James, siendo seguramente el artífice de ello Narcissa. Dándole una señal de satisfacción al pequeño elfo le pidió que trajera consigo algunas galletas mientras se sentaba a esperar en el salón privado de Cissa, a que su amigo tuviera tiempo de ir a recogerlo, dado que la fiesta ya había comenzado y debía de estar atareado con las otras personas que había invitado a tan importante cena.

Suspirando por la clara tensión en el cuerpo de James pellizco su muslo para hacerlo saltar en su lugar y intentar tranquilizarlo.

—Deja de estar tan impaciente, la noche no será tan mala mientras Cissa este a nuestro lado y estoy seguro de que lo conseguirá— dijo mirando sus ojos avellana, que lucían como un ciervo sorprendido por las farolas de un automóvil muggle, murmurando ahora continuo —Apuesto que sacara la tarjeta de estoy embarazada y por eso puedo ser descortés con ustedes el resto de la noche, Lucius se encargara de lo demás.

Dejando caer los hombros ligeramente resignado James saco su labio inferior en un puchero infantil que le dio cierta gracia, diciendo —Eso es bueno, pero no entiendo porque alguien prefiere una fiesta elegante a una cena con los que amas, es vanidoso hacer este tipo de cosas.

Suspirando por querer ser paciente, intento explicarle la situación lo más fácil posible sin comprometer las confidencias de Lucius —Mira cariño, tus estas mimado y tu familia nunca hizo alarde de su posición o riqueza porque decidió tener a un niño lo más feliz que podía, sin involucrarse en toda esta línea de familias sangrepuras luchando por poder o estatus. Lucius creció en un hogar donde su padre lo valoraba sobre su familia, con su muerte quedo como patriarca Malfoy, el matrimonio con Cissa y el embarazo, ahora tiene la presión de cumplir las expectativas de este círculo, pues después de todo son conexiones y el sigue siendo parte de una línea familiar muy importante.

Haciendo una mueca en la parte sobre ser mimado pero aceptándolo, James ofreció una solución poco practica —Podría ser como mis padres y ya, ahora es patriarca, el toma las decisiones— negando por la falta de análisis alrededor de su propuesta dijo— No es así de sencillo, no te sales de un circulo tan cerrado como los sagrados veintiocho tan fácil, ni del Ministerio, Lucius es tal vez el mago joven más rico de toda Europa y necesita controlar todo alrededor de eso. En lugar de "salirse" esta cambiando las reglas que su padre le impuso y eso algún día le dará la oportunidad a su hijo o hija de tener la vida que el quiera, amando, trabajando o creyendo en lo que el quiera.