shy ➳ taekook

❀¦ nueve

JungKook abrió lentamente sus ojos mirando el techo de su habitación, la claridad que se asomaba a través de la ventana le hacia saber que ya era de mañana y todo lo que había sucedido parecía más un sueño que la realidad.

Pero al quitarse la sábana de encima, para su triste realidad, todo había pasado de verdad y los síntomas del celo todavía los tenía a flor de piel. Volvió a acostar su cabeza y sus manos llegaron a su rostro, restregandolo con pesar.

No podía creer lo que había sucedido, estaba tan confundido, no sabía cómo sentirse pero la pena y vergüenza dominaban todos sus sentidos sin duda.

Su mirada viajó por el cuarto y en la mesa de noche estaba su celular, tenía unos cuantos mensajes que al desbloquearlo pudo saber quienes eran los remitentes; Lalisa, ChaeWon, YoonGi, SeokJin y un número desconocido.

Todos los mensajes eran preguntando sobre cómo se encontraba aunque Lalisa decía que podía tomarse días libres hasta que su celo se terminara pero el que más le llamó la atención fue el número desconocido.

“ Espero puedas recuperarte pronto y... Lamento lo sucedido, JungKookie. Espero podamos hablar pronto.”

Decir que se había tomado el mensaje con total tranquilidad iba ser la peor de las falacias nunca antes creadas, el corazón le latía con fuerza y el calor en su anatomía aumentó un poco más, aquellas palabras solo le hicieron recordar con más detalle aquel vergonzoso incidente.

Le hacían recordar como se sentían los labios de TaeHyung rozando su piel, sentir su aliento chocando contra su ser, su voz gruesa cerca de su oído. Estaba consiente pero era más su omega que él actuando o bueno, dejándose hacer.

A veces odiaba a esa criatura, su reacción era tan sumisa al alfa que quería.

Aunque había algo que no se explicaba del todo y era el hecho de haber tenido esa explosión aún cuando tenía los supresores para que el celo no fuera tan intenso pero desde la primera vez que se encontró con TaeHyung ese día, sus sentidos habían sido disparados, la segunda vez no pudo soportarlo más y al recordarlo, el color rojo dominaba por completo su rostro.

— ¿Cariño? — escuchó la voz de su madre detrás de la puerta, no le había escuchado tocar ¿Tan perdido en su mente estaba? — JungKook, si estas despierto me avisas para subirte algo de comer y pases tu celo de forma natural. Has estado tomando demasiados supresores así que iras a la universidad en tres días.

Bueno, así huía de TaeHyung y las tutorias que debía darle, también el hecho de que Jennie cumplió con su amenaza.

— Gracias, mamá... — trató de decir en voz alta y los pasos de su madre le indicaron que había escuchado.

🍥🍥🍥

— No sé pero o de verdad descargaste casi todo lo que trae el celo con el arrebato de ayer o en serio los supresores te están causando problemas.

YoonGi le visitó el día siguiente en su reposo, era el tercer día del celo y lo había pasado tan aburrido — Se siente como una cuarentena — murmuró. Habían hablado de aquello por mensaje el día anterior pero sentía algo de vergüenza todavía.

YoonGi que estaba sentado a un lado de su cama rodó los ojos por su tono de voz y el hecho que ni siquiera le miraba por la vergüenza — Casi no me dejas entrar y eso que soy yo, no quiero imaginar como te pondrás cuando tengas que enfrentar a Kim, mocoso.

El rostro de JungKook se convirtió en un poema, cerró los ojos y se cubrió la cara con uno de los cojines — ¿Podríamos dejar de tocar el tema al menos hasta que sea necesario?

YoonGi hizo como si lo estuviera pensando — Sería muy considerado de mi parte tomando en cuenta que te incomoda... — JungKook asomó su mirada de borrego por la almohada creyendo que si había algo de bondad en YoonGi a pesar de todo — Pero como tú te pasas por donde no te da el sol lo que te digo sobre Park, entonces ni siquiera lo pensaré.

Ahí llegaron sus ilusiones.

— Hyung, eres el peor amigo del mundo.

El pálido cruzó una pierna sobre la otra sacando su teléfono — Gracias — masculló — Es curioso que Kim haya estado tan desaparecido, no dice ni pío por ningún lado.

El azabache retiro el cojín de su rostro y confundido le miró, alzando una de sus cejas — ¿Desde cuándo lo sigues? — cuestionó terminando de sentarse en la cama mientras cruzaba sus brazos.

Bueno, había metido la pata. Ahora era él quien no quería hablar pero eso tan solo le iba a dejar peor al demostrar interés por guardarlo — Park me siguió y le devolví el seguimiento. Siempre se pasan presumiendo, todo el tiempo y ahora, no hay nada.

JungKook le miró casi sin creer lo que había dicho, aparte era la manera perfecta para evadir el tema de TaeHyung — ¿Acaso tú estás cediendo a Park JiMin? Porque una cosa es seguirlo y otra cosa es estar tan pendiente de él.

YoonGi solo musito un pequeño ruido sin interés alguno en lo que decía Jeon, siempre que se empeñaba en fastidiarlo es cuando menos le salía pero estaba feliz de que su hyung esté considerando a uno de sus pretendientes. Si YoonGi se fijaba en JiMin era por algo y confiaba completamente en ello.

— ¿No te parece que tienes problemas más graves como para estar pendiente de cosas ficticias?

Y el azabache le tiró un cojín en respuesta, pues tenía razón pero fue divertido aquel momento mientras duró.