Corazones Mentirosos | kookmin 국민

Capítulo 17

Sus platos ya habían llegado y ambos hombres se relegaban a comer en silencio, hasta que el más bajo habló.

—¿Cómo terminaste aquí en Seúl? —preguntó Jimin, llevando un trozo de filete a su boca.

—Vaya, qué directo. —rió dando un sorbo a su copa.

—Sólo saco conversación.

Jungkook suspiró y meditó su respuesta.

—Cuando mi padre fundó Seoul Steel Group tuvimos que mudarnos a la capital para que él pudiera hacer sus negocios con más facilidad. Eso y que la familia de la prometida de mi hermano era de Seúl, así que también fue para hacer la boda aquí y que pudieran asistir todos sus seres queridos sin problemas. ¡Ay, la dulce Hyo! Me caía muy bien. —murmuró para dar un bocado a su comida.

—¿Se divorciaron? —preguntó curioso.

—No, murió de depresión unos meses después de haber dado a luz. La depresión posparto no es un mito. —rió bajito ganándose una mirada extrañada de Jimin.

—¿Y lo dices tan a la ligera?

—Reír para no llorar, querido Jiminie.

—¿Y qué pasó con tu hermano y su hijo?

El castaño pudo notar a la perfección cómo toda la despreocupación en la pose de Jungkook se iba, dejando a su paso sólo tensión, con sus manos encrispadas alrededor de sus cubiertos.

—Qué curioso eres. ¿Cómo llegaste tú a Seúl?

—Yo pregunté primero.

—Y yo no he preguntado, me toca. —rebatió con una sonrisa llena de sorna.

—Me vine por caprichos de mi padre. Dijo que necesitaba prepararme para ser su heredero así que me tocó mudarme con él y dejar a mi madre en Busan. Iba por la mitad de mi primer posgrado para entonces. —explicó tras tragar.

—Eres muy joven para tener tres títulos.

—¿Qué puedo decir? Aprendo rápido y soy perseverante. —se encogió de hombros—. Me recibí en Busan como ingeniero hace 5 años, fue para los primeros meses, ya a la mitad de ese mismo año estaba iniciando mi primer posgrado. Para el segundo me tardé un poco más, tuve... problemas personales. —su voz bajó unos tonos al decir lo último, reflejando lo lúgubre de los recuerdos que venían a su mente.

—¿Murió tu perro? —bromeó Jungkook sin ser acompañado por la risa de Jimin.

—Me toca. ¿Qué pasó con tu hermano y su hijo?

—Sólo puedes preguntar por uno. —dijo alzando su gruesa ceja.

—Tu hermano, ¿qué ocurrió con él?

Pudo más la curiosidad, queriendo saber el motivo de porqué Jungkook tenía pesadillas con él.

—Baekhyun se... —aclaró su garganta— se suicidó meses después de la muerte de su esposa. —respondió con la mirada gacha, fija en el mantel de impecable blanco.

—¿Y su hijo?

—Me toca. ¿Qué motivos personales te hicieron relegar tu formación especializada?

—Yo... luego de mudarme a Seúl me enamoré de un chico y... tuvimos una relación... intensa. Tomó mucha de mis energías por lo que mi focal en esos momentos no era estudiar. —ahora era Jimin quien rehuía la mirada, llevando un trozo de filete a su boca e interesándose en masticarlo bien.

—¿Pospusiste tu segundo posgrado por un chico? —preguntó incrédulo, casi rozando lo ofendido.

—Fue más profundo que eso. Me toca, ¿qué pasó con el hijo de tu hermano?