Your highness (otra de George)

Revives

Cuando no podía dormir, iba a ver al herido. Ya faltaba menos de un mes para mi boda, y tendría que compartir habitación con un completo desconocido, que encima aún no había conocido.

Dentro de dos días lo iba a conocer. Y esta era una de las noches en las que me quedaba con el herido.

Esta noche era diferente, esta noche, abrió los ojos. Estaba asustado, pero al verme, su expresión se sauvizó

- Tn - susurró - Tn, estoy vivo - sonrió

- Eh - dije confusa, no sabía que él me conociera

- No me digas que el mortífago me ha dejado mal la cara. - dijo tocándose la cara, y de pronto su pelo cambiaba de color poco a poco, y su cara se estaba transformando.

- ¿Fred? - pregunté sorprendida - Fred, estás vivo - lo abracé, hasta que me di cuenta de que estaba herido aún - Lo siento. ¿Qué te pasó?

- Un mortífago ha conjurado imperius sobre mí. Me ha hecho darle un pelo mío. Y luego me hizo tomar poción multijugos. Creo que era eso. Claro está que era una poción extraña, porque al parecer cuando estás insconsciente aún funciona. - me explicó - ¿Hemos ganado? ¿Dónde están los demás? ¿Y George? ¿Por qué no estáis juntos besándos?

- Fred, la batalla fue hace un año. Hemos ganado sí. Pero hemos perdido a gente. - dije con una sonrisa triste - Y con respecto a tu hermano, está saliendo con Angelina. Le dejé recuperarse de tu pérdida y la de Percy, pero solo he conseguido alejarlo. Al menos me he recuperado de la de mi padre, y mi mejor amiga. Eso creo.

- Tn - susurró abrazándome

- Debes volver a casa - le dije sonriendo - Te llevaré y les diré a los demás que me caso. Como sois amigos, os voy a invitar, y no se lo dije todavía a tu familia.

- No te vas a casar - dijo demandante - No si no es con mi hermano. Mira, sé que George es estúpido. Y que se ha ido, vale, pero aún te ama. Soy su gemelo, y lo he visto en tantas situaciones, que sé que aún te ama. Él ha pensado que ya no lo querías, y que has encontrado a alguien mejor que habrá estado contigo cuando todo pasó. 

- Pero solo he pensado en él - dije

- Ya lo sé. Y él en tí - me acarició la mejilla limpiándome las lágrimas. - Vámonos. 

- Iré a buscarte algo - dije levantándome rápidamente. Pero volví - ¿Qué tal si duermes un rato y mañana temprano nos vamos?

- ¿Es de noche? - asentí y me atrajo a él. - Duerme conmigo por favor.

Asentí y dormimos juntos. No era extraño para nada. Solos dos amigos durmiendo abrazados.

La mañana siguiente, todo el castillo se movía de un lado a otro. Fred había revivido, y las órdenes de la princesa había que cumplirlas.

Fred llevaba un traje de príncipe, que le quedaba genial. 

- Bien, Fred, vamos a ir a caballo. Te han revisado todo, y pareces estar bien. Solo te quedaba aprender a andar. ¿Recuerdas montar? - pregunté

- Claro. Connor y yo nos llevamos bien. El de mi hermano es Travis. Ambos caballos preciosos - contestó orgulloso 

Sonreí - Pues va, estamos perdiendo el tiempo. 

Montamos a caballo ambos y salimos corriendo haciendo una competición. Los guardias no le dieron tiempo subirse a sus caballos y seguirnos.

Al llegar a La Madriguera, vimos a Angelina disfrutando del viento, con los ojos cerrados.

- Fred - le susurré - ¿Qué tal si la sorprendes? Después de todo, no llegasteis a cortar, por lo que sigue siendo tu novia.

Él asintió y se acercó con el caballo, y su traje de príncipe. Ambos se abrazaron y se besaron. Era un beso lleno de amor, y pasión. Me acerqué.

- Vamos príncipe azul. - dije bajándome de mi caballo Poseidón. - Hola Angelina

- ¡TN! - exclamó separándose de Fred para luego abrazarme. - Siento lo de George. De verdad que lo siento. Él me dijo que estabas con alguien, y lo creí.

- No pasa nada. Tranquila. Lo entiendo. - dije sonriéndole. 

Angelina nos ayudó a entrar sin hacer ruido y justo la señora Weasley llamó a Fred

- Fred ayúdame con el pollo - le mandó

- No soy Fred, soy George, ¿enserio mujer como te puedes llamar mi madre? - preguntó Fred bromeando. Angelina y yo le pegamos una colleja y rápidamente nos escondimos viendo la escena

- Lo siento cariño - dijo la señora Weasley girando la cabeza y mirando a su hijo con lágrimas en los ojos.

- Es broma, soy Fred - sonrió débilmente Fred

- Fred, por favor - le dijo Angelina entrando.

- ¿Necesitas ayuda mamá? - preguntó George entrando a la cocina - ¿Tn? 

- Hola George - saludé tímida 

- Angelina, ¿qué? - pero se paró al ver a Fred

- George, lo siento, pero lo nuestro tiene que terminar. Yo nunca corté con Fred, y es hacernos daño. Tú amas a otra - explicó Angelina - Y yo a otro

- Hola hermano - saludó Fred. Molly me miró sorprendida y volvió a llorar. - Tranquila mamá. Solo fue un mortífago, conjuraron imperio sobre mí. El que murió es él, yo estoy vivo.

- ¡Fred! - exclamó George abrazando a su hermano. 

Al escuchar eso, los demás hermanos bajaron las escaleras corriendo. También se unieron al abrazo.

Y en nada, todos estábamos comiendo con sonrisas en la caras. Olvidando todo lo malo.

- Y ese día mamá le pegó al médico - terminó de contar Ron. Todos reímos.

- Bueno - dijo el señor Weasley al terminar de reírnos - Gracias Tn por cuidar tan bien a Fred. 

- Se ha portado bien - dije divertida

- Estaba insconsciente, no te joroba - dijo Fred sonriendo. Todos sonreímos - Ah, claro, Tn también ha venido para deciros algo

Lo miré confundida hasta que me acordé. Luego miré a George con lástima, solo esperaba que de la nada me dijera que me amaba y que no hiciera tonterías, pero nada pasó.

- Dentro de tres semanas he de casarme. Por eso de la corona, y me gustaría que vinierais. Papá le encantaría que vinierais - dije

- Claro que iremos si es lo que quieres - sonrió Ginny

- Gracias - sonreí.

La comida a partir de ahí, transcurrió en silencio. Y después de ayudar a fregar a la señora Weasley, me iba a ir.

- Tn, espera - me dijo Fred - ¿Puedo al menos quedarme con Connor?

Sonreí - Claro, pero Travis lo va a echar de menos. ¿No crees?

- Eso no es problema. Angie amor, ven. Hoy vas a montar a caballo. DOS VECES - sonrió. Ella se acercó suspirando.

A la ida, Angie iba detrás de Fred. Y cuando se fueron, Angie iba en el caballo de George, y Fred en el suyo.

- Cuidaros - dije antes de que se fueran.

- Cuídate tú también - me dijo Angelina abrazándome

- Tn, iré a la boda. Pero en la que te casas con mi hermano, y no con un cualquiera que no amas - me dijo Fred

- No puedo amar - le respondí - Una veela solo puede amar una persona en su vida. Ese es George.

Angelina se llevó las manos a la boca y me volvió a abrazara - Por Merlín, no lo sabía. Lo siento. De verdad que lo siento.

- Angie, tranquila. Todo está solucionado. - le dije - Iros a casa, se va a hacer de noche.

- Nos vemos - me dijo Fred revolviéndome el pelo. 

Los despedí y me fui para dentro. Muerta de calor.