Colegiala

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—vamos Ai-procuraba darse animo la joven inteligencia mirándose al espejo.— Eres fabuloso, ahora eres el mayor de los ignis, además de que estar saliendo con la maravillosa Pandor 

—cabeza de chorlito—grita windy desde el otro lado de la puerta.—hay que irnos, si no vamos a llevar tarde

Ai ignoró las palabras de su hermanos, arreglo por última vez la corbata, tomo la bolsa que escogió por mochila y salió del cuarto.

En la sala de stand se encontraban el resto de sus hermanos, cada uno de ellos al igual que él cada uno de ellos usando una copia del uniforme de la escuela donde asistían sus respectivos orígenes, así como una mochila que usaran durante los próximos seis meses que asistían a la escuela.

—¿Ya nos vamos?

—¿Por que tenemos que comportarnos como esas criaturas insignificantes?—pregunta Ligthning, siendo el más indignado por la cuestión.

—Por que Pandor y las chicas tendrán su primer día de escuela

—¿y por qué tenemos que ir? 

—porque si no quieres que Yusaku le diga a Revolver que tuviste el descaro de mirar "fijamente" a una de sus hijas—Dice Windy—las acompañaras en su primer día.

—No le tengo miedo

—Si claro—con un tono sarcástico— lo dice el ignis que tuvo que hacer trampa para no ser eliminado por el hacker.

—cállate, solo por que estábamos en guerra.

Ambos  hombres siguieron peleando, siendo ignorados por el resto, siguieron caminando hasta el centro de la ciudad.

Tenían que recoger a todas las chicas en el centro antes de ir directamente a la escuela; y es que aunque realmente no tenían necesidad para eso,  la curiosidad de la menor de las Hanoi por saber sobre la vida de los humanos, hizo que Ryoken les permitiera conocer más sobre la vida humana, logrando que todas ellas tomarían clases aunque sea por un año, mientras tanto  Yusaku les menciono que ellos, los ignis, siguieran el ejemplo de sus hijas políticas.

Aun cuando Ai quiso oponerse a la decisión,Yusaku le advirtió que tenía que asistir, si es que quería tener una oportunidad con la mayor de las niñas Hanoi con todas sus piezas.

Los cuatro chicos llegaron al punto de encuentro y no tuvieron que esperar mucho tiempo para ver a lo lejos a cinco androides Soltis; Pandor y Aqua hablaban entre ellas, Nemesis caminaba concentrada leyendo un libro, Vesta se mantenía callada, mientras Calix era la más animada de todo el grupo.  

Todas ellas usaban una versión femenina de uniforme, aunque cada una lo usaba con diferente estilo, Vesta y Nemesis lo usaban acorde a las reglas del instituto, Pandor y Aqua habían escogido una corbata que combinada perfectamente con sus cabellos y Calix lo mantenía desaliñado, con el saco medio puesto y una calceta mal puesta. 

—Pandor-chan—grito Ai, corriendo hacia la mencionada, logrando abrazarla.—te vez tan increíble como yo. Definitivamente seremos la envidia de todo el salón. 

Y es simplemente no podía creer que su linda novia se viera mejor con ese uniforme de la escuela secundaria de Den, esa corbata aguamarina con el broche en forma de corazón y un par de aretes con el logo de Hanoi, esta imagen la tendrá muy fuertemente guardaba en candado en su memoria ram.

—Hola Ai, me alegra verte.

—¿acaso no merezco algo por ser puntual?

 Pandor sonrió, adivinando las intensiones de la inteligencia, tomo la mano de su novio quien no pudo estar más que emocionado. 

Un día ordinarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora